El obispo de Teruel y Albarracín apoya la manifestación del tren: "Todo Aragón debe estar, si es posible, en la manifestación para exigir con dignidad ese tren que necesitamos"
Ha publicado un artículo de opinión en DIARIO DE TERUELEl obispo de la Diócesis de Teruel y Albarracín, Antonio Gómez Cantero, ha escrito eun artículo apoyando la manifestación del domingo en Valencia.
David en el andén, por Antonio Gómez Cantero
Me sorprende ver en el televisor un anuncio de gente parada en un andén, esperando un tren que no llega. Y me sorprende, porque el anuncio no se refiere a nosotros, pues la gente del andén es la de Cataluña. Ellos tienen casi todo y nosotros, pues, seguiremos siendo los grandes olvidados.
No creáis, pero me hago muchas preguntas sobre la justicia equitativa, la igualdad entre los pueblos, y el desarrollo de los menos favorecidos. Y hablar de despoblación o de asentamiento poblacional, es también hablar de comunicaciones, de acercar puntos distantes, de darnos oportunidades reales y no cortinas de humo, a las que nos vamos acostumbrando.
Los últimos días de mayo de este año la prensa anunciaba que el Corredor Ferroviario Mediterráneo, que unirá Almería con Tarragona y Francia, estará terminado en el 2023. Esta es la lucha de David contra Goliat, que todos conocemos por la historia sagrada, de cuando éramos pequeños. El gigante siempre necesita más, es orgulloso y arrasa con todos, da seguridad a su pueblo porque todos saben que al final ganará la batalla de dos mandobles.
Parece que nuestra tierra de fronteras seguirá siendo eso, el lado olvidado que hace frontera con los poderosos, con los que ya tienen todo, pero que insaciablemente siempre exigen más. La estrategia de Goliat es la seguridad en sí mismo, el orgullo de saberse fuerte y bien equipado. La estrategia del pobrecillo y desnudo David es buscar el lado flaco de Goliat y tener muy claro que, si no vence al gigante, su pueblo se hundirá en su propia miseria. Por eso la precisión del golpe es fundamental.
Todo Aragón debe estar, si es posible, en la manifestación del domingo 7 de octubre en Valencia para exigir con dignidad ese tren que necesitamos, más que los que ya tienen mucho y quieren todo. ¿Cuál será nuestra piedra y la honda lanzadera? ¿Dónde estará la certeza de nuestro golpe? Creo que sólo nos queda esta acción unitaria, donde todos, codo con codo, luchemos por nuestros derechos equitativos, no sea que el pobre David, y nosotros con él, se quede para siempre mirando en el andén las vías intransitables del pasado.
A no ser, y es un riesgo, que todo esté ya cedido de antemano. Imaginaros que este corredor fuera parte de la negociación para que los partidos que quieren hacer una nueva Cataluña apoyaran al nuevo partido en el Gobierno. Eso sí que sería una jugada redonda. Además de hacer el corredor con el dinero de todos, luego nos cobrarían aranceles por pasar las mercancías por su nueva República camino de Europa. Esto sí que sería para rasgarse las vestiduras, y es que todo es posible en la viña del Señor.