El Juzgado de Menores de Teruel resuelve con justicia restaurativa el caso del chaval que disparó contra viviendas
La Fiscalía considera que es lo más beneficioso para los afectados y el menorEl caso del menor que en noviembre del año pasado disparó contra las ventanas de tres pisos del Arrabal desde la zona de Pomecia se resolverá finalmente mediante la justicia restaurativa, consistente en una mediación con los afectados y el sometimiento del menor a un programa educativo, según ha informado la Fiscalía de Menores de Teruel.
Los hechos ocurrieron en noviembre pasado cuando un autor desconocido disparó con una escopeta presuntamente de perdigones contra varias ventanas del viviendas del Arrabal que dan a Pomecia. Las pesquisas policiales permitieron identificar al autor, un menor que en un principio negó haber sido el responsable y derivó la responsabilidad hacia otra persona.
No obstante, ante el equipo técnico de la Fiscalía de Menores el muchacho reconoció que había sido él, y ante el arrepentimiento mostrado y su voluntad de reparar el daño, se ha iniciado un procedimiento de justicia restaurativa consistente en una mediación con las partes afectadas y una tarea socioeducativa con el menor a través de distintas actividades y trabajos educativos.
El fiscal de Menores, Benito Soriano, indicó que el menor había reconocido finalmente ser el autor y que asumía cualquier responsabilidad. Recordó que en casos así, cuando no hay violencia grave, se intenta solucionar por otras vías sin necesidad de llegar a una sentencia, como va a hacerse en este caso trabajando en una solución extrajudicial.
Soriano indicó que entre el sesenta o el setenta por ciento de los procedimientos de menores se intentan resolver de esta forma, de manera que el equipo técnico elabora un informe una vez concluido todo el proceso y si es positivo se pide el archivo al Juzgado de Menores.
Comentó en este sentido que es “beneficioso” para la víctima porque puede poner cara al delincuente o al menor y restaurarse el daño provocado, mientras que la solución “es muy educativa para el menor y menos sancionadora”.