El invierno en Teruel: oscilaciones de hasta 42,4 grados en la capital y récord de máximas y mínimas
Alcanzó la temperatura mínima absoluta de su serie (1987-2021), con -21 grados, y el récord de máxima con 21,4Lo llamativo de este invierno que termina el próximo sábado ha sido el fuerte contraste, con récord absoluto de temperaturas mínimas en 14 estaciones de la red de la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet) el 12 de enero y también récord de máximas días después.
"En enero no se pudieron dar más cosas en un mismo mes" con oscilaciones térmicas de hasta 42,4 grados en la ciudad de Teruel, donde se alcanzó la temperatura mínima absoluta de su serie (1987-2021), con -21 grados, y el récord de máxima con 21,4, ha destacado el delegado territorial de la Aemet en Aragón, Rafael Requena, en la rueda de prensa para presentar el balance del invierno y un avance de la primavera astronómica que llegará a la península a las 10.37 horas del sábado.
El trimestre invernal ha terminado con una anomalía positiva de 7 décimas en España, lo que lo convierte en el sexto año más cálido del siglo y el décimo tercero desde el año 1961 y, a falta de datos concretos, Aragón ha sido uno de los territorios que ha contribuido a ese carácter cálido.
En el caso de las precipitaciones, Aragón también ha contribuido de forma positiva al carácter húmedo del trimestre, que ha sido un 11 % más lluvioso de la media del periodo, ha explicado Requena.
Diciembre en Aragón tuvo un comportamiento térmico normal, con una décima positiva, y fue húmedo, con un 4 % más de lluvia con respecto a las medias de referencia.
Enero, según Requena, ha sido el mes "más significativo" del invierno, frío y húmedo, con una anomalía térmica de 1 grado positivo en Aragón, con zonas del norte de Huesca, del Alto Jalón y Jiloca de hasta 4 grados por debajo de la media del mes, anomalía "bastante significativa", mientras que en el valle del Ebro fue normal, +0,4 grados.
Llovió un 77 % más de media, un 196 % más en Fraga, un 152 % más en Huesca, un 143 % más en Teruel y un 79 % más en Zaragoza.
La efeméride más significativa fue, después de la nevada que dejó la borrasca Filomena el 9 de enero, la caída de temperaturas posterior, que el 12 de enero alcanzaron los 25,4 grados bajo cero en Bello, los -23 en Santa Eulalia, los -21,3 en Calamocha, o los -21 en Teruel que midieron los observatorios de la Aemet, ya que en estaciones de colaboradores, como la de Torremocha de Jiloca, se registraron hasta 30 bajo cero.
Después llegó Hortense, con rachas de viento de hasta 179 kilómetros por hora en Panticosa-Petrosos, a 1.850 metros de altitud, la más fuerte de España, los 122 en Valdespartera-Zaragoza y los 123 en Andorra (Teruel).
"Contrastes pronunciados de fenómenos extremos que parece que es algo a lo que nos tendremos que acostumbrar", ha reconocido el delegado territorial de la Aemet.
Lo más significativo del mes de febrero ha sido el carácter térmico cálido, con una anomalía de hasta 3,7 grados por encima de la media en Teruel capital, de 3,4 en Zaragoza y de 2,7 en Huesca.
En cuanto al año hidrológico, Requena ha informado de que va ajustándose a la distribución normal de la precipitación.
El "último coletazo" del invierno se espera desde hoy hasta el domingo, que en Aragón se producirá mañana con precipitaciones en el Pirineo, sureste de Zaragoza y suroeste de Teruel, que aunque no serán "especialmente significativas", debido a la bajada de temperaturas lo serán en forma de nieve.
La predicción estacional de marzo, abril, mayo apunta a que solo en la franja mediterránea hay posibilidad de que las temperaturas estén por encima de lo normal, mientras que en el resto de la península "no hay nada significativo", como tampoco en el aspecto de precipitaciones.
El avance para abril-mayo-junio prevé una mayor probabilidad de que la temperatura media se encuentre en el tercil cálido en toda España, con mayor confianza en el este peninsular y Baleares.
En cuanto a precipitaciones, se prevé seco en el noroeste y en el resto la probabilidad de los terciles es la climatológica.
Salvo el episodio de retroceso invernal de los próximos tres días, el resto de la semana próxima no se esperan precipitaciones y se recuperarán poco a poco las temperaturas, pero Requena ha reconocido que hacer predicciones para Semana Santa, dentro de 15 días, es "demasiado aventurar", aunque cree que "el comienzo apunta bueno"