Los concejales y la gerente de la Fundación dan la bienvenida Bykofoto/ A García
El herrero Matías Abad recibe el homenaje de los turolenses en el centenario de su fallecimiento
De sus manos salieron las piezas de forja que hoy lucen en los emblemáticos edificios de principios del siglo XX
Si un arquitecto tiene una idea brillante tiene luego que rodearse de maestros de los oficios que sepan plasmar esa idea en los materiales. Eso es lo que pasó hace más de un siglo entre Pablo Monguió y el herrero Matías Abad y esas flores y guirnaldas, pájaros e insectos que el catalán dibujó en el papel pudo luego el turolense darle forma y hacerlos realidad. Más de cien años después, esa forja que tiene en la naturaleza su inspiración, es el objetivo de miles de fotografías y videos y objeto de comparación con otros edificios modernistas de muchas ciudades españolas.
En esta nueva edición de la Semana Modernista de Teruel, el Ayuntamiento de la capital y la Fundación Bodas de Isabel han querido rendir homenaje al herrero Matías Abad, coincidiendo con el centenario de su fallecimiento, que ocurrió el 24 de marzo de 1923.
Después de una semana con una programación cultural, con muchos actos organizados en el Casino de Teruel, uno de los edificios que conserva en su interior piezas modernistas, los actos han salido ya a la calle, atrayendo a numeroso público.
Los actos de este sábado comenzaron con un desfile de la sociedad turolense de la época. Encabezado por las autoridades en estos desfiles “cada uno tenía su lugar”, como recordaba Belén Izquierdo, una de las participantes, actriz voluntaria de la Fundación, que este año interpreta a Isabel de Segura, pero que se puso el traje modernista para interpretar a una chica de la época. Como ella otros actores y actrices que colaboran con la Fundación participaron en los actos durante la jornada.
Ante la casa consistorial se llevó a cabo la recepción oficial. Los concejales de Turismo y Educación, Eduardo Suárez y Mari Carmen Muñoz, junto a la gerente de la Fundación Bodas de Isabel, Lorena Muñoz, dieron la bienvenida a los participantes y pidieron un fuerte aplauso para el homenajeado, Matías Abad, y para el actor que lo interpreta desde 2012, Arturo Doñate, así como para Sagrario Belenguer, que se mete en el papel de su esposa Andrea Cristóbal.
El propio Matías Abad intervino en el acto para recordar su historia. Nació en Teruel y procedía de una familia de herreros, ya que su abuelo se dedicaba al oficio en Galve y su padre en Rillo. Aprendió a cincelar en la herrería de su tío en Teruel y su trabajo fue reconocido en Barcelona, donde además completó su formación con el arquitecto Doménech i Montaner, del que también se cumple un siglo de su fallecimiento.
En este homenaje también intervino el personaje de su hijo Epifanio que recordó como hablaban de su padre “un exquisito cincelador del renacimiento” y del que heredó su oficio aunque falleció joven. Durante toda la jornada además cuatro herreros estuvieron trabajando en la plaza de la Catedral para finalizar la placa en homenaje de Matías Abad, que esta mañana se colocará en el cementerio de la ciudad, donde está enterrado. Durante todo el día los herreros estuvieron trabajando y en la escena teatral de la tarde se recordó a la hermana de Epifanio, María Teresa, que también trabajó con ellos “con paciencia y habilidad haciendo la parte más delicada”.
Todas estas escenas han sido seguidas de cerca por los miembros de varias entidades de la Anem (la Asociación Nacional de Entidades Modernistas) que a primera hora de este sábado se reunieron en Teruel para luego disfrutar de los actos programados vestidos de época. Representantes de Alcoi, Benicàssim, Carcaixent o Canfranc participaron ambientando el Teruel modernista. El presidente de Anem, Guzmán Bernabeu, recogió unos obsequios por parte del concejal de Turismo así como la concejal de esta materia en Alcoi Lorena Zamorano. Lorena Muñoz, gerente de la Fundación Bodas de Isabel, agradeció la presencia de estas ciudades en Teruel con motivo del fin de semana modernista.
Integrantes de las entidades modernistas de estas localidades se encontraban participando activamente en los actos y fueron buenas embajadoras de las fiestas y ferias que hacen en sus respectivas localidades. “Preparamos la feria de un año para otro”, comentó Paqui que con María José explicó que en Alcoi hubo una burguesía industrial que se la que reflejan en su feria, junto a otros oficios de la época y la labor de la mujer trabajadora del momento.
Desde Benicàssim vinieron Isabel y Adela: “Nosotros recreamos el primer fin de semana de septiembre la belle epoque y la riqueza que había en las villas de Benicàssim”, contó Adela.
Además de integrantes de las entidades que forman parte de la Anem, también se encuentran en Teruel personas particulares que han querido venir a participar en la fiesta y se han caracterizado para ello, como Conchi, que vino de Barcelona con su marido. “Es la primera vez que venimos a Teruel y hemos querido estar en esta fiesta modernista”, contó. Lo hizo caracterizada de niñera, con un carricoche de la época, “que hemos restaurado nosotros y que es de 1900”, explicó, y un muñeco reborn, con los que otros participantes en la recreación querían fotografiarse.
Esta fiesta ha servido para sacar del cajón cámaras analógicas y fotografiar diferentes escenas como si fueran un minutero de la época. “Estoy preparando un proyecto para mis estudios de fotografía y estos es ideal”, comentó Marcos.
La música era uno de los principales entretenimientos de la sociedad de principios del siglo XX y esta recreación corrió de la mano de la Agrupación Musical Ciudad de Teruel. “En aquella época las bandas musicales eran de militares”, contó su director Alberto Escudero. Así iban caracterizados sus integrantes que interpretaron un repertorio variado, con pasacalles y temas más bailables.
Tampoco faltaron los vehículos de la época, gracias a la participación de la Asociación Aragonesa de Vehículos Históricos con tres automóviles característicos de las primeras décadas del siglo XX: un Chrysler del 30; un Ford modelo A del 28 y un Rolls Royce del 33, que Francisco de Borja, que era la primera vez que participaba en esta recreación, trajo conduciendo desde Zaragoza. “Me ha costado venir dos horas y media”, dijo.
Entre el público que disfrutó de los actos modernistas había visitantes a Teruel que desconocían que se celebraba esta recreación y que se vieron gratamente sorprendidos, como Sonia y Sergio, que venían de Ontinyent. “Nos lo hemos encontrado por casualidad”, dijo Sonia, “hemos venidos con los niños a Dinópolis y hemos visto que se está celebrando este acto”, contó.
Coincidiendo con este fin de semana modernista, desde hace varias ediciones se celebra el Día de la Banderita de Cruz Roja, una cuestación real cuya recaudación se destina a proyectos con personas mayores. Un grupo de cinco voluntarias, ataviadas con trajes de enfermeras que fueron donados en su día participan en los actos. “Son trajes originales igual que la insignia”, contó Chelo Mallén que recordó que a principios de siglo se originó el cuerpo de damas enfermeras, ya que los trabajos de los cuidados se realizaban hasta entonces solo por religiosas. “Se les quiso dar una formación reglada y así se creó estes cuerpo de damas enfermeras que promovió la reina Victoria Eugenia, esposa de Alfonso XIII”, recordó.
Mientras las enfermeras recogían monedas con sus características huchas, en la plaza San Juan se servía un vermú. Las bodegas Amprius Lagar presentaron su dulce bebida espirituosa Gaire: “Es tan suave como el aire, ven a probarlo a Teruel y enamórate de él”.
En la programación de este fin de semana modernista se incluyen visitas guiadas con un cicerone muy especial, el mismísimo arquitecto Pablo Monguió, al que interpreta desde la primera edición, en 2012, Jesús Garcés.
En esta edición, se da la coincidencia de que hay dos edificios modernistas con sus fachadas cubiertas, la casa de El Torico, sede de la Caja Rural de Teruel, que se ha embarcado en un proceso de restauración y el mirador de la casa Ferrán. Otras se han restaurado recientemente como la casa de Doña Blanca, sede de la Comarca Comunidad de Teruel.
Tras una teatralización anoche en el Casino, la Semana Modernista finaliza este domingo con varios actos. A las 10,30 horas se instalará la placa homenaje a Matías Abad en la parte antigua del Cementerio.
A las 11 horas volverá a organizarse un desfile de la sociedad de la época, esta vez acompañado por los gigantes de la comparsa de Teruel, que participarán en el II Encuentro de Gigantes con comparsas y figuras procedentes de Calamocha, Cariñena y Mas de las Matas y que se desarrollará en la plaza San Juan.
Este encuentro lleva el nombre del cineasta de Segundo de Chomón, en honor a otro turolense de los albores del siglo XX, que tiene su réplica en gigante.
Por la tarde, volverá a organizarse un paseo modernista con una visita teatralizada por los edificios modernistas con personajes de época donde se explicarán vivencias y anécdotas de la época.
En esta nueva edición de la Semana Modernista de Teruel, el Ayuntamiento de la capital y la Fundación Bodas de Isabel han querido rendir homenaje al herrero Matías Abad, coincidiendo con el centenario de su fallecimiento, que ocurrió el 24 de marzo de 1923.
Después de una semana con una programación cultural, con muchos actos organizados en el Casino de Teruel, uno de los edificios que conserva en su interior piezas modernistas, los actos han salido ya a la calle, atrayendo a numeroso público.
Los actos de este sábado comenzaron con un desfile de la sociedad turolense de la época. Encabezado por las autoridades en estos desfiles “cada uno tenía su lugar”, como recordaba Belén Izquierdo, una de las participantes, actriz voluntaria de la Fundación, que este año interpreta a Isabel de Segura, pero que se puso el traje modernista para interpretar a una chica de la época. Como ella otros actores y actrices que colaboran con la Fundación participaron en los actos durante la jornada.
Ante la casa consistorial se llevó a cabo la recepción oficial. Los concejales de Turismo y Educación, Eduardo Suárez y Mari Carmen Muñoz, junto a la gerente de la Fundación Bodas de Isabel, Lorena Muñoz, dieron la bienvenida a los participantes y pidieron un fuerte aplauso para el homenajeado, Matías Abad, y para el actor que lo interpreta desde 2012, Arturo Doñate, así como para Sagrario Belenguer, que se mete en el papel de su esposa Andrea Cristóbal.
El propio Matías Abad intervino en el acto para recordar su historia. Nació en Teruel y procedía de una familia de herreros, ya que su abuelo se dedicaba al oficio en Galve y su padre en Rillo. Aprendió a cincelar en la herrería de su tío en Teruel y su trabajo fue reconocido en Barcelona, donde además completó su formación con el arquitecto Doménech i Montaner, del que también se cumple un siglo de su fallecimiento.
En este homenaje también intervino el personaje de su hijo Epifanio que recordó como hablaban de su padre “un exquisito cincelador del renacimiento” y del que heredó su oficio aunque falleció joven. Durante toda la jornada además cuatro herreros estuvieron trabajando en la plaza de la Catedral para finalizar la placa en homenaje de Matías Abad, que esta mañana se colocará en el cementerio de la ciudad, donde está enterrado. Durante todo el día los herreros estuvieron trabajando y en la escena teatral de la tarde se recordó a la hermana de Epifanio, María Teresa, que también trabajó con ellos “con paciencia y habilidad haciendo la parte más delicada”.
Todas estas escenas han sido seguidas de cerca por los miembros de varias entidades de la Anem (la Asociación Nacional de Entidades Modernistas) que a primera hora de este sábado se reunieron en Teruel para luego disfrutar de los actos programados vestidos de época. Representantes de Alcoi, Benicàssim, Carcaixent o Canfranc participaron ambientando el Teruel modernista. El presidente de Anem, Guzmán Bernabeu, recogió unos obsequios por parte del concejal de Turismo así como la concejal de esta materia en Alcoi Lorena Zamorano. Lorena Muñoz, gerente de la Fundación Bodas de Isabel, agradeció la presencia de estas ciudades en Teruel con motivo del fin de semana modernista.
Integrantes de las entidades modernistas de estas localidades se encontraban participando activamente en los actos y fueron buenas embajadoras de las fiestas y ferias que hacen en sus respectivas localidades. “Preparamos la feria de un año para otro”, comentó Paqui que con María José explicó que en Alcoi hubo una burguesía industrial que se la que reflejan en su feria, junto a otros oficios de la época y la labor de la mujer trabajadora del momento.
Desde Benicàssim vinieron Isabel y Adela: “Nosotros recreamos el primer fin de semana de septiembre la belle epoque y la riqueza que había en las villas de Benicàssim”, contó Adela.
Además de integrantes de las entidades que forman parte de la Anem, también se encuentran en Teruel personas particulares que han querido venir a participar en la fiesta y se han caracterizado para ello, como Conchi, que vino de Barcelona con su marido. “Es la primera vez que venimos a Teruel y hemos querido estar en esta fiesta modernista”, contó. Lo hizo caracterizada de niñera, con un carricoche de la época, “que hemos restaurado nosotros y que es de 1900”, explicó, y un muñeco reborn, con los que otros participantes en la recreación querían fotografiarse.
Esta fiesta ha servido para sacar del cajón cámaras analógicas y fotografiar diferentes escenas como si fueran un minutero de la época. “Estoy preparando un proyecto para mis estudios de fotografía y estos es ideal”, comentó Marcos.
La música era uno de los principales entretenimientos de la sociedad de principios del siglo XX y esta recreación corrió de la mano de la Agrupación Musical Ciudad de Teruel. “En aquella época las bandas musicales eran de militares”, contó su director Alberto Escudero. Así iban caracterizados sus integrantes que interpretaron un repertorio variado, con pasacalles y temas más bailables.
Tampoco faltaron los vehículos de la época, gracias a la participación de la Asociación Aragonesa de Vehículos Históricos con tres automóviles característicos de las primeras décadas del siglo XX: un Chrysler del 30; un Ford modelo A del 28 y un Rolls Royce del 33, que Francisco de Borja, que era la primera vez que participaba en esta recreación, trajo conduciendo desde Zaragoza. “Me ha costado venir dos horas y media”, dijo.
Entre el público que disfrutó de los actos modernistas había visitantes a Teruel que desconocían que se celebraba esta recreación y que se vieron gratamente sorprendidos, como Sonia y Sergio, que venían de Ontinyent. “Nos lo hemos encontrado por casualidad”, dijo Sonia, “hemos venidos con los niños a Dinópolis y hemos visto que se está celebrando este acto”, contó.
Día de la Banderita
Coincidiendo con este fin de semana modernista, desde hace varias ediciones se celebra el Día de la Banderita de Cruz Roja, una cuestación real cuya recaudación se destina a proyectos con personas mayores. Un grupo de cinco voluntarias, ataviadas con trajes de enfermeras que fueron donados en su día participan en los actos. “Son trajes originales igual que la insignia”, contó Chelo Mallén que recordó que a principios de siglo se originó el cuerpo de damas enfermeras, ya que los trabajos de los cuidados se realizaban hasta entonces solo por religiosas. “Se les quiso dar una formación reglada y así se creó estes cuerpo de damas enfermeras que promovió la reina Victoria Eugenia, esposa de Alfonso XIII”, recordó.
Mientras las enfermeras recogían monedas con sus características huchas, en la plaza San Juan se servía un vermú. Las bodegas Amprius Lagar presentaron su dulce bebida espirituosa Gaire: “Es tan suave como el aire, ven a probarlo a Teruel y enamórate de él”.
En la programación de este fin de semana modernista se incluyen visitas guiadas con un cicerone muy especial, el mismísimo arquitecto Pablo Monguió, al que interpreta desde la primera edición, en 2012, Jesús Garcés.
En esta edición, se da la coincidencia de que hay dos edificios modernistas con sus fachadas cubiertas, la casa de El Torico, sede de la Caja Rural de Teruel, que se ha embarcado en un proceso de restauración y el mirador de la casa Ferrán. Otras se han restaurado recientemente como la casa de Doña Blanca, sede de la Comarca Comunidad de Teruel.
Tras una teatralización anoche en el Casino, la Semana Modernista finaliza este domingo con varios actos. A las 10,30 horas se instalará la placa homenaje a Matías Abad en la parte antigua del Cementerio.
A las 11 horas volverá a organizarse un desfile de la sociedad de la época, esta vez acompañado por los gigantes de la comparsa de Teruel, que participarán en el II Encuentro de Gigantes con comparsas y figuras procedentes de Calamocha, Cariñena y Mas de las Matas y que se desarrollará en la plaza San Juan.
Este encuentro lleva el nombre del cineasta de Segundo de Chomón, en honor a otro turolense de los albores del siglo XX, que tiene su réplica en gigante.
Por la tarde, volverá a organizarse un paseo modernista con una visita teatralizada por los edificios modernistas con personajes de época donde se explicarán vivencias y anécdotas de la época.
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