El CRDO y la Cámara quieren que el Jamón de Teruel se conozca en Europa

El Consejo Regulador de la Denominación de Origen Jamón/Paleta de Teruel y la Cámara de Comercio de Teruel han unido sinergias para que el producto turolense, que es la Denominación de Origen más antigua de España, se conozca en diferentes países europeos donde todavía es un gran desconocido. Por ello, coincidiendo con las Ferias del Jamón y Alimentos de Calidad, organizdas junto al Ayuntamiento de la capital, han traido a Teruel a un grupo de profesionales del sector de la alimentación, que estos días están conociendo cómo se elabora este alimento y por qué puede ser interesante introducirlo en sus mercados.

El grupo con el que están trabajando está formado por importadores de Suiza, Irlanda, Austria, Países Bajos y Hungría, países que no son destinos preferentes del Jamón de Teruel. Además, también han venido distribuidores de cuatro provincias españolas: Zaragoza, Alicante, Madrid y Murcia.

El sábado participaron como un grupo más en el concurso de cortadores amateur, celebrado en el Palacio de Exposiciones y Congresos y este domingo probaron los jamones que aportaron los secaderos que participaron en el Concurso de Calidad. Además, se entrevistaron con los responsables de tres secaderos -Soincar, Aire Sano e Izquierdo Sanz- de la provincia y durante la jornada de hoy tendrán la oportunidad de visitarlos in situ.

Como preámbulo, a la cata de los jamones y a las entrevistas, en la mañana de ayer recibieron una formación con los responsables de Jamón Lovers, Pedro José Pérez Casco y Miriam López Ortega, quien explicó que lo que se pretendía con esa actividad es darles estrategias para prescribir el producto. También realizaron un juego sensorial, que les acercó a conocer mejor el aroma, diferenciar las vetas de grasa o saborear los diferentes matices del producto. Teoría y práctica confluyeron en esta actividad para que luego estos profesionales lo trasladen a sus clientes, que son los intermediarios antes de llegar al consumidor final.

El presidente del CRDO, Ricardo Mosteo, recordó que el pasado año se invitó a charcuteros de diferentes puntos de España y este año son distribuidores e importadores. “Al final el distribuidor es el que vende al charcutero y el que le tiene que explicar el producto”, comentó. Este encuentro empresarial “responde a la demanda de nuestros secaderos”, dijo, que han visto que la figura del distribuidor es el que reparte el producto entre los charcuteros y pueden llegar así a más mercados.

Lo primero que hicieron al llegar a Teruel fue participar en el concurso de cortadores, con su propio jamón, una experiencia que no olvidarán. “Nos habría gustado que se hiciera en las plazas del Centro como otros años pero por la lluvia no pudo ser y lo trasladamos al recinto ferial, fue un acierto y salió muy bien”, consideró Mosteo.

Aunque compartieron todos un espacio común sí que se distribuyeron por plazas y como todos los años en estas quince ediciones se entregaron unos premios por plazas.

El jurado decidió que el plato más creativo fue el de Los Residentes por El ramo de la Novia, el ganador de la plaza de la Catedral: Electrojamón; el de la plaza del Torico, Los Recortadores y el de la plaza San Juan, los Caballeros Santiaguistas.

En primera persona

Entre los distribuidores e importadores que desde el sábado y hasta este lunes se encuentran participando en el Encuentro Empresarial está Rubén Rodrigo, un español que trabaja en Suiza importando productos españoles. Aunque él sí que conocía el Jamón de Teruel ha visto cómo en Suiza sigue siendo un “gran desconocido” y por ello ha venido a Teruel para participar en esta iniciativa y contribuir así a darle más visibilidad.

“Es importante que vengamos personalmente a comprobar el producto en sí, la elaboración, el corte y sus particularidades, la gente que lo produce, la gente que lo corta y la gente que lo desarrolla”, afirmó.

Explicó que su empresa es distribuidora en toda Suiza de todo tipo de productos español, “pero el cliente suizo, tanto el profesional como el consumidor, el cliente privado, desconoce por completo el Jamón de Teruel”. Algo que ocurre también con otros productos con denominación de origen o que están protegidos, señaló, “porque los consumidores van siempre a lo que encuentran en un lineal de supermercado o a lo que han encontrado en una publicidad o lo que han encontrado un poco al azar o por presión publicitaria”.

Por ello consideró que para dar visibilidad al Jamón de Teruel hace falta comunicación, porque Suiza tiene frontera con Italia y con Francia, que son dos productores de jamón muy buenos y llevan 40 años comercializando sus jamones de diferentes denominaciones de origen, de diferentes calidades, diferentes curaciones y razas.

Rodrigo consideró que en el caso de Suiza hay que explicar que el Jamón de Teruel, tiene algo más que aportar que un jamón de Parma, un jamón de Bayona o que un serrano español.

Además, a diferencia de los miembros de la Unión Europea en el país donde trabaja hay que pagar aranceles y en este sentido también hay que explicar por qué merece la pena pagar la diferencia.