El Ayuntamiento de Teruel quiere abrir el centro social y cultural de San Julián a finales de este año

El Ayuntamiento de Teruel tiene intención de poner en funcionamiento el centro sociocultural del antiguo asilo de San José a finales de este año. Para ello está redactando ya los pliegos de condiciones para la adquisición del equipamiento tanto de esta parte como del auditorio. Así lo explicó este jueves la alcaldesa, Emma Buj, tras la visita a las obras que se están llevando a cabo a buen ritmo y a la que acudió la corporación municipal.

Buj recordó que el edificio fue adquirido por el Ayuntamiento de Teruel en el año 2000, pero hasta 2017 no pudo licitarse la obra, que incluye también el conservatorio de música, que depende del Gobierno de Aragón. Buj incidió en que el centro social y cultural es necesario para las asociaciones de la ciudad y el conservatorio está funcionando en estado precario desde 2005. “Hoy vemos como las obras son una realidad y avanzan a buen ritmo”, se congratuló.

Con el modificado del proyecto que se aprobó en pleno, la obra que ejecuta la Unión Temporal de Empresas (UTE) -formada por Contratas Vilor SL y Electrotecnia Monrabal SLU- asciende a 7.386.000 euros. “En estos momentos hay certificados más de 2,5 millones de euros y en los próximos días se van a aprobar nuevas certificaciones de obra”, apuntó la alcaldesa, que destacó que es “unas de las más importantes” que se están haciendo en todo Aragón en edificación pública.

En su opinión, es una infraestructura que genera ciudad y que será un revulsivo para el barrio de San Julián, cuyos representantes vecinales también participaron en la visita y se felicitaron de que se estén realizando las obras. 

“Es necesario para la asociación, porque la actual sede es un hervidero de gente y necesitamos espacios”, comentaron. La asociación además está dispuesta a participar en la gestión del edificio.

Pero el centro no solo ofrecerá espacios para estas asociación sino para otras de la ciudad. Para todos ellos contará con aulas, salas polivalentes y de reuniones, bar-cafetería, locales de ensayo, aula de cocina, terrazas donde también se podrán realizar actividades y una biblioteca en la última planta del edificio con una cubierta interior de madera, que llamó la atención de los visitantes. Iluminada por ventanas laterales y cenitales no recibirá sin embargo la luz directa del sol porque el propio viaducto hace de parasol.

Con capacidad para 200 butacas y un escenario de 120 m2, el diseño del auditorio se pudo ampliar gracias al modificado del proyecto. La alcaldesa recordó que el actual Gobierno de Aragón puso como condición para que la obra siguiera adelante que esta parte tenía que ser municipal. “Desde el primer día dije que si iba a ser un inconveniente el Ayuntamiento asumaría los gastos”, recordó. Este espacio es el que conecta el centro sociocultural con el conservatorio y ocupa el lugar donde antiguamente se ubicaba la capilla, por lo que el acceso es el mismo, desde la fachada de piedra y ladrillo del antiguo asilo. 

Aunque el  proyecto que ahora se está ejecutando incluye accesos al edificio, aparcamientos y zona ajardinada bajo los viaductos Emma Buj explicó que el Ayuntamiento querría ampliar este espacio exterior y en ello se está trabajando. Para ello, hay una parcela que es de un particular y otra que es municipal y se podría hacer una permuta.

Eficiencia energética

Las obras de rehabilitación del asilo de San José comenzaron en el verano de 2017 y en estos momentos,  entre otras actuaciones, se está trabajando en la instalación de placas de aislamiento térmico y en la colocación de una estructura metálica que es la que sujetará los paneles finales de la fachada ventilada de la parte del conservatorio, que serán de color verde. 

“Será un recubrimiento de GRC de la casa Paneltor”, detalló Alicia Torres, arquitecta redactora del proyecto de rehabilitación. Mientras el sistema SATE se colocará en las fachadas del centro social.

“Se utilizan  materiales de última generación para facilitar la eficiencia energética del edificio”, comentó la técnico, que se completará con un sistema de calefacción diferente según el área. En el conservatorio, se utilizará suelo radiante y en el centro sociocultural de bomba de calor para que se utilice según las necesidades de los diferentes espacios.

Las cubiertas son de teja en el centro sociocultural, de cinc en el caso del auditorio y  planas, recubiertas de gravilla, en la parte del conservatorio. “La cubierta se ha tratado como una quinta fachada del edificio”, al poder contemplarse desde los dos viaductos como la fachada norte, explicó la arquitecta responsable del proyecto.

La acústica ha sido muy importante en la parte destinada a conservatorio. La dirección facultativa tiene también formación musical con una larga trayectoria lo que ha permitido aplicar estos conocimientos al proyecto. Además, se van a hacer pruebas en cuatro aulas por parte de técnicos de la Universidad de Valencia para ver si es la adecuada. 

A día de hoy hay 24 trabajadores trabajando al mismo tiempo en el edificio.