El Ayuntamiento de Teruel adjudica el Servicio de Ayuda a Domicilio, que incluirá festivos y fines de semana

La Junta de Gobierno Municipal aprobó este martes la adjudicación para los próximos años de uno de los contratos más importantes del Ayuntamiento, el del Servicio de Ayuda a Domicilio para la ciudad y sus barrios pedáneos. Por otra parte, declaró desierto el procedimiento para contratar en régimen urgente la contratación de la obra de reurbanización de la calle Menas de San Julián que quedó desierto, por lo que habrá que buscar una empresa que se pueda hacer cargo de estos trabajos. También se decidió aprobar la contratación del servicio de colocación y retirada de contenedores metálicos en el municipio de Teruel durante los próximos dos años, por 60.000 euros.

La alcaldesa, Emma Buj, se refirió al contrato del Servicio de Ayuda a Domicilio como uno de los más importantes que lleva a cabo el Ayuntamiento, por la cuantía económica, 1,5 millones de euros para dos años, pero sobre todo por el servicio que presta este contrato asistencial porque ayuda a las personas que más lo necesitan.

Buj destacó que como novedad en este nuevo contrato se va a prestar también los fines de semana y festivos.”No todas las ciudades lo tienen, por lo que Teruel marca también el camino”, señaló. “A pesar de que cada vez los turolenses pagan menos impuestos tienen más servicios”, subrayó.

Al concurso para prestar este servicio por dos años, prorrogable otros dos, se presentaron nueve empresas y ha resultado adjudicataria la mercantil Eulen Sociosanitarios SA.

Este contrato se adjudica después de un año de tramitación, porque en abril de 2022 el servicio salió a licitación pero hubo un recurso de una asociación estatal de entidades de servicios de atención a domicilio frente a los pliegos que regían la licitación del contrato y en septiembre volvió a publicarse. El servicio en cualquier caso no deja de prestarse, porque se prorroga el anterior hasta la nueva adjudicación.

Nueva adjudicataria

La nueva empresa adjudicataria tendrá que asumir la subrogación de 34 personas que actualmente prestan el servicio en la capital y sus barrios pedáneos. El número de usuarios varía en función de las necesidades para las que se demandan.

El servicio de ayuda a domicilio proporciona un conjunto de atenciones orientadas a facilitar un entorno de convivencia adecuado a los individuos o familias en su domicilio. Es un servicio dirigido a facilitar el desarrollo de las actividades básicas de la vida diaria a aquellas personas con limitaciones de autonomía personal, evitando su ingreso en un centro de carácter residencial.

La prestación el servicio, que está sujeto a un precio público, podrá contemplar atenciones personales, domésticas o ambas. Podrán recibir este servicio todas aquellas personas que carezcan o tengan mermada la autonomía personal, temporal o permanentemente, para mantenerse en su medio habitual de vida, y que residan y estén empadronadas en el municipio de Teruel o sus barrios pedáneos.

Los usuarios podrán tener reconocida la situación de dependencia por ley o estar en trámite. Si no la tienen se plantean varios supuestos como dificultades en su autonomía personal, que viven solas sin red de apoyo, que presentan algún tipo de deterioro personal que limita su capacidad y grado de autonomía o personas cuidadoras habituales que requieren apoyo en la atención personal a la persona cuidada, entre otros casos.

El mínimo de horas de prestación del servicio será de 1 hora a la semana y el máximo de 8 horas semanales, ampliable a un máximo de 4 horas más si se prestan los fines de semana. El servicio de fines de semana y festivos solo se refiere a las prestaciones de apoyo para levantarse y acostarse, en el aseo e higiene personal y en el reparto de comidas a domicilio.

Calle Menas de San Julián

La Junta de Gobierno declaró por otra parte desierto el procedimiento para contratar la obra de reurbanización de la calle Menas de San Julián. Con un presupuesto de más de 300.000 euros, como ninguna empresa se ha presentado al concurso “a partir de ahora se va a hacer una ronda de contactos con empresas que puedan estar interesadas y si es así se hará una nueva contratación”, explicó ayer la alcaldesa.

Esta calle parte de la carretera San Julián y va en paralelo a la ladera. “Es una calle de pocos metros pero presenta dificultades”, reconoció Buj. De ahí la necesidad de actuar con urgencia. Los trabajos consistirán en consolidar e impermeabilizar el terreno mediante la inyección de lechada de cemento para evitar infiltraciones y daños que provocan las aguas que provienen de la ladera. Se demolerán los pavimentos y las aceras y se hará una plataforma única que mejorará la accesibilidad. Habrá que demoler también un muro que se encuentra en mal estado para reconstruirlo. Se prevé renovar la red de distribución de agua y saneamiento, entre otras acciones.