Dimite la directora de la residencia San Pablo de Teruel, que ha registrado una veintena de casos

La directora de la residencia Vitalia San Pablo de Teruel, Mariluz Benedicto, dimitió por motivos de salud este lunes de su cargo y la ha sustituido María Izquierdo, una trabajadora que lleva 16 años en el centro. Este geriátrico ha tenido una veintena de casos de coronavirus aunque doce han sido trasladados al dispositivo intermedio de Alfambra.

“Mi cuerpo, mente y corazón me han parado de golpe. Necesito alejarme de ambientes tensos como me indican los médicos. Tanta tensión y dificultades me han provocado un profundo dolor que me ha superado”, manifestó Benedicto.

La hasta ahora directora de San Pablo aseguró que se ha entregado “por completo” desde que la situación de crisis sanitaria comenzó pero que en estos momentos no se encuentra en disposición de “dar al centro lo que necesita”. 

Por ello consideró que lo más responsable era dimitir, una decisión que aseguró que había sido muy dolorosa pero que permite “dar paso a nuevas personas con salud, ganas y fuerzas renovadas” que puedan seguir luchando. 

Mariluz Benedicto quiso también expresar su cariño y respeto a los residentes, las familias y el personal y “a quienes en estos tiempos tan duros han estado ahí”.

El director de operaciones de Vitalia, Antonio Morales, insistió en que la marcha de Benedicto se debe a un problema de salud y recordó que en la residencia San Pablo ha habido una veintena de casos positivos pero doce se han trasladado a Alfambra y ahora quedan seis y que en el centro se han adoptado todas las medidas de aislamiento necesarias para prevenir nuevos contagios por Covid-19.

Morales explicó que la nueva directora conoce perfectamente el centro y que, además, cuenta con el respaldo de la directora del otro centro del grupo, la residencia Paules, Lucía Caballero.

“En San Pablo se está trabajando bien. Hemos reforzado la plantilla para cubrir las bajas que ha habido por contagios”, destacó el director de operaciones que visitó este martes este centro turolense.

Antonio Morales quiso transmitir un mensaje de tranquilidad sobre la situación de este centro. Recordó que se ha aprovechado la sectorización contra incendios de las instalaciones para establecer las medidas de aislamiento y que hay un modelo unidireccional para que se entre por unas puertas y pasillos y se salga por otros, siguiendo las recomendaciones establecidas por las autoridades sanitarias.

La residencia San Pablo de Teruel adoptó medidas de prevención frente al coronavirus ya a finales de febrero, cuando se limitaron las visitas y se extremaron las medidas de higiene como el lavado frecuente de manos. A pesar de todas las precauciones se produjeron los contagios y se han vivido unas semanas muy complicadas y duras.