Colegios y CRAs se movilizan para pedir que se cubran las vacantes de educación especial
Familias y docentes reclaman la adjudicación de las 105 plazas pendientes desde inicio de cursoLa comunidad educativa de distintos colegios y Centros Rurales Agrupados (CRAs) de Aragón se sumó este martes a las concentraciones convocadas a las puertas de los centros educativos de educación infantil y primaria, en protesta por la falta de auxiliares de educación especial, un situación que afecta a los colegios públicos de la Comunidad desde inicio de curso y que tiene especial incidencia en zonas rurales.
Con y sin carteles o pancartas reivindicativas, profesorado, alumnado, representantes de Ampas y familias se sumaron a una convocatoria improvisada en pocas horas y que corrió como la pólvora a través de la mensajería instantánea. El llamamiento tuvo una respuesta inmediata, a la vista de que las familias llevan semanas preocupadas por las 105 plazas de especialistas que han quedado sin asignar desde el inicio de curso.
La convocatoria tuvo seguimiento en colegios de municipios como Alcañiz, Andorra, Calanda, Valderrobres o la propia capital, aunque fue en las zonas rurales donde la movilización tuvo una repercusión destacada, con protestas en CRAs como el Somontano-Bajo Aragón, en el Pórtico de Aragón, en el Olea, en el Ariño-Alloza, en el de Albarracín, y, por supuesto, en todos los CRAs del Matarraña, una de las comarcas más afectadas por la falta de asignación de especialistas para los niños con necesidades educativas especiales, puesto que a ninguno de sus cuatro CRAs (Matarranya, Algars, Tastavins y Alifara) se les ha concedido en este inicio de curso auxiliar (y hay ocho niños con el derecho reconocido por el propio departamento de Educación).
Aunque las zonas rurales son las más perjudicadas, la afección se extiende en todo el territorio aragonés. De hecho, la movilización se convocó desde la provincia de Huesca y rápidamente se hizo extensible al resto de las provincias por mensajería instantánea.
A las dos de la tarde, los colegios convocaron a sus claustros de profesores y a toda la comunidad educativa a las puertas de cada centro en protesta por que siguen sin cubrirse más de 100 plazas del personal que atiende a los niños con mayores necesidades educativas. Alcañiz, Calanda, Andorra, Teruel, Alcalá de la Selva, Rubielos de Mora y localidades de distintos CRAs mostraron su rechazo ante lo que consideran un “recorte” que afecta al alumnado más vulnerable.
En distintas localidades se dio lectura a un comunicado genérico en el que se justificaban los motivos de la concentración: reivindicar lo que “consideramos es un derecho de nuestro alumnado”, que es “contar con personal especializado en educación especial suficiente”.
Según el texto, la oferta insuficiente de este curso ha supuesto “un recorte de 105 puestos de trabajo respecto a las plazas ofertadas en el curso 2022-2023, pasando de 431 plazas a 326” en este curso 2023-2024.
El manifiesto señalaba que “hay numerosos alumnos con necesidades que acuden a colegios ordinarios porque se garantiza a las familias la presencia de auxiliares de educación especial y se apoya de ese modo la inclusión”, de manera que “la carencia de estos profesionales, sobre todo en el medio rural, perjudica seriamente su atención educativa y la de sus compañeros y es imposible hablar integración si no se cuenta con este respaldo”, señala el comunicado.
Respecto a las plazas que faltan por cubrir en un tercer llamamiento, Educación informó semanas atrás de que iban a convocarse 86 más, para lo que se ha habilitado un crédito de casi un millón de euros. Sin embargo, “no hemos sabido nada más desde entonces”, manifestaron los convocantes de la protesta, para añadir, a continuación, que “hay una falta de voluntad de solucionar esta situación” y que “se están pasando por alto las necesidades de los más vulnerables”, aparte de que “se está sobrecargando de trabajo al resto de personal de los centros educativos”.
En conclusión, familias, docentes y alumnado piden que “se solucione, que se cubran las necesidades de los centros que así lo hemos solicitado y que permitan que nuestro alumnado de educación especial pueda estar escolarizado en las mismas condiciones que el resto de sus compañeros”.
La concentraciones en la provincia de Teruel se extendieron por diferentes comarcas. Las hubo en colegios públicos como el Pierres Vedel, en la capital, donde falta un especialista; en el colegio Gloria Fuertes de Andorra, donde faltan tres auxiliares y completar la jornada completa de otra contratada a jornada parcial; en el Palmireno de Alcañiz, donde hay dos niños con necesidad reconocida y solamente se ha designado una especialista; en el Virgen del Pilar de Calanda, donde necesitan “urgentemente dos auxiliares, pero mínimo una para cubrir de forma inmediata”, según explicó la directora, Ana Reyes Palos. También las hubo en CRAs de la provincia. Algunos no tienen ningún especialista asignado, como ocurre en el CRA Ariño-Alloza y en todos los del Matarraña.
Desde el colegio Virgen del Pilar de Calanda, su directora se lamentó de que a estas alturas “tenemos poca información de las plazas que van a conceder a cada centro en ese próximo llamamiento que se tiene que producir”. Ana Reyes Palos informó de que el colegio calandino estaba planteándose organizar alguna acción de protesta ante “la situación con la que nos encontrábamos” y, al tener conocimiento por whatsapp de la convocatoria de concentración que se planteó desde la provincia de Huesca, “decidimos sumarnos”. El colegio calandino registró una de las concentraciones más numerosas a la salida de clase.
En este colegio “contamos con una niña con autismo que además va al comedor escolar, hay que atenderla, pero no hay medios suficientes, lo que genera angustia en el profesorado, en las monitoras de comedor e incluso en la propia madre de la niña, que se siente mal porque su hija requiere de más atención; en general, el sentimiento de frustración en toda la comunidad educativa es enorme”, enfatizó la directora del colegio de Calanda. Palos reivindicó que “si el departamento de Educación quiere que atendamos e integremos a estos niños de educación especial en los colegios ordinarios, hay que dotar de los especialistas pertinentes para los centros, porque, si no se hace así, se está engañando a los padres y madres”, criticó. Actualmente, añadió, sin las plazas necesarias cubiertas, “los pocos especialistas que tenemos se tienen que dedicar solamente a los niños con necesidades educativas especiales, dejando de lado a los demás alumnos, a los de grandes capacidades, a los que necesitan apoyo lógico matemático, etc, es decir, se pierden apoyos”.
En el colegio Palmireno también hubo concentración a la salida de clase. Jesús Bernuz, director del centro, explicó que tienen dos alumnos con informe psicopedagógico del equipo de Orientación y que, de las dos auxiliares que les corresponden, falta una. Bernuz recordó que “estos niños necesitan una atención especial no porque lo digamos los docentes, sino porque el equipo de Orientación ha redactado un informe que así lo señala”, además ratificado por Educación.
Y si a los colegios de localidades grandes les faltan especialistas, en los CRAs no es mejor la situación. Al CRA del Mezquín (La Codoñera, Torrecilla de Alcañiz, Castelserás y Torrevelilla) se ha asignado una auxiliar de tres que debería haber, mientras que ningún CRA de la comarca del Matarraña tienen especialista desde inicio de curso. En el CRA Matarranya (Calaceite, Mazaleón, Valdeltormo) no hay especialista para atender a ninguno de los cuatro niños de educación especial reconocidos, que se encuentran, además, distribuidos en distintas localidades. Si no se adjudican todas las plazas, habrá alumnos que no tendrán atención este curso, al no contar las auxiliares con itinerancia asignada, es decir, han de quedarse fijas en la localidad a la que son adjudicadas.
El director del CRA Matarranya, Rubén Pelegrín, reconoció que “ no sabemos si se nos van a conceder las cuatro plazas; y si conceden una auxiliar, la cuestión será a qué localidad queda asignada”, añadió el docente.
Desde las Ampas también llevan días organizando reuniones ante la sospecha de que la falta de auxiliares no se solventará a corto plazo. Pilar Ramos, presidenta del Ampa del CRA Pórtico de Aragón de Alcalá de la Selva, explicó que “la situación en los CRAs es muy grave, porque en nuestras aulas el alumnado está mezclado de diferentes cursos y, si esos niños no son atendidos, el profesor comparte su tiempo con todos, lo que revierte negativamente en la calidad educativa’. Según Ramos, “si luchamos por una educación integradora y que atienda a la diversidad y no nos dan medios, la escuela rural, que es la que menos tiene, sale perjudicada”. Por otra parte, lamentó que “la administración diga que las plazas de de los CRAs no se están cubriendo porque no son a jornada completa y no las quiere nadie”, puesto que “eso es falso, porque nuestra auxiliar está pendiente de que salga la plaza, quiere a los niños y sabe cuáles son sus necesidades”.
Ramos señaló que los CRAs han salido más perjudicados que los colegios grandes en las adjudicaciones de auxiliares. No en vano, “como las plazas en los municipios de más habitantes son a jornada completa, esas se están cubriendo, pero no han adjudicado las de los centros rurales”, algo que también puso de manifiesto Laura Oliva, presidenta del Ampa del CRA-Ariño Alloza, donde tampoco se les ha asignado el auxiliar que tenían reconocido.
“No es un recorte, sino un problema de previsión del anterior equipo de gobierno”
En relación a las protestas celebradas este martes en toda la provincia, desde el departamento de Educación del Gobierno de Aragón se mostraron comprensivos con la preocupación de las familias: “entendemos las concentraciones, pero los datos avalan nuestra gestión”, afirmaron, para subrayar que esta situación no responde a “un recorte” presupuestario, sino a “un problema de previsión del anterior equipo de gobierno, que sobregastó de enero a junio, lo que ha condicionado la contratación posterior”.
Son las explicaciones que aporta el Gobierno, que informó de que en junio había 480 auxiliares contratadas, pero que “con lo que se dejó presupuestado para inicio de curso, solo se podían contratar algo más de 300” trabajadoras. Además, el primer llamamiento se hizo con mucho retraso; normalmente salía en el mes de julio y esta vez se hizo el 9 de agosto.
El nuevo Gobierno “ha buscado los mecanismos para dar el mejor servicio al mayor número de centros, solicitando una ampliación de crédito por valor de 927.000 euros, cuyo proceso administrativo se está ultimando para contratar unos 86 auxiliares más y tener remanente para situaciones urgentes o sobrevenidas”.
Esos 86 auxiliares” adicionales a los 326 que ya están trabajando permitiría “hacer frente a otros casos que vayan surgiendo”, señalaron desde el Ejecutivo, aunque, aún así, con esas 86 plazas que tienen que convocarse en las próximas semanas se llegarían a cubrir 412 puestos de trabajo: quedarían 21 vacantes pendientes.
En cualquier caso, fuentes de la consejería reconocieron que esos 927.000 euros “todavía no se ha desbloqueado” y siguen pendientes “de un último tramite”. Así que, por el momento, no hay un plazo concreto para la incorporación de los 86 auxiliares prometidos: “se incorporarán lo antes posible”, se limitaron a señalar desde el Educación.
El nuevo Gobierno insistió en que éste es un problema “heredado” de la administración del socialista Javier Lambán, puesto que la contratación de los auxiliares de educación especial forma parte “de un programa plurianual con un presupuesto cerrado para cada curso”. En este sentido, reiteraron que “la contratación en septiembre ha venido condicionada por ese sobregasto anterior”.
La explicación a ese desfase presupuestario, según Educación, está en que el anterior consejero del ramo, Felipe Faci “no presupuestó el segundo convenio colectivo (que incluía algunos complementos al sueldo y contratos por más horas)” así que, “nada más tomar posesión, el nuevo Gobierno tuvo que solicitar un incremento de crédito” para sufragar el sobrecoste en estos puestos de trabajo.