Los sindicatos CNT y CGT Teruel han lanzado este jueves un manifiesto para conmemorar un Primero de mayo marcado por la crisis de la pandemia de Covid-19 en el que han destacado la defensa de los Servicios Públicos Universales y de Calidad, como garantes de la igualdad para responder a las necesidades y derechos de todas las personas.
Los sindicatos han reconocido en el texto que esta será una jornada de reivindicación "atípica” y han expresado su “recuerdo y respeto” por todas las víctimas de la pandemia, así como su solidaridad con los trabajadores que "se están jugando la vida”, pero han insistido en que las consecuencias de esta crisis no pueden recaer de nuevoen la clase trabajadora.
En especial, han puesto el foco en las personas en situación de “precariedad, temporalidad y de extrema vulnerabilidad”, y han calificado de “paradójico” que precisamente esas mismas personas sean quienes están sacando la situación adelante a través de "su imprescindible actividad”.
“Es muy necesario reconocer y valorar la labor de los profesionales de la Sanidad, lidiando con el virus desde la primera línea, pero también hay que hacer lo propio con el trabajo de sectores habitualmente invisibilizados, asalariados y no asalariados, como los cuidados, el transporte, la agroalimentación o la limpieza, entre otros, que se han demostrado esenciales”, han manifestado.
En este sentido, han asegurado que no quieren “ni héroes ni heroínas, sino profesionales suficientes y bien tratados, laboral, económica y sanitariamente” y han exigido una Sanidad y Educación públicas alejadas de los “mercados especulativos”, así como unas pensiones dignas, derecho a una vivienda, a la movilidad, a las personasdependientes y la implantantación de la Renta Básica de Iguales.
También en el sector del Bajo Aragón-Cuencas Mineras han coincidido en la defensa de lo público, poniendo el foco además en las peculiaridades de los territorios despoblados y han señalado que “se defiende el silencio, el interés de mantener el mínimo de población” en el territorio.
“Mientras las cifras de población descienden, vemos cómo proliferan los macroproyectos energéticos y de alimentación bajo el pretexto de la generación de empleo, cuando en realidad son modelos productivos que apenas crean empleo estable, sino que generan, como ya ha quedado demostrado, problemas medioambientales con el consiguiente problema de salud pública y devaluación del territorio”, han aseverado.
Para CGT y CNT Teruel “ahora es el momento” de reclamar la soberanía energética y la soberanía alimentaria y de tomar las riendas del presente y futuro de este territorio.