Aragón Exterior promociona Teruel como destino turístico en China

China se perfila como un buen mercado para cualquier empresa turolense preparada para exportar a un país lejano y con una cultura muy diferente, también para las del sector turístico que puedan ofrecer lugares con encanto muy diferentes a las grandes ciudades españolas que acostumbran a visitar los viajeros procedentes del país asiático y con alto poder adquisitivo. Así lo explicó el delegado de Aragón Experior en China, Rafael Llopis, durante la jornada informativa  sobre las oportunidades de negocio que ofrece el país asiático, el más poblado del mundo celebrada en la Cámara de Teruel.

Llopis destacó que Aragón Exterior lleva varios años promocionando en China la provincia de Teruel como destino turístico. En su opinión, su ubicación a medio camino entre Barcelona y Madrid facilitaría su llegada con coche o minibús, los vehículos que habitualmente utilizan los chinos con cierto nivel económico durante sus vacaciones.

Añadió que, además de los innumerables lugares con encanto con que cuenta la provincia, este territorio es un ejemplo de “la verdadera España”, alejada del bullicio de las grandes ciudades.

Al margen del turismo, Llopis explicó a los cerca de 30 empresarios que participaron en la jornada informativa que China es un mercado muy grande que acepta cualquier producto, por lo que el enfoque debe hacerse desde el lado del potencial vendedor. 

En este sentido, les dijo que deben preguntarse si están preparados para exportar a un país tan lejano y tan diferente culturalmente. “China está en desarrollo y es un importador nato de comida, piensos, maquinaria o componentes industriales, especialmente agrícolas, si son de una calidad extra o para un uso específico”, explicó.

Añadió que al tratarse de un mercado tan lejano hay que tener muy en cuenta los aspectos logísticos, también porque la cadena de frío no está desarrollada de manera uniforme en todo el país. Esta es una de las cuestiones en las que hizo hincapié porque la mayoría de los participantes en la jornada procedía de empresas agroalimentarias y, entre ellas, muchas truferas.

Llopis señaló que no es posible competir con la trufa china para uso industrial, porque aunque su calidad es inferior su producción es masiva. 

Añadió que las trufas de calidad más conocidas son las procedentes de Francia e Italia, por lo que Aragón debería crear una  marca propia para la trufa producida en la región al servicio de los productores. En su opinión, la mejor forma de acceso sería a través de Hong Kong, promocionando el uso de la trufa fresca aragonesa en los restaurantes de lujo, a los que fuera de temporada se podría ofrecer en conserva. Además de esta ciudad, indicó que otras como Shanghái o Pekín cuentan también con un centenar de establecimientos con estrella Michelin.

Por último, Llopis recomendó a los empresarios turolenses que quieran introducirse en China que tengan “paciencia” porque los compradores de aquel país son “muy pragmáticos y no especialmente educados o puntuales con los pagos”. En contraposición, dijo que cuentan con un mercado que puede ofrecer rédito económico a los exportadores.