El director general del Aeropuerto de Teruel, Alejandro Ibrahim
Alejandro Ibrahim, director del Aeropuerto de Teruel: "La gestión ha permitido dotar a Teruel de un aeropuerto industrial único en el mundo"
Hace balance de sus 12 años al frente de la instalación y pronostica un futuro brillante
Alejandro Ibrahim recogerá el próximo 10 de diciembre en Madrid el Premio Alas de Oro 2024 del Colegio Oficial de Ingenieros Aeronáuticos de España por la dedicación y el desarrollo en su carrera profesional, de la que ha dedicado los últimos 12 años a dirigir el Aeropuerto de Teruel, que se ha convertido en un referente internacional en el ámbito industrial.
-¿Qué balance hace de su cargo como director del aeropuerto desde 2012?
-Me incorporé como primer director general el 6 de septiembre 2012. Han sido 12 años impulsando y dirigiendo el Aeropuerto Internacional de Teruel con un éxito que sigue sorprendiendo a nivel mundial, pero el reto principal fue comenzar de cero. Hubo que verificarlo y certificarlo en 5 meses para permitir el aterrizaje de grandes aeronaves, hito que se consiguió en marzo 2013. Por otro lado, Tarmac firmó finalmente el contrato de concesión con los requisitos iniciales tras un año de negociaciones. Fueron momentos iniciales muy complicados y de cierta incertidumbre, pero que con trabajo y esfuerzo pudimos superar.
-Las instalaciones se han transformado en este periodo...
-El crecimiento en estos años ha sido exponencial. Se han realizado muchas inversiones, que superan los 120 millones de euros, en pavimentaciones de plataformas y campa, hangares de todo tipo, naves, aparcamiento, viales, vehículos, handling, camiones de bomberos, PIGA, sistema de combustible de aviación, etcétera. Gracias al apoyo decidido del Gobierno de Aragón y el Ayuntamiento de Teruel, propietarios del Consorcio del aeropuerto, y a la gestión del mismo, se ha conseguido dotarlo de una gran capacidad y convertirlo en la mayor infraestructura aeroportuaria para el reciclado, almacenamiento, estacionamiento y pintura de aeronaves, actividades aeroespaciales e innovación aeronáutica de Europa.
-Este crecimiento ha ido acompañando de una intensa promoción...
-Ha sido un arduo trabajo dar a conocer el aeropuerto internacional viajando a las ferias aeronáuticas de toda Europa y participando en distintos congresos aeronáuticos y en foros y ponencias de ingeniería para dar a conocer el alto nivel técnico y logístico con el que se trabaja en el aeropuerto.
-¿Qué retorno ha tenido?
-Esta actividad ha supuesto la ampliación del número de clientes a 10 permanentes en el aeropuerto y más de 350 en total, así como de proveedores y empresas que participan en diferentes servicios como mantenimiento, extinción de incendios, ingeniería, obras, servicios de comunicaciones y un gran número de colaboraciones técnicas y de ingeniería con Enaire, Aesa, Gobierno de Aragón, Ayuntamiento de Teruel, Aemet, Aera, Unizar, Uned, Arex, proyectos europeos, etcétera. Pero lo impactante es que ahora más de 700 personas vienen diariamente a trabajar al aeropuerto y cuando comencé en septiembre 2012 estaba yo sólo en el edificio principal con un vigilante. Se espera que en unos 3 años se superen las 1.000 personas y otras 1.500 de puestos indirectos, una actividad sin precedentes en la provincia.
-¿Considera entonces que se han cumplido las expectativas?
-Puedo afirmar rotundamente que estos años han sido un gran éxito. La gestión y la colaboración público-privada ha permitido dotar a Teruel de un aeropuerto internacional industrial aeronáutico único a nivel mundial, con un crecimiento muy fuerte de superficie y operativa aérea, que a los 7 años se nos quedó pequeño. Y se ha ampliado con un nuevo PIGA de casi 2 millones de metros cuadrados. Seguimos ampliando año tras año, generando cada vez más empleo con el propósito de contribuir al desarrollo social y económico de Teruel.
-El Consejo Rector del Consorcio del Aeropuerto de Teruel aprobó el Plan Estratégico 2024-2027 hace un año...
-El apoyo y visión del actual consejero de Fomento y presidente del Consorcio, Octavio López, ha sido determinante para la fuerte expansión del aeropuerto desde hace un año y medio con un plan estratégico que contempla una inversión de más de 70 millones de euros, que además conlleva por primera vez la inversión de cifras similares por parte de las empresas instaladas. Se han invertido unos 120 millones desde el inicio del Consorcio en 2009 y el impacto económico en Teruel supera los 30 millones anuales, siendo el mayor generado de empleo de la provincia.
-Parte de la ciudadanía desconoce que fue concebido como un aeropuerto industrial...
-Las instalaciones fueron proyectadas bajo el concepto de máxima funcionalidad, con una inversión inicial de unos 40 millones de euros de aportación pública. Su Plan de negocios englobaba en la fase inicial el posicionamiento como el centro de mantenimiento MRO, de estacionamiento y reciclado de aeronaves más grande de Europa, dando servicios de toda la vida útil de la aeronave, incluida pintura, así como su focalización en la innovación y la sostenibilidad del sector. Se ha concebido desde su inicio para adaptarse a las necesidades y crecimiento racional, para minimizar costes y producir la mejor rentabilidad de la inversión. La idea original surgió de una empresa aragonesa hace más de veinte años, el Grupo López Soriano, que trasladó su iniciativa al Gobierno de Aragón.
-Entonces renunció a la concesión pero ahora ha vuelto...
-El grupo aragonés dedicado al reciclado de materiales y la economía circular también recicla aeronaves y acaba de cumplir 50 años y en agosto obtuvo una concesión de terrenos de 80.000 m2 para reciclar y desmantelar aeronaves en la zona del nuevo PIGA. Su intención inicial era construir una instalación de reciclado en Zaragoza. Los años y las circunstancias económicas fueron actualizando la iniciativa y en marzo de 2009, cuando comenzaron las obras, nació al Aeropuerto de Teruel: instalaciones iniciales con pista de vuelo, zona para estacionar 150 grandes aviones, plataforma de mantenimiento y área industrial. En el año 2011 se terminó el hangar para aviones tipo B747 y la zona de estacionamiento de helicópteros. Finalmente, López Soriano desistió al principio del concurso de concesión del aeropuerto en 2009 por ciertas dificultades en las condiciones económicas, y 15 años después se mostraron interesados y ganaron la nueva concesión de reciclado de aeronaves del nuevo PIGA, lo que permite apreciar el cambio producido.
-Pero Tarmac Aragón firmó en 2012 un contrato de exclusividad para las actividades de mantenimiento y reciclado en la plataforma aeroportuaria...
-Al concurso público de 8 hectáreas de terrenos del nuevo PIGA se pudo presentar Tarmac. Es una zona para actividades de reciclado de aeronaves en el nuevo PIGA y por tanto, no es exclusivo para ellos como suscribe la legislación vigente. A diferencia de Tarmac, el Grupo López Soriano si recicla materiales con medios propios, incluso dispone de instalaciones en el polígono de reciclado López Soriano en Zaragoza, por lo que sería un complemento muy eficaz para la gestión del reciclado sostenible de aeronaves y la mejora de la economía circular del transporte aéreo.
-¿Qué ampliaciones hay en marcha actualmente?
-Hay un fuerte plan de inversión para los próximos 3 años. Acabamos de terminar una planta fotovoltaica que nos permitirá disponer de 1,1 MW para autoconsumo en el aparcamiento para 160 vehículos y marquesinas que disponen de placas fotovoltaicas y que ha sido ejecutado en 4 meses. Además, IAC ha instalado en su hangar otra planta fotovoltaica de 0,5 MW. Acabamos de terminar las naves de 5.000 m2 y 1.500 m2 en la zona sur y se ha adjudicado su concesión a Airbus y la Elson Space. Recientemente, se ha adjudicado la obra del hangar y de la nave de producción para dirigibles con un presupuesto de unos 43,5 millones de euros (sin IVA) y 20 meses de ejecución. Esta previsto que aquí en unos dos años se comiencen a fabricar dirigibles (haps) y a realizar la operativa aérea, es decir, que vuelan a la estratosfera. En septiembre comenzamos las obras de la tercera fase de pavimentación de la plataforma de unos 37.000 m2 y la quinta de la campa por 11 millones de euros.
-Tarmac aseguró hace dos años que no necesitaba de esa ampliación de la campa de estacionamiento de larga estancia...
-Como las cuatro fases anteriores de pavimentación de la campa, es fundamental para el desarrollo y la generación de empleo en el Aeropuerto de Teruel.
-Mientras llega el nuevo hangar para dirigibles, la última gran obra fue el hangar doble con capacidad para dos A380...
-Nos olvidamos de lo que ya ha pasado, pero tuvimos que ejecutar la obra en pleno periodo de la pandemia con una escalada de precios de materiales y la dificultad de realizar los trabajos por el covid-19. Fueron momentos complicados. Inicialmente, se mostró al principio un recelo con que se realizara un hangar de estas características al considerar que iban a dejar de fabricar el avión A380. Lo cierto es que una vez terminado, Tarmac ganó la concesión por el interés de Airbus y llevan año y medio en funcionamiento e incluso se han animado a realizar otro hangar con capacidad para un A380, con lo que podemos decir que, una vez más, la decisión del Consorcio fue acertada. Adelantarnos y ser rápidos en las decisiones nos ha posicionado como aeropuerto preferente para invertir y desarrollar negocios aeronáuticos de alto valor añadido que generan muchos empleos.
-En paralelo, las empresas instaladas también están dando forma a las instalaciones que necesitan...
-Nuestros clientes también están invirtiendo actualmente. Así ha sido con el nuevo hangar metalotextil de A380 de Tarmac, la adecuación de instalaciones y ventilación del hangar de pintura de IAC o los bancos de prueba del Miura 5 de PLD Space. Todo esto representa unos 40 millones euros,adicionales a los que invertirá el Consorcio. El crecimiento es muy acelerado, lo que repercutirá en un incremento de negocios sin precedentes en Teruel.
-¿Cómo van las gestiones para la llegada de nuevas empresas?
-La llegada de nuevas empresas es una gran oportunidad para dotar de más capacidad y mejores servicios en el aeropuerto. Tenemos un gran prestigio internacional en innovación, aeronáutica y adaptación al sector, trabajando en proyectos pioneros de aviación, drones, eVTOL, materiales compuestos, IA y gestión aeroportuaria eficiente con sistemas automatizados de meteorología y tenemos una gestión pionera en España. Nuestros clientes siempre se han beneficiado de la atracción e interés cada vez mayor que despierta el aeropuerto internacional de Teruel para conseguir nuevos proveedores y clientes y este crecimiento sin duda beneficiará a todos. El ser pioneros y diferentes nos ha dado una gran ventaja competitiva.
-¿Cómo va el personal propio del Consorcio?
-Vamos a ampliarlo un 33 % este año pasando a 12 personas, a las que hay que añadir el apoyo del Gobierno de Aragón en el Consejo Rector con 5 miembros, la asesoría jurídica, la secretaria del Consejo, el asesor de comunicación y el personal para las mesas de contratación. Además, tenemos unas 80 personas en contratos de bomberos, seguridad y vigilancia, mantenimiento y operaciones, ingeniería, obras, servicios de gestoría, prevención, consultoría y meteorología, entre otros. Como resumen, seguiremos trabajando en los próximos años, adelantándonos en la industria aeronáutica, volando lejos para dar el mejor servicio a nuestros clientes.
-El Clúster de Aeronáutica, Espacial y Defensa de Aragón que usted preside, ¿cómo ha evolucionado en los últimos años?
-Hemos duplicado el número de socios en apenas dos años, llegando a cerca de 60 socios y esperamos continuar con el crecimiento de estos años. Es un sector que representa el 4 % del PIB de la Comunidad Autónoma, con unos 1.500 millones de euros de facturación anual y unos 7.000 empleos cualificados directos e indirectos. Se trata del clúster más longevo de Aragón, que en 17 años ha permitido generar un ecosistema de empresas que se apoyan, desarrollan y crecen en un sector con un fuerte componente de innovación, tecnológico y apostando por la sostenibilidad y digitalización en sus vertientes de IA, datos y mejora de la calidad, con altísimo nivel de seguridad. El transporte aéreo y su industria auxiliar, el desarrollo aeroespacial, así como la Defensa, necesita de empresas con una fuerte especialización que, con el talento y la formación, está posicionando a Aragón como un referente.
-¿Qué balance hace de su cargo como director del aeropuerto desde 2012?
-Me incorporé como primer director general el 6 de septiembre 2012. Han sido 12 años impulsando y dirigiendo el Aeropuerto Internacional de Teruel con un éxito que sigue sorprendiendo a nivel mundial, pero el reto principal fue comenzar de cero. Hubo que verificarlo y certificarlo en 5 meses para permitir el aterrizaje de grandes aeronaves, hito que se consiguió en marzo 2013. Por otro lado, Tarmac firmó finalmente el contrato de concesión con los requisitos iniciales tras un año de negociaciones. Fueron momentos iniciales muy complicados y de cierta incertidumbre, pero que con trabajo y esfuerzo pudimos superar.
-Las instalaciones se han transformado en este periodo...
-El crecimiento en estos años ha sido exponencial. Se han realizado muchas inversiones, que superan los 120 millones de euros, en pavimentaciones de plataformas y campa, hangares de todo tipo, naves, aparcamiento, viales, vehículos, handling, camiones de bomberos, PIGA, sistema de combustible de aviación, etcétera. Gracias al apoyo decidido del Gobierno de Aragón y el Ayuntamiento de Teruel, propietarios del Consorcio del aeropuerto, y a la gestión del mismo, se ha conseguido dotarlo de una gran capacidad y convertirlo en la mayor infraestructura aeroportuaria para el reciclado, almacenamiento, estacionamiento y pintura de aeronaves, actividades aeroespaciales e innovación aeronáutica de Europa.
-Este crecimiento ha ido acompañando de una intensa promoción...
-Ha sido un arduo trabajo dar a conocer el aeropuerto internacional viajando a las ferias aeronáuticas de toda Europa y participando en distintos congresos aeronáuticos y en foros y ponencias de ingeniería para dar a conocer el alto nivel técnico y logístico con el que se trabaja en el aeropuerto.
-¿Qué retorno ha tenido?
-Esta actividad ha supuesto la ampliación del número de clientes a 10 permanentes en el aeropuerto y más de 350 en total, así como de proveedores y empresas que participan en diferentes servicios como mantenimiento, extinción de incendios, ingeniería, obras, servicios de comunicaciones y un gran número de colaboraciones técnicas y de ingeniería con Enaire, Aesa, Gobierno de Aragón, Ayuntamiento de Teruel, Aemet, Aera, Unizar, Uned, Arex, proyectos europeos, etcétera. Pero lo impactante es que ahora más de 700 personas vienen diariamente a trabajar al aeropuerto y cuando comencé en septiembre 2012 estaba yo sólo en el edificio principal con un vigilante. Se espera que en unos 3 años se superen las 1.000 personas y otras 1.500 de puestos indirectos, una actividad sin precedentes en la provincia.
-¿Considera entonces que se han cumplido las expectativas?
-Puedo afirmar rotundamente que estos años han sido un gran éxito. La gestión y la colaboración público-privada ha permitido dotar a Teruel de un aeropuerto internacional industrial aeronáutico único a nivel mundial, con un crecimiento muy fuerte de superficie y operativa aérea, que a los 7 años se nos quedó pequeño. Y se ha ampliado con un nuevo PIGA de casi 2 millones de metros cuadrados. Seguimos ampliando año tras año, generando cada vez más empleo con el propósito de contribuir al desarrollo social y económico de Teruel.
-El Consejo Rector del Consorcio del Aeropuerto de Teruel aprobó el Plan Estratégico 2024-2027 hace un año...
-El apoyo y visión del actual consejero de Fomento y presidente del Consorcio, Octavio López, ha sido determinante para la fuerte expansión del aeropuerto desde hace un año y medio con un plan estratégico que contempla una inversión de más de 70 millones de euros, que además conlleva por primera vez la inversión de cifras similares por parte de las empresas instaladas. Se han invertido unos 120 millones desde el inicio del Consorcio en 2009 y el impacto económico en Teruel supera los 30 millones anuales, siendo el mayor generado de empleo de la provincia.
-Parte de la ciudadanía desconoce que fue concebido como un aeropuerto industrial...
-Las instalaciones fueron proyectadas bajo el concepto de máxima funcionalidad, con una inversión inicial de unos 40 millones de euros de aportación pública. Su Plan de negocios englobaba en la fase inicial el posicionamiento como el centro de mantenimiento MRO, de estacionamiento y reciclado de aeronaves más grande de Europa, dando servicios de toda la vida útil de la aeronave, incluida pintura, así como su focalización en la innovación y la sostenibilidad del sector. Se ha concebido desde su inicio para adaptarse a las necesidades y crecimiento racional, para minimizar costes y producir la mejor rentabilidad de la inversión. La idea original surgió de una empresa aragonesa hace más de veinte años, el Grupo López Soriano, que trasladó su iniciativa al Gobierno de Aragón.
-Entonces renunció a la concesión pero ahora ha vuelto...
-El grupo aragonés dedicado al reciclado de materiales y la economía circular también recicla aeronaves y acaba de cumplir 50 años y en agosto obtuvo una concesión de terrenos de 80.000 m2 para reciclar y desmantelar aeronaves en la zona del nuevo PIGA. Su intención inicial era construir una instalación de reciclado en Zaragoza. Los años y las circunstancias económicas fueron actualizando la iniciativa y en marzo de 2009, cuando comenzaron las obras, nació al Aeropuerto de Teruel: instalaciones iniciales con pista de vuelo, zona para estacionar 150 grandes aviones, plataforma de mantenimiento y área industrial. En el año 2011 se terminó el hangar para aviones tipo B747 y la zona de estacionamiento de helicópteros. Finalmente, López Soriano desistió al principio del concurso de concesión del aeropuerto en 2009 por ciertas dificultades en las condiciones económicas, y 15 años después se mostraron interesados y ganaron la nueva concesión de reciclado de aeronaves del nuevo PIGA, lo que permite apreciar el cambio producido.
-Pero Tarmac Aragón firmó en 2012 un contrato de exclusividad para las actividades de mantenimiento y reciclado en la plataforma aeroportuaria...
-Al concurso público de 8 hectáreas de terrenos del nuevo PIGA se pudo presentar Tarmac. Es una zona para actividades de reciclado de aeronaves en el nuevo PIGA y por tanto, no es exclusivo para ellos como suscribe la legislación vigente. A diferencia de Tarmac, el Grupo López Soriano si recicla materiales con medios propios, incluso dispone de instalaciones en el polígono de reciclado López Soriano en Zaragoza, por lo que sería un complemento muy eficaz para la gestión del reciclado sostenible de aeronaves y la mejora de la economía circular del transporte aéreo.
-¿Qué ampliaciones hay en marcha actualmente?
-Hay un fuerte plan de inversión para los próximos 3 años. Acabamos de terminar una planta fotovoltaica que nos permitirá disponer de 1,1 MW para autoconsumo en el aparcamiento para 160 vehículos y marquesinas que disponen de placas fotovoltaicas y que ha sido ejecutado en 4 meses. Además, IAC ha instalado en su hangar otra planta fotovoltaica de 0,5 MW. Acabamos de terminar las naves de 5.000 m2 y 1.500 m2 en la zona sur y se ha adjudicado su concesión a Airbus y la Elson Space. Recientemente, se ha adjudicado la obra del hangar y de la nave de producción para dirigibles con un presupuesto de unos 43,5 millones de euros (sin IVA) y 20 meses de ejecución. Esta previsto que aquí en unos dos años se comiencen a fabricar dirigibles (haps) y a realizar la operativa aérea, es decir, que vuelan a la estratosfera. En septiembre comenzamos las obras de la tercera fase de pavimentación de la plataforma de unos 37.000 m2 y la quinta de la campa por 11 millones de euros.
-Tarmac aseguró hace dos años que no necesitaba de esa ampliación de la campa de estacionamiento de larga estancia...
-Como las cuatro fases anteriores de pavimentación de la campa, es fundamental para el desarrollo y la generación de empleo en el Aeropuerto de Teruel.
-Mientras llega el nuevo hangar para dirigibles, la última gran obra fue el hangar doble con capacidad para dos A380...
-Nos olvidamos de lo que ya ha pasado, pero tuvimos que ejecutar la obra en pleno periodo de la pandemia con una escalada de precios de materiales y la dificultad de realizar los trabajos por el covid-19. Fueron momentos complicados. Inicialmente, se mostró al principio un recelo con que se realizara un hangar de estas características al considerar que iban a dejar de fabricar el avión A380. Lo cierto es que una vez terminado, Tarmac ganó la concesión por el interés de Airbus y llevan año y medio en funcionamiento e incluso se han animado a realizar otro hangar con capacidad para un A380, con lo que podemos decir que, una vez más, la decisión del Consorcio fue acertada. Adelantarnos y ser rápidos en las decisiones nos ha posicionado como aeropuerto preferente para invertir y desarrollar negocios aeronáuticos de alto valor añadido que generan muchos empleos.
-En paralelo, las empresas instaladas también están dando forma a las instalaciones que necesitan...
-Nuestros clientes también están invirtiendo actualmente. Así ha sido con el nuevo hangar metalotextil de A380 de Tarmac, la adecuación de instalaciones y ventilación del hangar de pintura de IAC o los bancos de prueba del Miura 5 de PLD Space. Todo esto representa unos 40 millones euros,adicionales a los que invertirá el Consorcio. El crecimiento es muy acelerado, lo que repercutirá en un incremento de negocios sin precedentes en Teruel.
-¿Cómo van las gestiones para la llegada de nuevas empresas?
-La llegada de nuevas empresas es una gran oportunidad para dotar de más capacidad y mejores servicios en el aeropuerto. Tenemos un gran prestigio internacional en innovación, aeronáutica y adaptación al sector, trabajando en proyectos pioneros de aviación, drones, eVTOL, materiales compuestos, IA y gestión aeroportuaria eficiente con sistemas automatizados de meteorología y tenemos una gestión pionera en España. Nuestros clientes siempre se han beneficiado de la atracción e interés cada vez mayor que despierta el aeropuerto internacional de Teruel para conseguir nuevos proveedores y clientes y este crecimiento sin duda beneficiará a todos. El ser pioneros y diferentes nos ha dado una gran ventaja competitiva.
-¿Cómo va el personal propio del Consorcio?
-Vamos a ampliarlo un 33 % este año pasando a 12 personas, a las que hay que añadir el apoyo del Gobierno de Aragón en el Consejo Rector con 5 miembros, la asesoría jurídica, la secretaria del Consejo, el asesor de comunicación y el personal para las mesas de contratación. Además, tenemos unas 80 personas en contratos de bomberos, seguridad y vigilancia, mantenimiento y operaciones, ingeniería, obras, servicios de gestoría, prevención, consultoría y meteorología, entre otros. Como resumen, seguiremos trabajando en los próximos años, adelantándonos en la industria aeronáutica, volando lejos para dar el mejor servicio a nuestros clientes.
-El Clúster de Aeronáutica, Espacial y Defensa de Aragón que usted preside, ¿cómo ha evolucionado en los últimos años?
-Hemos duplicado el número de socios en apenas dos años, llegando a cerca de 60 socios y esperamos continuar con el crecimiento de estos años. Es un sector que representa el 4 % del PIB de la Comunidad Autónoma, con unos 1.500 millones de euros de facturación anual y unos 7.000 empleos cualificados directos e indirectos. Se trata del clúster más longevo de Aragón, que en 17 años ha permitido generar un ecosistema de empresas que se apoyan, desarrollan y crecen en un sector con un fuerte componente de innovación, tecnológico y apostando por la sostenibilidad y digitalización en sus vertientes de IA, datos y mejora de la calidad, con altísimo nivel de seguridad. El transporte aéreo y su industria auxiliar, el desarrollo aeroespacial, así como la Defensa, necesita de empresas con una fuerte especialización que, con el talento y la formación, está posicionando a Aragón como un referente.
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