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Alberto Izquierdo, vicepresidente de la Diputación: “Hemos sido capaces de repartir más de 100 millones de euros entre los ayuntamientos esta legislatura” Alberto Izquierdo, vicepresidente de la Diputación: “Hemos sido capaces de repartir más de 100 millones de euros entre los ayuntamientos esta legislatura”
Alberto Izquierdo, vicepresidente de la Diputación de Teruel. J. L. R.

Alberto Izquierdo, vicepresidente de la Diputación: “Hemos sido capaces de repartir más de 100 millones de euros entre los ayuntamientos esta legislatura”

Afirma que “la provincia está dejando de recibir más de 5 millones de euros al año porque la capital no cumple con sus obligaciones”con los bomberos
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José Luis Rubio

El alcalde de Gúdar y vicepresidente de la Diputación de Teruel, Alberto Izquierdo (PAR), hace un balance positivo de los cuatro años en los que ha gobernado junto al PSOE en la institución provincial a pesar de haber vivido episodios complicados durante el mandato.

-Esta ha sido una legislatura atípica, marcada por la irrupción de dos temporales de nieve y la covid. ¿Qué balance hace de este periodo en el que gobernado al lado del PSOE?

-Es un balance es positivo de un trabajo en equipo y de una relación cordial con el socio de gobierno y también con Ciudadanos, con Ramón Fuertes, y con Pedro Bello (Ganar - IU). Ha sido una legislatura muy difícil porque hemos estado teniendo que aprender cada día. Apenas tres meses después de haber llegado al gobierno llegó la tormenta Gloria con una serie de problemas para los que no estábamos preparados para resolver y creo que fuimos capaces de hacerlo bien. Luego vino la pandemia y, después, Filomena. Pero al final, todo eso que nos ha hecho ir sobreponiéndonos en cada momento ha sido muy enriquecedor a la hora de aprender y, sobre todo, de conocer las posibilidades que tienen nuestros ayuntamientos, nuestra gente y nuestros alcaldes y alcaldesas, que han estado al 200 por cien, 24 horas al día, 365 días al año. El balance para mi, es positivo.

-¿Estas circunstancias han hecho que la Diputación desarrolle nuevas capacidades?

-Yo tenía una obsesión personal cuando llegamos al gobierno, y tengo que decir que también la tenía el presidente, que era conseguir acercar la Diputación a los municipios. En los últimos años la DPT se fue alejando poco a poco de los pueblos para convertirse en una institución más de la ciudad, a la que había que venir para todo. Y nuestra obsesión era, precisamente, lo contrario: ser nosotros los que fuéramos al territorio, los que estuviéramos con la gente. Ese aprendizaje, el estar con los alcaldes y con las personas de los territorios, apuestas como descentralizar la Diputación no haciendo todos los actos en la ciudad o abrir la sede de Alcañiz, marcan el que ha sido el gran reto de la legislatura de volver a ser el ayuntamiento de ayuntamientos.

-Uno de los servicios que presta la Diputación es el de bomberos. El lunes, el presidente explicó que se iba a estudiar con los servicios jurídicos llevar el caso de la ciudad de Teruel al Contencioso Administrativo ¿Hay novedades en este punto?

-Como bien dijo el presidente, nosotros llevamos mucho tiempo teniendo mucha paciencia. A mi entender, demasiada. Pero esto es un equipo de gobierno y las cosas se consensúan. Le he dicho muchas veces al presidente que ha pecado de bueno y hace tiempo que yo creo que lo que hay que hacer es poner ante la Justicia una situación que es claramente irregular. No vamos contra la ciudad de Teruel, sino que vamos a favor de la provincia porque la provincia está dejando de recibir más de cinco millones de euros al año porque la capital no cumple con sus obligaciones, y eso es una injusticia clarísima.

-En estos años se ha mejorado el servicio de extinción de incendios  con la incorporación de nuevos bomberos o la apertura y mejora de instalaciones. ¿Se cumple con estas mejoras con el servicio?

-El Servicio de Bomberos es tan importante, tan complejo y con tantas necesidades que nunca cumpliremos todo lo necesario porque la Ley del Fuego es muy exigente. Es una ley que comparto y que los que entendemos y conocemos el territorio sabemos que en los 35 minutos que marca a veces no se recorren 40 ó 50 kilómetros, dependiendo de la zona en la que se esté. Pero el esfuerzo ha sido muy grande. Hemos hecho un esfuerzo en personal, en plazas de bomberos o de mando. También hemos invertido en medios materiales que valen mucho dinero, como un camión autoescala que llegará  dentro de poco  que vale casi 800.000 euros o tres vehículos autobomba, uno forestal y dos urbanos, que también valen cerca de un millón de euros. Hemos mejorado el material con espalderas o trajes, que son cosas que no se ven y que valen cientos de miles de euros. O la apuesta que hemos hecho por el parque de Montalbán, el de Calamocha o el siguiente paso dejando totalmente encaminados los parques auxiliares. El primero será el de Cantavieja, para el que ya tenemos los terrenos.

Lo que hemos hecho es potenciar un servicio que no podemos hacer crecer más porque hay alguien que no cumple con su obligación. Por eso tenemos ese empeño, porque con los 5 millones al año que debería pagar el Ayuntamiento de Teruel, o 2 millones o 1 millón dependiendo del acuerdo al que se llegue, ya tendríamos parque auxiliar en Cantavieja, en el Matarraña, en Albarracín y en Gúdar-Javalambre. Es muy importante entender que, si mañana arde una casa en Valdelinares, cualquier servicio de extinción que llegue tardará una hora porque no podemos cumplir con la Ley del Fuego, porque no tenemos medios económicos para llegar a todo. Mientras tanto, le estamos regalando a una administración vecina y hermana un dinero para cumplir con una obligación que es suya. El servicio es tan importante y tiene que crecer, pero tenemos que hacerlo crecer entre todos, no contra todos que es lo que estamos viviendo.

-¿Cuáles son esas actuaciones que va a poner en marcha la institución provincial?

-Una cosa que nos encontramos fue que no había una planificación de futuro. Un servicio público tiene que tener una planificación de crecimientos, de mantenimiento, de formación... nos encontramos con el parque de Montalbán abierto ya, pero no había una planificación de los parques auxiliares, de cómo llegar a cualquier municipio en esos 35 minutos. Eso es la planificación de futuro. Y eso implica la construcción de los parques auxiliares de Cantavieja, Matarraña, Albarracín y Gúdar-Javalambre, además de la dotación de personal para esos parques con ocho o diez bomberos cada uno. Y hay que añadir la dotación de vehículos con una autobomba forestal y una autobomba urbana. El de los bomberos es un departamento en el que deberíamos invertir cada anualmente durante los próximos seis u ocho años unos dos millones. Y esos dos millones son los que le estamos regalando a alguien. Por eso no podemos cumplir con los municipios. Es una deslealtad del Ayuntamiento (de Teruel) que debería ser el tractor de la provincia y que, en vez de eso, está siendo el freno.

La mayoría de los habitantes de la ciudad de Teruel tienen su pueblo y viven en su pueblo en verano y van los fines de semana y no sé si la gente es consciente de que, si se quema su casa cuando vayan en Nochebuena, quizás no puedan llegar los bomberos a tiempo porque el Ayuntamiento de Teruel está consumiendo unos recursos que impiden que su pueblo tenga un buen servicio.

-La previsión señala una primavera y verano tórridos con un alto riesgo de incendio. ¿Se ha previsto de alguna manera cómo hacer frente a esta situación?

-Hemos tenido mucho interés en formar parte de los grupos operativos del Gobierno de Aragón, que antes no se hacía, y así ponernos a colaborar con el Servicio de Extinción del Gobierno de Aragón y del 112 haciendo cosas que no habíamos hecho nunca como llenar depósitos de agua para que puedan cargar los helicópteros. Hemos colaborado en lo que nos ha pedido DGA porque creemos que tenemos que ir todo a una. Es cierto que nos enfrentamos a una situación que va a ser muy difícil en la que este verano quizá se de la tormenta perfecta en el tema de los incendios. El monte está muy seco, la previsión de lluvia es muy baja y nos enfrentamos a una situación muy complicada, pero el servicio de bomberos estará donde el Gobierno de Aragón , que es quien dirige estos operativos, nos necesite, siempre que no tengamos que salvaguardar un casco urbano, que es nuestra competencia, y ahí vamos a estar.

Tenemos la suerte de tener cien personas en plantilla y todos están dispuestos a participar. En el incendio de Olba y San Agustín llevamos más de 50 efectivos. Somos un servicio con una parte importante de voluntarismo y de vocación.

-En un momento en el que el agua es un valor en alza, ¿cuál es la situación de Sastesa?

-Cuando se me encomendó la presidencia de Sastesa me encontré una empresa pública en al que no había nadie al volante y que perdía 135.000 euros al año. No es cierto que el dinero público no sea de nadie, sino que es de todos. Y se estaba perdiendo dinero por no hacer las cosas bien y en cuatro años, a partir del segundo ejercicio, hemos sido capaces de llegar a pérdidas cero y entrar en ganancias moderadas de entre 30.000 y 35.000 euros sin despedir a nadie y sin dejar de prestar ningún servicio, sino simplemente ajustando cosas que había ajustar. El dinero público es de todos y ahora Sastesa es capaz, prestando los mismos servicios, de ganar 35.000 euros después de estar perdiendo más de 100.000 euros cada año durante diez años, que es perder más de un millón de euros públicos por no hacer las cosas bien.

-Ahí cuentan con la colaboración del Gabinete Geológico

-Sastesa sigue colaborando con la DPT y con los municipios. Nosotros hemos vuelto a poner en marcha el Gabinete Geológico, que es muy importante. Cuando llegamos, este Gabinete tenía una inversión de 30.000 o 40.000 euros al año, que es ridícula, y pasamos a 300.000 haciendo el convenio marco del agua con los municipios. Hemos dejado a los municipios en una situación maravillosa en la que les invitamos a que nos cuenten su problema para que nosotros hagamos el estudio, todos los trabajos administrativos y solicitar todas las licencias, hacer el sondeo y darles las llaves. Y, dependiendo de su población, los ayuntamientos han tenido que pagar desde un 10 por ciento hasta un 40. Hemos garantizado la cantidad y la calidad del agua en más de 15 municipios de la provincia priorizando los que más lo necesitaban. Los ayuntamientos no tienen un geólogo en plantilla pero nosotros sí y nuestros geólogos hacen ese trabajo técnico y quitan a los ayuntamientos un quebradero de cabeza. La situación de los municipios de la provincia no es mala en cuanto a caudal y calidad del agua pero este año nos va a poner a prueba y donde pensábamos que no iba a haber problemas quizás este año sí los habrá. Pero también desde el servicio de bomberos garantizamos el abastecimiento.

-¿Se han mejorado la eficiencia de la red?

-Hemos hecho un proyecto que me ilusiona especialmente que es el Perte ( Proyecto estratégicos para la recuperación y transformación económica) del agua. Estuvimos hablando con nuestros geólogos y vimos una oportunidad porque somos una provincia  que tiene muchos municipios y que es muy dispersa y cumplíamos todos los parámetros que marcaba el Perte del agua. Todo eso que hemos hecho en el Perte, que suma más de 12 millones de inversión, si al final somos perceptores de esa ayuda de Europa, la próxima corporación solo tendrá que decidir si ese 10 por ciento, que casi dos millones de euros, los aporta la Diputación o los ayuntamientos. La voluntad del equipo de gobierno actual era cofinanciarlo para que a un ayuntamiento de cien habitantes modernizar su red y digitalizarla no le cueste más de 1.000 euros.

-Se refería usted al principio de esta entrevista a que la asistencia a los pueblos de la provincia ha sido una máxima para el equipo de gobierno. ¿Cómo se ha plasmado esta vocación municipalista?

-Hay una frase  que alcaldes de todos los colores políticos repiten y que es un ejemplo de lo que ha sido esta legislatura: “No volveremos a ver otra como esta”. Hemos sido capaces de repartir más de 100 millones de euros entre los ayuntamientos a lo largo de esta legislatura en Planes de Obras, de Concertación Municipal y Planes de Empleo en los que hemos pasado de 1,7 millones a 3,4. La inversión en centros educativos ha pasado de 500.000 a 800.000 euros y la inversión en las iglesias y los tempos de los municipios, que son en muchas ocasiones el mayor patrimonio arquitectónico y artístico de la localidad, ha pasado  de 60.000 euros a 150.000. Hemos cosas tan importantes como el Plan de Cultura, que sumaba 700.000 euros. Hemos multiplicado por dos los esfuerzos que la Diputación ha hecho en los ayuntamientos. Un municipio de unos cien habitantes, que antes recibía entre 20.000 y 25.000 euros ha pasado a recibir una media de 75.000, y eso se ha visto en los municipios.

-También se ha invertido en vías de comunicación.

-Hemos hecho una grandísima inversión en caminos rurales. Lo que nos encontramos era lo mismo que en Sastesa: no había nadie al volante y las máquinas  deambulaban por la provincia. Había municipios a los que habían ido cuatro veces en cuatro años y otros como Peñarroya de Tastavins en los que hacía 12 años que no había ido una máquina de Diputación. Hoy, las máquinas de la DPT pasan por todos los municipios en menos de dos años. Era un gran reto que teníamos por delante y lo hemos logrado con un gran esfuerzo. La Diputación gastaba 700.000 euros en este servicio y ahora gasta 2.000.000.

En carreteras hemos sido capaces de invertir  más de 50 millones de euros en esta legislatura. Eso es muchísimo dinero. Hemos sido capaces de multiplicar el presupuesto del Departamento de 8 millones a 23. Y eso también se ve. Hemos hecho una gran inversión en la mejora de la capa de rodadura de las carreteras provinciales mejorando la seguridad, hemos mejorado la señalización horizontal y vertical. Todo eso se ha hecho desde un criterio técnico y de vocación de ayudar a los que más lo necesita. Como en el caso de Abejuela, en el que hemos sido capaces de hacer una vía de comunicación de Abejuela con la provincia de Teruel y la estamos mejorando cada día para que tenga un servicio digno. Hemos impulsado proyectos tan importantes como el acceso Sur a Javalambre siendo capaces de colaborar con el Gobierno de Aragón en un proyecto estratégico para la provincia de Teruel y para Aragón.

-Se ha referido usted al Plan de Empleo de la Institución. ¿Ha sido una de las principales apuestas de este Ejecutivo?

-­La apuesta fue que hay un Plan de Empelo en la Diputación, que es histórico porque no es de ayer, y que enmarcaba entre 1,3 y 1,7 millones de euros en los últimos 10 años. Cuando llegamos al gobierno nos dimos cuenta de que para muchos pueblos de la provincia ese Plan de Empleo significa tener un operario de servicios múltiples, lo que se conoce como alguacil, en el municipio  dos o tres meses porque hay municipios muy pequeños en la provincia que no se pueden permitir tener una contratación todo el año porque sus recursos son limitados. Y nos dimos cuenta de que pasando de 1,7 a 3,4 millones al año, que es una cantidad muy importante, conseguíamos en un municipio de 80 o 90 habitantes hubiese un peón seis meses. para que haya alguien que alivie el trabajo del alcalde y de los concejales estando pendiente de cosas como limpiar las calles, regar las jardineras o que atienda a la gente. Este Plan de Empleo ha dado miles de puestos de trabajo a muchas personas en la provincia.

-En el plano más político, y tras la crisis interna que vivió este invierno el Partido Aragonés, usted fue destituido de sus cargos en la Diputación, fruto del acuerdo de gobernabilidad entre el PAR y el PSOE. ¿Cómo afrontó esta situación?

-Con tranquilidad, mucha tranquilidad Yo tomé una serie de decisiones en mi organización política que no tienen por qué influir al Gobierno porque a mi entender los partidos políticos son organismos democráticos, aunque parece que al entender de alguno no. Yo me posicioné junto a mucha gente en una opción que era la de defender nuestros intereses y por posicionarme en frente a lo que pensaba el ex presidente del partido, él utilizó la testosterona para llamar al presidente de la Diputación y obligarle a que me cesase. Eso es lo que pasó. Yo estaba muy tranquilo en aquel momento y de hecho se me llamó para decirme que si no reculaba en mis planteamientos me iban a cesar y  les recomendé que lo hicieran porque  no iba a cambiar. Soy una persona que suele actuar por convencimiento, individual y colectivo. El señor Aliaga me cesó porque entendió que me iba a asustar, pero no me asusté, ni mucho menos. Me sorprendió mucho ver como todos los alcaldes del PAR y otros de otros partidos me respaldaron porque entendieron que era una injusticia.

Tengo claro que si el presidente hubiera podido decidir no me hubiera cesado, eso lo tengo claro. Cuando volví, la única diferencia fue que tuve que asumir  las competencias que ya estaba asumiendo, porque hay gente como el señor Esteban que no ha hecho nada en estos cuatro años y no ha sido responsable del servicio ni de sus obligaciones. Ya estaba asumiendo de forma velada el Departamento de Bomberos y tuve que hacerlo de forma oficial porque ellos pasaron al Grupo Mixto para poder coger la silla que el Partido Popular había puesto.

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