105 de los 236 municipios de Teruel ganaron población el año pasado y 19 lograron mantener el censo
El incremento en 914 personas permite volver a superar los 135.000 habitantesLa provincia residente en la provincia de Teruel a 1 de enero de 2023 se situó en 135.046 habitantes, 914 más que en la misma fecha de 2022 (134.132), lo que supuso un incremento del 0,68 %. De los 236 municipios turolenses, 19 mantuvieron el mismo número de personas censadas, 105 ganaron un total de 1.594 y 112 perdieron en conjunto 680, según el primer censo de población anual publicado recientemente por el Instituto Nacional de Estadística (INE).
Estos nuevos censos permitirán disponer de información actualizada cada año en el caso de la población en lugar de cada 10 como sucedía con los decenales elaborados hasta ahora, según el INE. Además, se elaboran con información recogida en su totalidad a partir de registros administrativos, sin necesidad de encuestar a ningún hogar, señala.
Del total de habitantes con los que la provincia turolense comenzó el año, 68.416 eran hombres, 296 más que 12 meses antes, lo que supone un incremento del 0,43 %, y 66.630 mujeres, 618 más, lo que representa un crecimiento del 0,93 %.
Además, 118.354 (59.908 hombres y 58.446 mujeres) tenían nacionalidad española (el 87,6 %) y 16.692 (8.508 hombres y 8.184 mujeres) extranjera (12,4 %), lo que supuso un 9% de extranjeros más que un año antes.
Los extranjeros más numerosos a 1 de enero de 2023 fueron los marroquíes (5.187), los rumanos (4.929) y los colombianos (1.091).
De acuerdo a su lugar de nacimiento, 115.882 personas habían nacido en España y 19.164 en otro país. La diferencia con el número de extranjeros se debe a los procesos de adquisición de la nacionalidad española.
El peso relativo de la población turolense mayor de 65 años fue del 24 % (32.632 habitantes). Esto se tradujo en que la tasa de dependencia de los mayores de 65 años -que es la relación entre la población mayor de 65 años y la de 16 a 64 (83.711), edades consideradas activas- se situó en 0,39. La provincia cuenta además con 18.703 menores de 16 años.
Distribución
El año pasado hubo 105 municipios turolenses que ganaron población (44,5 %), en concreto, un total de 1.594 personas. En términos absolutos, los mayores incrementos se dieron en la capital, que vio incrementado su censo en 445 personas hasta las 36.155; Burbáguena (104 hasta las 376), Alcañiz (99 hasta las 16.108) y Utrillas (77 hasta las 3.088). Tan solo estas cuatro localidades sumaron 725 habitantes, prácticamente la mitad del total.
En términos relativos, hubo 7 pueblos que vieron aumentada su población en más de un 20 %, con Camarillas en primer lugar con un incremento del 29,75 % tras ganar 23 habitantes y pasar de 85 a 121. A continuación se sitúa Burbáguena, donde el crecimiento fue del 29,75 %, debido en buena medida a la población refugiada que aparece censada en la localidad. Completan este grupo Alpeñés (de 20 a 25, un 20%), Allueva (de 21 a 27 (un 22,22 %), Castejón de Tornos (de 53 a 70, un 24,29 %), El Cuervo (de 72 a 99, un 27,27 %) y Tormón (de 26 a 33, un 21,21 %).
Por lo que respecta a las capitales de comarca, además de Teruel y Alcañiz vieron aumentada su población Albarracín en 10 personas hasta las 1.016; Andorra, que registró 22 más hasta las 7.210 después de varios años de descensos; Cantavieja (11 más hasta las 718), Híjar (36 más hasta las 1.782) y Valderrobres (33 más hasta las 2.514), que mantiene su buena tendencia.
Por el contrario, las capitales comarcales que perdieron población fueron Calamocha y Mora de Rubielos, aunque fueron solo 5 y 2 personas, respectivamente, hasta las 4.469 y las 1.567.
De los 112 municipios que perdieron población en 2022 (el 47,5 %), el que más perdió en términos absolutos fue Montalbán. El censo de esta localidad de las Cuencas Mineras se redujo en 29 personas hasta las 1.180. Y en términos relativos fue Josa, en la misma comarca, que perdió 7 habitantes hasta los 35, lo que supuso el 20 % de su censo.
Entre tanto, los 19 municipios turolenses que comenzaron 2023 con la misma población que un año antes (el 8 %) fueron Aguilar del Alfambra (81), Albalate del Arzobispo (1.952), Anadón (33), El Castellar (55), Cortes de Aragón (61), Griegos (140), Libros (102), Miravete de la Sierra (28), Obón (35), Los Olmos (120), Ródenas (61), San Agustín (134), Singra (80), Torre de Arcas (82), Valacloche (26), Valdealgorfa (588), Valdecuenca (31), Villafranca del Campo (301) y Villanueva del Rebollar de la Sierra (44).
La provincia tenía a 1 de enero 94 municipios con menos de 100 habitantes, los mismos que un año antes, porque aunque al grupo se sumó Azaila, que perdió 15 y pasó de tener 105 a 98, salió del mismo Camarillas.
De 101 a 500 habitantes había 102 municipios, uno menos después de que Torrijo del Campo sumara 21 y alcanzara los 503. De esta forma, entre 501 y 1.000 pasó a haber 22).
Entre 1.001 y 2.000 se mantuvieron 8 (Albalate del Arzobispo, Albarracín, Híjar, Mas de las Matas, Montalbán, Mora de Rubielos, Santa Eulalia del Campo y Sarrión) y entre 2.001 a 5.000 siguieron 7 (Alcorisa, Calamocha, Calanda, Cella, Monreal, Utrillas y Valderrobres). Tan solo Calamocha, Alcañiz y la capital se sitúan por encima.