

México hace historia con la embolada de dos toros en las calles de San Cosme Xaloztoc
El banderillero Bernardo del Valle, clave en el festejoCamote era el nombre. La ganadería, Cristo Negro, de Tetla, Tlaxcala. Estos son los nombres para la historia de la tauromaquia popular mexicana. Camote ha sido el primer toro embolado en una calle del país azteca. Fue en San Cosme Xaloztoc, Tlaxcala, con motivo del Carnaval. La Peña Taurina Venustiano Carranza se puso en contacto, hace algún tiempo, con el banderillero castellonense Bernardo del Valle, Vallito, quien tiene familia política en Tlaxcala, para conseguir exhibir un astado embolado. Vallito se encargó del material, llevando, desde España, los hierros que luciría el animal. Del papeleo se encargó el propio ganadero de Cristo Negro. Una conjunción de personas que ha llevado a escribir un hito histórico, transportando una tradición peninsular, proveniente, según Natividad Nebot, de un rito neolítico de culto al sol. Finalmente fueron dos astados en otros tantos días consecutivos los que lucieron las bolas de fuego en las calles de San Cosme Xaloztoc.
No obstante no es el primer toro embolado de México. El propio Vallito ya colaboró en la celebración de dos toros embolados en las plazas de toros de Apizaco y Huamantla en mayo de 2014.
El evento, de los pasados uno y dos de marzo no estuvo exento de dificultades, ya que, a pesar de que Vallito avisó de la necesidad de colocar un palo de embolar, no se llegó a colocar este, teniéndose que atar el astado a las barreras para poder errarlo, lo que dificultó la tarea.
Durante el festejo hubieron seis cogidas, sin que ninguna de ellas revistiera gravedad.