Aarón Palacio, novillero: “Aún no sé si estaré en Teruel, pero me encantaría torear allí, la verdad, me haría una ilusión tremenda”

Aarón Palacio es la última sensación del toreo aragonés. Nacido en Biota, hecho en la escuela de Mar de Nubes, el joven novillero zaragozano (veinte años) viene pisando fuerte entre un elenco de novilleros aragoneses que vienen apretando fuerte. Cristiano Torres, Iker Fernández «el Mene», o el turolense Tomás González son algunos de los nombres que la tauromaquia aragonesa está lanzando al orbe de sangre y arena. Palacio cosechó en la provincia de Teruel dos éxitos rotundos: Cella, donde resultó triunfador de la feria, cortando tres orejas. Resultado similar obtuvo en Calanda, donde, tras cortar dos orejas, fue premiado como triunfador en un festejo mixto con Andy Cartagena y Paco Ureña. Hablamos con él sobre las pasada y presente temporadas, y todo aquello que las envuelve.

-¿Cuáles son los comienzos de Aarón Palacio en el mundo del toro?

-Pues mira, yo soy de un pueblo que se llama Biota, y ahí, en las Cinco Villas, hay mucha afición al festejo popular y yo empecé un poco por eso, porque ahí hay mucha afición al recorte y a los roscaderos y yo pues me fui aficionando a eso y poco a poco fui conociendo el festejo mayor y me fui interesando por mi cuenta por el toreo.

-Luego llegó Mar de Nubes que es fundamental en tu carrera...

-Sí, hombre. Mar de Nubes, yo siempre lo digo, es como una segunda familia. Cuando llegué, Mar de Nubes aún era una asociación y como había demanda de chicos que querían ser toreros, pues crearon la escuela, que hoy en día creo que está en uno de sus mejores momentos, porque tiene muchos alumnos y están recibiendo ayuda, además, de las administraciones y creo que sí es importante para que haya chicos que quieran ser toreros.

-El siguiente paso en tu carrera ha sido el apoderamiento por el Tato, la última figura de Aragón. ¿Qué cambios has notado desde que vas de la mano con el matador?

-El maestro la verdad que me aporta muchas cosas buenas. Lo primero, es una persona muy respetada en el mundo del toro y tiene muy buenas relaciones, conoce a toda la gente importante de este mundo. Creo que es un profesional como la copa de un pino y que me hace mucho hincapié en los detalles, en disfrutar, sobre todo, del camino, porque unos llegarán y otros no, pero lo importante es disfrutar del camino y aprovechar las oportunidades que uno tiene.

-Lo técnico se sobreentiende pero, ¿qué te aporta como persona tener al Tato a tu lado?

-Sí, hombre, técnicamente, sobre todo en el toreo de salón, porque es un enfermo del toreo y me aporta muchas cosas buenas, pero además como persona pues me hace mucho hincapié en en que disfrute, en ser buena persona, en respetar a mis compañeros, y luego, a la hora de salir a la plaza, pues a darlo todo y a aprovechar cada tarde. Al final, este año tengo la suerte de estar en plazas muy importantes y el devenir de mi carrera pues dependerá de de lo que haga cada tarde.

-La temporada pasada fue prácticamente a triunfo por tarde ¿Qué valoración haces de ese éxito del pasado año?

-Hombre, fue una temporada muy importante, ¿no? Lo primero, porque toreé en plazas de primera categoría en las que las cosas se dieron bien, aunque se podrían haber redondeado mucho más, pero bueno, pues es normal, estamos aprendiendo, hay muchos errores todos los días. Pero creo que puedo estar contento, tanto yo como todo mi equipo, porque, sobre todo, en los días más claves pasaron cosas en las plazas importantes en las que la gente pues se quedó con mi nombre y con ganas de volver a verme. Y entonces, este año espero repetir en todas esas plazas, estar mucho mejor que el año pasado y que la gente que me haya visto se lleve una sorpresa al ver toda la mejoría que he tenido este invierno; y la gente que no me haya visto, pues que se lleve la sorpresa de verme como una novedad buena.

-La verdad es que el arranque es fuerte. El día 8 en Valencia en la feria de Fallas, el día 23, San Jorge en la Misericordia de Zaragoza. Es buen comienzo...

-Muy, muy bueno. De momento, ya el pasado 16 de febrero toreé un festival con figuras del toreo en el que se dio muy bien también todo, y ahora, como bien dices, toreo en Valencia, que es una plaza importantísima, es una tarde súper relevante para que la temporada vaya a mejor. Y luego tengo Zaragoza, tengo Arles, tengo Madrid, Sevilla, si Dios quiere… Aún no han salido los carteles, pero yo creo que seguro que voy a torear. Entonces, como te decía antes, a disfrutar cada tarde, a aprovecharlas y a estar lo mejor que pueda.

-¿Cómo se prepara un un chico joven como eres tú, 20 años recién cumplidos, para una profesión como la de torero?

-Pues mira, yo creo que la preparación, ahora mismo, de los toreros es parecida a la de los atletas profesionales, entonces yo creo que será parecida a la de cualquier deportista de élite. Yo le dedico muchas horas al toreo de salón. Tengo la suerte de estar viviendo en una finca en la que le dedico 24 horas del día a esto y también tiene su parte de físico. Luego creo que en cada persona va el que esto te guste y te interese como para saber también cosas teóricas, como puede ser la historia del toreo, como puede ser los encastes, los toreros que ha habido en todos los tiempos… Y eso, más o menos, sería el entrenamiento que yo llevo a cabo.

-Has hablado de la parte física, pero el toreo tiene una parte emocional, una parte de magia. Dicen los que saben que Aarón Palacio está tocado por la varita, por el duende...

-Bueno, eso eso que lo digan otros. A mí no me gusta hablar de mí, pero yo lo que siempre digo es que, al final, en el toreo, la preparación que llevamos es de deportistas de élite, pero al final el toreo no es un deporte, ¿no? El toreo es algo que, cuando sales a la plaza, tienes que tener un fondo físico para poder llevar a cabo la línea del toreo de hoy en día, que al final pues es fuerte. Pero sobre todo tiene que haber un componente, como dices, de alma, de corazón, para que cuando tú estés toreando sientas algo y así poder hacer sentir algo al que está sentado arriba, porque si no es muy difícil.

-¿Se madura más a más velocidad cuando vives con un traje de luces puesto?

-Sí, hombre, yo creo que sí. Yo, una de las cosas de las que estoy más agradecido al mundo del toro, pues es eso, que al final te relacionas con gente mucho más mayor que tú, pasas mucho miedo, tienes muchas responsabilidades, mucha presión... Entonces, yo creo que todo eso hace que vayas creciendo, que te hagas hombre antes de tiempo. Yo recuerdo que con 14 años ya me sabía malo que me tratasen como un niño. Yo iba a los sitios y, si me trataban como un niño, a mí me sabía malo. Yo quería que me tratasen como un hombre, que me juzgasen como un hombre. Si estaba mal, que me lo dijesen, si estaba bien, también. Y creo que eso es algo positivo. Porque esto es un camino muy largo. Unos llegarán, otros no, pero eso son cosas que, seamos lo que seamos en la vida, nos llevaremos con nosotros.

-El año pasado, en la provincia de Teruel, sumaste dos triunfos rotundos en dos tardes.

-Sí, la verdad que estoy contento por los dos triunfos y ojalá este año pueda volver a esos dos sitios y, ¿por qué no?, a otros tantos como puede ser a la feria del Ángel de Teruel.

-¿Hay algún contacto?

-Pues si te soy sincero, no me gusta a mí meterme en esos temas porque para eso tengo a mi equipo, que es el que se dedica a las contrataciones, ellos se encargan de ponerme y, cuando estoy puesto en los carteles, el que se tiene que encargar de triunfar soy yo. Entonces yo me dedico a entrenar, a prepararme para aprovechar todas las tardes y, si te soy sincero, no tengo ni idea. Pero lo que sí que te puedo decir es que me encantaría, torear en Teruel, me haría una ilusión tremenda.

-Aarón Palacio pasa por ser la punta de lanza de una generación muy buena de novilleros aragoneses hoy en día.

-Pues sí, gracias a Dios, en Aragón el toreo estaba un poco muerto en el sentido de escuelas y de chavales y en la generación en la que yo empecé, que fue hace apenas 4 o 5 años, hubo un repunte de chicos que querían ser toreros. Las escuelas cogieron fuerza y se metieron en novilladas y clases prácticas con otras escuelas de España y gracias a Dios, pues fíjate, ahora mismo en Mar de Nubes hay 22 chavales.

-Para que digan que la tauromaquia no interesa la juventud, ¿no?

-Así es, así es. Eso es algo que se dice mucho, pero yo soy optimista, cada día veo más gente joven en la plaza y también es un poco labor de los profesionales, ¿no? El llenar la plaza, pero llenarla también de gente joven, que al final estos últimos años atrás pues las plazas se veían con mucha gente mayor y creo que eso al final pues es un problema, ¿no? Porque dentro de 15 años cuando yo sea figura el toreo, si la gente que hoy va a los toros solo es gente mayor, pues a mí ya me vendrá a ver la mitad de gente.

-Ahora está muy de moda sustituir novilladas por clases prácticas, ¿qué importancia tienen las novilladas en la fiesta?

-Yo soy partidario de que, donde se puede hacer una novillada, es mucho mejor que una clase práctica, ¿no? Porque al final lo primero las clases prácticas a nosotros no nos cuentan como novillada, entonces hay muchos chicos que han toreado 20 clases prácticas, pero no pueden debutar con picadores y eso es un problema.

Pero es que además yo he matado clases prácticas con unos novillos que se podían lidiar perfectamente en cualquier novillada de cualquier sitio. Y bueno, creo que también tiene su punto positivo la clase práctica, porque es mucho más barata.

Hay sitios que se están ahora dando novilladas que empezaron haciendo una clase práctica porque era más barato y como la gente lo cogió con gusto, pues ahora hacen una novillada, pero bueno, creo que es un trabajo de ir poco a poco. Lo que sí que creo es que no se deben de sustituir las novilladas que hay por clase prácticas, porque eso creo que es un error tanto para la fiesta como para nosotros.

-Imagina el cartel perfecto para Aarón Palacio ahora mismo.

-Hombre, pues sin lugar a duda tendría que estar Morante en el cartel, porque Morante para mí es el hijo de Dios. Y hombre, por soñar, es muy complicado, pero José Tomás pues es otro ídolo que tengo al que admiro mucho y son dos toreros pues que me vuelven loco.

-Por soñar, soñamos a lo grande, ¿no?

-Exacto, exacto.