En estos días de tedio y confinamiento voluntario, tengo tiempo para casi todo. Y como una de mis pasiones es la ciencia ficción y el mundo de los cómics, en las últimas semanas he decidido repasar toda la saga de Los Vengadores de Marvel (22 películas, ahí es nada). Aunque hay algunos expertos que dicen que esto no es cine de verdad, a mi me hacen pasar muy buenos ratos y me evaden de problemas y preocupaciones.
Además de esta saga, soy fan de los X-Men, Mr. Glass o Batman entre otros. Y es que me siento muy identificada con el mensaje, a veces un tanto infantil pero siempre valioso, que lanzan este tipo de historias. En general, tanto el superhéroe como el villano son personas "diferentes" y con habilidades especiales que utilizan para hacer el bien o el mal, según acepten su diferencia.
Siempre he pensado que este tipo de historias son el acicate necesario para entender desde niños que la diversidad es buena. En la sociedad del siglo XXI tendemos a la uniformidad y cada vez es más difícil salirse de los cánones establecidos. Por eso es bueno que existan historias de ficción que nos enseñen que es posible que esa persona que no encaja nunca, que es apartado por la sociedad porque sus cualidades no corresponden con lo esperado, sea una pieza fundamental para la historia o el progreso de la humanidad.
Por otro lado, este mensaje es extrapolable a las personas con discapacidad. Desarrollar otras cualidades cuando nuestra salud se ve mermada de alguna forma, es un rasgo común en casi todos nosotros. En cierto modo, somos como esos superhéroes que son capaces de hacer cosas extraordinarias a partir de una situación crítica que podría haber acabado con sus vidas.
La forma en que tengamos de afrontar esa diversidad funcional, nos permitirá ser útiles a la sociedad o un lastre para la misma. Siempre he defendido la idea de que no somos especiales, ni mejores, ni héroes. Los cómics son solamente eso, ficción que transmite de una forma velada aprendizajes útiles para todos.
Pero en la vida real, es labor de los poderes públicos conseguir que todos los que tenemos capacidades diferentes tengamos la oportunidad de decidir con libertad si tenemos un sitio en la sociedad o no.