Las fiestas de la Vaquilla, que se celebran a principios del mes de julio, son el escaparate para otras fiestas que se hacen durante el verano. Los músicos que actuaban aquí se lucían porque venían de otros municipios para verlos y contratarlos para sus fiestas.
Así lo explicó Jesús Puerto, técnico de sonido y veterano peñista, que fue mantenedor de las Fiestas del Ángel, y que ayer ofreció una charla con motivo de los actos que Interpeñas ha organizado con motivo de la Semana de San Fernando.
La charla estuvo amenizada con música. Puerto puso para que los asistentes pudieran escuchar diferentes fragmentos de temas grabados por él mismo para mostrar la evolución de la fiesta a nivel de música.
Puerto hizo un repaso a la música que se puede escuchar en los diferentes locales de las peñas desde la década de los años 60 del pasado siglo hasta nuestros días. Llevó grabaciones de conjuntos de aquella época y también algunas canciones que se han grabado sobre Teruel.
Y es que Puerto tiene una fonoteca formada por 700 archivos sonoros de diferentes conciertos, actuaciones y espectáculos que se programan en la ciudad a lo largo del año, recogidos durante sus 40 años de profesión.
“Hasta los años 90 las mejores orquestas de Zaragoza y Valencia venían a Teruel en la Vaquilla, porque para ellos esta ciudad era como una joya, un escaparate para poder trabajar el resto del verano”, comentó Puerto sobre lo que ocurría a nivel de música en el último cuarto del siglo XX.
Después, las discomóviles fueron ganando terreno y se impusieron a las orquestas. “Hubo un bajón pero en los últimos años la situación está cambiando”, consideró.
En su opinión, para las discomóviles Teruel también supone un escaparate para próximas contrataciones y aunque los más jóvenes las siguen demandando, los vaquilleros a partir de los 30 años reclama grupos conocidos y es por lo que están apostando las peñas. Así, en los últimos años se han visto en sus locales grupos como Toreros Muertos, Seguridad Social o Celtas Cortos.
Puerto, que por su trabajo ha recorrido las fiestas de otras ciudades, reconoce que como las de Teruel no hay en otro sitios, porque no se aglutinan tanta oferta musical a la vez abierta al público. “En Valencia, por ejemplo, los casals se cierran a sus socios y aquí está todo abierto y asumido por las peñas”.