Los personajes más terroríficos se pasean por las calles de Teruel y la provincia para celebrar Halloween
Pintacaras, desfile de disfraces, proyecciones y mucho más para celebrar la noche de los muertosLos jóvenes y no tan jóvenes turolenses pasaron ayer una tarde terroríficamente divertida gracias a las actividades que se organizaron desde las distintas asociaciones para celebrar la fiesta de Halloween. Entre todas las propuestas, la más numerosa en cuanto a participantes y ambiciosa por su programa, fue la del Centro Comercial Abierto de Teruel que arrancó a las 17:30 horas con pintacaras, sustos y el tradicional truco o trato por los comercios del centro histórico y terminó pasadas las 20:00 horas con el desfile de disfraces.
Las calles de la capital mudéjar y también las algunos pueblos de la provincia se llenaron de personajes aterradores y espeluznantes típicos de Halloween como novias cadáver, vampiros, calaveras mexicanas, brujas, fantasmas o payasos y entre todos eso disfraces tradicionales también se colaron algunos más modernos como el de los famosos atracadores de la serie española, La casa de papel.
En el centro de la ciudad, niños y niñas acompañados por sus padres acudieron a la plaza del Ayuntamiento a las 17:30 horas, donde el CCA había preparado pintacaras para dar el toque final a los disfraces de los pequeños. Pero sin duda, uno de los actos más multitudinarios fue la cuarta edición de la Carrera Halloween promovida por el Centro Comercial Abierto de Teruel. Los niños debían completar una vuelta a la manzana, pasando por la plaza del Torico para terminar de nuevo en la línea de salida donde recibieron unas chucherías cortesía de Martín Martín y un vale para disfrutar de un chocolate caliente y una pieza de bollería de la Escuela de Hostelería que estuvo repartiendo entre todos los asistentes.
“Este es un fenómeno que cada día está cogiendo más fuerza, la plaza está abarrotada y es un éxito garantizado porque para los niños es una actividad muy divertida”, apuntó Rodolfo Pangua, gerente del CCA, haciendo alusión a la celebración de Halloween. “Los primeros años solo se disfrazaban los niños y algún padre más atrevido, pero cada edición hay más padres que también se visten”, añadió.
Después de coger fuerzas, los pequeños se acercaron al escenario donde Mara Palenzuela comenzó con la animación de baile. Ella y sus terroríficos amigos hicieron disfrutar a grandes y pequeños con su espectáculo Esto es Halloween.
Por último, a las 19:00 tuvo lugar el desfile de disfraces, donde se repartieron algunos premios entre los participantes. No obstante, durante toda la tarde, los jóvenes visitaron los comercios asociados del centro histórico turolense a los que previamente se les había hecho entrega de hasta 45.000 caramelos para repartir entre los disfrazados. “Además los padres que se animen a comprar en estos establecimientos podrán participar hasta el 3 de noviembre en el sorteo de 500 euros que se repartirán en premios de 10 euros. Lo pueden hacer o con la tarjeta Soy de Teruel o enviando por WhatApp el ticket de compra”, añadió Pangua.
El gerente recordó también que hasta esa misma fecha está abierta la segunda edición del Concurso de Sustos del CCA, en el que los participantes deben grabar un video dando el mayor susto de su vida y así optar a un premio de 300 euros. De nuevo, el vídeo se podrá enviar al WhatsApp del CCA con número 662 385 370 o al Facebook, Centro Comercial Abierto de Teruel.
En barrios y pueblos
La fiesta de Halloween no solo se celebró en el centro de la ciudad. Algunos barrios y sus asociaciones de vecinos como la del Arrabal programaron actividades durante toda la tarde. En el centro social se celebró una chocolatada, proyectaron la película de Hotel Transilvania y después los pequeños aprovecharon para hacer el truco o trato por el barrio.
Otras como la Asociación de vecinos y comerciantes del barrio San Julián celebraron la fiesta un día antes, con las llamadas Ánimas de San Julián.
También algunos pueblos turolenses se unieron a esta tradición importada de Estados Unidos. En Berge una veintena de niños y niñas recorrieron las calles de la localidad pasando por casas de padres, abuelos y amigos en busca de chucherías. Y lo mismo en riodeva.
Alumnos de la Escuela de Arte celebran su Halloween particular
Desde las asignaturas de Artes Escénicas y Música los alumnos de Bachillerato de la Escuela de Arte interpretaron el pasado 28 de octubre varias escenas terroríficas muy acordes con la fiesta de Halloween, pero alejadas de los tópicos americanos que tuvo como resultado un espectáculo tenebroso.
En esta edición de la Escuela Encantada la temática, representativa de las enseñanzas impartidas en el Bachillerato artístico, era Cuadros vivientes. La puesta en escena tuvo lugar en la sala de exposiciones de la escuela, escenario idóneo donde una guía y su becaria recibieron a los asistentes guiándolos por el espacio que se dividía en cuatro secciones vertebradas por las referencias a famosos cuadros: Medusa de Rubens, Los amantes de Magritte, Las Hilanderas de Velázquez y, para concluir, una escena que integraba La Noche Estrellada de Van Gogh, El Caminante sobre un mar de nubes de Friedrich y Saturno devorando a sus hijos de Goya.
Los alumnos dieron vida a estos cuadros desde varias disciplinas artísticas tales como la danza, el canto, la música en directo y el teatro. Para dar emoción y suspense entre escena y escena, aparecieron también personajes individuales como Ofelia de Hamlet y El Grito de Munch. El Grado de Ilustración realizó el cartel publicitario de dicha obra y los alumnos de Cultura Audiovisual se encargaron de la iluminación, proyecciones y sonido.
Al finalizar la exposición, los actores rompían con el personaje para realizar una reflexión sobre los miedos y preocupaciones que persiguen al ser humano día a día.
La obra tuvo una acogida muy positiva por parte del público, llegando a realizar cinco pases debido a la gran afluencia de personas -finalmente se contabilizaron un total de 130 espectadores. Pese al trabajo requerido, los alumnos aseguran que todo resultó mucho más sencillo gracias al compañerismo y al apoyo del equipo docente.
“Debería haber un día, aunque solo fuese uno, en el que todos sacáramos nuestros deseos fuera. Porque no os engañéis, los monstruos no solo salen una noche, nos acompañan día a día”, expresó la guía de la exposición.