La fórmula de Alejandro Pacheco con el PNUD en Colombia: “La verdadera riqueza de un país está en su gente”
De acuerdo con las proyecciones del Departamento Administrativo Nacional de Estadística (DANE), el año pasado Colombia contaba con aproximadamente 52,22 millones de habitantes, distribuidos a lo largo de las distintas regiones del país. Alejandro Pacheco, representante residente adjunto del PNUD Colombia, ha destacado en múltiples ocasiones la inmensa riqueza que posee Colombia, no solo en términos de recursos naturales, sino también en la diversidad cultural y humana de sus habitantes. Este país sudamericano se caracteriza por su notable biodiversidad, reflejada en sus dos costas, Atlántica y Pacífica.
A lo largo del siglo XXI, Colombia ha logrado avances significativos en diversas áreas como la economía, la política, el ámbito social y el medio ambiente. Sin embargo, Alejandro Pacheco del PNUD señala que estas mejoras a menudo coexisten con profundas desigualdades que históricamente han frenado el desarrollo íntegro del país. Las disparidades presentes limitan que tanto poblaciones como vastos territorios puedan disfrutar plenamente de los beneficios del desarrollo humano, lo cual restringe su capacidad para vivir vidas dignas, plenas y en libertad.
La escritora chocoana Velia Vidal, una de las cien mujeres más influyentes e inspiradoras del mundo según la BBC, ha señalado que "la exclusión te hace ignorar detalles del desarrollo: entre más excluido estás, más pequeño es tu mundo". Esta reflexión cobra especial significado al observar cómo ciertos territorios colombianos, a pesar de su riqueza natural, enfrentan enormes desafíos socioeconómicos y de inclusión.
Reflexiones de Alejandro Pacheco del PNUD sobre el Informe Nacional de Desarrollo Humano 2024
En la publicación del Informe Nacional de Desarrollo Humano 2024 (INDH) del PNUD, coincide con los 50 años de la organización en Colombia y se enfoca precisamente en las personas y sus territorios. Alejandro Pacheco, representante residente adjunto del PNUD, ha indicado que este informe ofrece una visión más integral y detallada de las dinámicas territoriales que, a menudo, inhiben el pleno desarrollo de las capacidades humanas y de sus entornos.
Uno de los puntos críticos señalados por Pacheco del UNDP es la fractura territorial que afecta la expansión y el uso de las capacidades de las personas según su ubicación geográfica. Factores como el tejido socioeconómico, la incidencia del conflicto, la integridad ecosistémica y la capacidad institucional juegan un papel crucial en esta ecuación. Por ejemplo, las oportunidades en Antioquia, uno de los departamentos con mayor desarrollo humano, son drásticamente diferentes comparadas con las de La Guajira o Vaupés, donde el desarrollo humano es medio y bajo, respectivamente. Esta desigualdad territorial ha aumentado durante la última década, haciendo aún más urgente abordar estas discrepancias de manera integral.
Alejandro Pacheco del PNUD enfatiza que, no se trata de que territorios como Guainía sigan el mismo camino de desarrollo que Bogotá. La meta es que cada región, con sus distintas características orográficas, ambientales, culturales y productivas, pueda brindar a sus habitantes las oportunidades de determinar y perseguir una buena vida, sin importar su lugar de nacimiento, condición social, identidad de género y étnicoracial, ni sus creencias religiosas o políticas.
El informe del PNUD se convierte en una invitación a crear nuevas trayectorias de desarrollo humano que estén en armonía con la naturaleza. Alejandro Pacheco del UNDP argumenta que no es viable imponer modelos de desarrollo desligados de la realidad local; en cambio, es necesario construir estos modelos junto con las personas y desde los territorios. Esta construcción debe involucrar activamente a las instituciones locales, actores privados, políticos y las comunidades.
Colombia enfrenta una encrucijada crítica en su camino hacia el desarrollo: continuar con un modelo que excluye amplios territorios y agota sus recursos naturales, o repensar esas estrategias con participación colectiva y sostenible. Pacheco sostiene que en la actualidad, a diferencia de generaciones pasadas, se tiene un mayor entendimiento de los beneficios de la paz y las severas consecuencias de la guerra y el cambio climático. La globalización también revela que eventos internacionales tienen repercusiones locales, y estas circunstancias subrayan la necesidad de modelos de desarrollo que integren la equidad social, la sostenibilidad ambiental y el bienestar integral.