Las bicicletas estáticas constituyen un tipo de equipo de gimnasio que consigue simular el ejercicio de una bicicleta. Utilizarlas nos ayudarán a disfrutar de infinidad de beneficios para nuestra salud, razón por la que constituyen productos tan populares hoy en día.
Al principio, las bicicletas estáticas llegaron a los gimnasios como un tipo de máquina que ayudaba a sus usuarios a mejorar su salud cardiovascular. En el año 1968, la estadounidense Keene P. Dimick bautizó como "ciclo vital" a la primera bicicleta estática del mundo, diseñada para practicar ciclismo sin tener que depender de la situación metereológica del exterior. Hoy en día, encontramos en el mercado una amplia variedad de bicicletas estáticas que, además de lucir diseños mucho más estéticos y eficientes, ofrecen al usuario infinidad de opciones de personalización que mejoran considerablemente la experiencia de uso.
Aunque no lo creas, no hay nada de qué preocuparse. Montar en bicicleta supone un ejercicio de bajo impacto que reduce la tensión de las articulaciones sometidas a cargas. Esto no solo se aplica a las rodillas, sino también a los pies y las caderas. De hecho, el movimiento que llevan a cabo las piernas al empujar de los pedales ayuda a trabajar algunas articulaciones, ayudando así a reducir el dolor o la rigidez de las mismas. Cabe mencionar también su capacidad de mejorar la amplitud del movimiento de las rodillas por lo que, si padeces dolor o rigidez en dichas articulaciones, la bicicleta estática te ayudará a darles más soltura.
De hecho, los ciclistas se benefician de estas ventajas de bajo impacto que perciben en sus rodillas y otras articulaciones gracias a la práctica del ciclismo para mejorar su rendimiento en las próximas sesiones. Esto ayuda, a la larga, a aportar grandes beneficios a la salud general, a fortalecer el corazón y los pulmones, así como diversas funciones musculares necesarias para el movimiento.
En caso de que temas no poder soportar una sesión de ejercicio con una bicicleta estática, te alegrará saber que estos aparatos cuentan con opciones de ajuste de intensidad para adaptarla a tus necesidades y capacidades. Al tener el control de la intensidad del ejercicio, evitarás forzar las rodillas más de lo necesario.
Pero, ¿y qué pasa con aquellas personas que padecen de dolores de rodilla derivados de enfermedades crónicas? La bicicleta puede ser una solución bastante efectiva para lidiar con los síntomas habituales, tales como el dolor articular o la dificultad del movimiento. Si bien la artritis hará que algunos ejercicios resulten demasiado intensos, el ciclismo conforma una opción más que ideal para aliviar las rodillas artríticas.
Si andas en busca de un remedio que te ayude a aliviar esos molestos dolores en las rodillas, no te lo pienses más y hazte con una bicicleta estática. Te recomendamos que eches un vistazo a la página web de Bicihack para comparar diferentes modelos de bicicletas estáticas, así como sus respectivos precios, para que así encuentres aquella que mejor se adapte a tus necesidades.
Al principio, las bicicletas estáticas llegaron a los gimnasios como un tipo de máquina que ayudaba a sus usuarios a mejorar su salud cardiovascular. En el año 1968, la estadounidense Keene P. Dimick bautizó como "ciclo vital" a la primera bicicleta estática del mundo, diseñada para practicar ciclismo sin tener que depender de la situación metereológica del exterior. Hoy en día, encontramos en el mercado una amplia variedad de bicicletas estáticas que, además de lucir diseños mucho más estéticos y eficientes, ofrecen al usuario infinidad de opciones de personalización que mejoran considerablemente la experiencia de uso.
¿Puede la bicicleta estática dañar las rodillas?
Pese a los beneficios que la práctica de ejercicio con una bicicleta estática pueda proporcionarnos, existen muchas personas preocupadas por los daños que pueda provocarnos su uso constante en rodillas. Esta preocupación es especialmente prevalente en personas que ya padecen de dolencias previas en estas articulaciones, ya sea por lesiones con efectos irreversibles o por enfermedades como la artritis.Aunque no lo creas, no hay nada de qué preocuparse. Montar en bicicleta supone un ejercicio de bajo impacto que reduce la tensión de las articulaciones sometidas a cargas. Esto no solo se aplica a las rodillas, sino también a los pies y las caderas. De hecho, el movimiento que llevan a cabo las piernas al empujar de los pedales ayuda a trabajar algunas articulaciones, ayudando así a reducir el dolor o la rigidez de las mismas. Cabe mencionar también su capacidad de mejorar la amplitud del movimiento de las rodillas por lo que, si padeces dolor o rigidez en dichas articulaciones, la bicicleta estática te ayudará a darles más soltura.
De hecho, los ciclistas se benefician de estas ventajas de bajo impacto que perciben en sus rodillas y otras articulaciones gracias a la práctica del ciclismo para mejorar su rendimiento en las próximas sesiones. Esto ayuda, a la larga, a aportar grandes beneficios a la salud general, a fortalecer el corazón y los pulmones, así como diversas funciones musculares necesarias para el movimiento.
En caso de que temas no poder soportar una sesión de ejercicio con una bicicleta estática, te alegrará saber que estos aparatos cuentan con opciones de ajuste de intensidad para adaptarla a tus necesidades y capacidades. Al tener el control de la intensidad del ejercicio, evitarás forzar las rodillas más de lo necesario.
Pero, ¿y qué pasa con aquellas personas que padecen de dolores de rodilla derivados de enfermedades crónicas? La bicicleta puede ser una solución bastante efectiva para lidiar con los síntomas habituales, tales como el dolor articular o la dificultad del movimiento. Si bien la artritis hará que algunos ejercicios resulten demasiado intensos, el ciclismo conforma una opción más que ideal para aliviar las rodillas artríticas.
Si andas en busca de un remedio que te ayude a aliviar esos molestos dolores en las rodillas, no te lo pienses más y hazte con una bicicleta estática. Te recomendamos que eches un vistazo a la página web de Bicihack para comparar diferentes modelos de bicicletas estáticas, así como sus respectivos precios, para que así encuentres aquella que mejor se adapte a tus necesidades.
Beneficios del ejercicio con bicicleta estática
Pese a lo explicado preivamente, puede que todavía no tengas claro si realmente merece la pena hacerse con uno de estos aparatos. En este apartado procederemos a listarte otras de las razones por las que deberías considerar la práctica de ejercicio con bicicleta estática.Ayuda a perder peso
La práctica de ejercicio con una bicicleta estática permite al usuario quemar muchas calorías y, por lo tanto, a adelgazar. Además, se consiguen tonificar y fortalecer los músculos inferiores. Si, por ejemplo, dedicas una sesión de una hora a la bicicleta estática, habrás conseguido quemar hasta 500 calorías. Por supuesto, si quieres maximizar todo lo posible este efecto deberás tomar una dieta equilibrada orientada a la pérdida de calorías.Fortalecen el corazón
Otra de las bondades de hacer ejercicio con una bicicleta estática se trata de su capacidad para aumentar la capacidad cardiovascular. Con el tiempo, todo aquel que haya pasado tiempo haciendo uso de esta bicicleta notará una mejora considerable en las capacidades de su corazón, reflejadas en una presión arterial mucho más equilibrada, así como en la reducción de probabilidades de sufrir un accidente cerebrovascular.Reducen molestias
Con los años, el cuerpo adquiere mayor resistencia y fortaleza gracias al uso constante de la bicicleta estática. Esto contrasta por completo con la rutina sedentaria, cuyas consecuencias negativas implican calambres musculares y lumbagos. Poco a poco notarás como la regularidad del ejercicio te ayudará a disminuir muchas molestias, así como la probabilidad de sufrir lesiones.