El alcorisano Pepe Lapuente, Medalla al Mérito Taurino

Cuando uno asoma la gaita por ese hotel céntrico de la capital del reino que custodia a escasas calles el legendario ruedo de las Ventas del Espíritu Santo, un buen ramillete de turolenses ya se solaza a las puertas del establecimiento esperando la llegada de protagonistas a un evento en el que otro turolense anda premiado entre la creme de la creme del orbe taurino. Nada menos que mezclado entre nombres míticos como Joselito, Victorino Martín o Enrique Ponce, e incluso al lado de heroicos seleccionadores de fútbol como Vicente del Bosque al que alguien le dijo allí mismo “Tú siempre serás nuestro seleccionador”. Así es. Y es que Pepe Lapuente nunca soñó tamaña gloria a la que ha llegado a las puertas de sus cincuenta y muchos años por ser un hombre honesto, por ser solidario siempre con los chavales que empiezan en esto del toro, pero sobre todo por amar al toreo tanto como a sus hijos, a los que tuve enfrente de mi durante el acto de homenaje a su padre y en los que vi reflejado en sus ojos el sereno orgullo de saberse parte de una familia distinguida. Porque es verdad que al final los premios y las distinciones quedan para los que te siguen y te quieren, y suman al linaje familiar la gloria de cada uno de ellos para dar honra a su nombre.

Así que Pepe Lapuente ya puede sumar a ese linaje nada menos que haber sido merecedor de la Medalla al Mérito Taurino que concede la Real Federación Taurina de España, una entidad que agrupa a más de 700 asociaciones culturales y peñas de todo el país y que como dijo el ganadero Victorino Martín al recoger su premio, son la base  de la que el espectáculo de los toros no puede prescindir si quiere afrontar con garantías el futuro. Los aficionados son un estamento fundamental. Así de sencillo. Sus palabras fueron tan aplaudidas como los dos mensajes que trasmitió el diestro José Miguel Arroyo Joselito en su intervención ante un salón lleno de aficionados, periodistas y taurinos llegados a esta Gala Nacional del Toreo desde todos los rincones de España. Joselito reclamó al toreo “optimismo” porque solo con él se puede ganar la historia y solo con él podemos afrontar las dificultades y los ataques que sufre la fiesta de los toros, y encargó a todos los presentes el compromiso íntimo de hacer aficionado a los toros a un niño. Noble encargo.

Hay que decir que a la lista de premiados se sumaban los matadores de toros Enrique Ponce, Ginés Marín y Jesús Enrique Colombo como triunfadores de la temporada 2017, y entre ellos Vicente del Bosque quien con sus palabras de agradecimiento tras recoger la medalla quiso tener un recuerdo de amistad para el veterano matador de toros Andrés Vázquez que recientemente ha superado una grave dolencia. La lista de premiados sería muy extensa de relacionar. Desde Mauricio Álvarez Duque de Gor a José Rodríguez,  Secretario General de la Consejería de Cultura de la Junta de Castilla y León. Y desde Carlos Martín Santoyo, Director del programa Grana y Oro de Castilla y León TV, a nuestro alcorisano Pepe Lapuente quien en su intervención se emocionó recordando a su padre y pidió para una nueva vida, si es que existe reencarnación, ser torero en la calle y en el ruedo como lo es Joselito. Su emocionada intervención fue la más aplaudida de todas, no en vano la turolense era la expedición más nutrida entre las presentes, a cuyo frente se encontraba la alcaldesa de Alcorisa, Julia Vicente. Por cierto, amigos y aficionados llegados de todos los rincones de la provincia de Teruel. Allí andaban ilustres aficionados como Joaquín Latorre, Tomás Montero, José Julio Torres, María Jesús Arenere, Joaquín Alcañiz, Vicente Ferrer o el Fiscal de la Audiencia Nacional Javier Zaragoza, y toreros como José Luis Traver Guanero, entre muchos otros.

Para terminar cabe decir que entre las peñas taurinas galardonadas lo fueron las de Torrejón, Villena, Caspe, Benasal, Segorbe y Trigueros en Huelva, además de la Peña Curro Romero de Almagro, la de El Ruedo de Almazán y la de Mayorga de Campos en Valladolid. Y una reflexión personal que surgió durante el acto: No hay mayor premio, ni medalla ni gloria que alguien pueda disfrutar en vida que ser arropado por una familia unida y ser abrazado y sacado a hombros por un ejército de amigos. Enhorabuena Pepe Lapuente por la Medalla de Plata al Mérito Taurino y por todas las medallas que te colgaron al cuello en forma de abrazos y besos todos los que estuvimos contigo.