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Consejos para ahorrar en calefacción en invierno Consejos para ahorrar en calefacción en invierno

Consejos para ahorrar en calefacción en invierno

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Con el precio de la electricidad y el gas por las nubes, y la amenaza de que Europa se puede enfrentar a cortes de suministros de cara al invierno, muchas familias se interesan por fórmulas para moderar su consumo y así ahorrar en calefacción. Por suerte, comparadores como TodoLuzyGas también ofrecen soluciones interesantes para conseguir este objetivo.
Antes de entrar de lleno en las medidas de ahorro, conviene dejar claro una máxima. Toda actuación que tenga como finalidad consumir menos gas o electricidad pasa por un buen mantenimiento, un buen aislamiento y un uso adecuado de los sistemas de calefacción, climatización y la caldera.

Temperaturas constantes en casa

Este último verano, el Gobierno introdujo una nueva medida, la de instar a los comercios a poner el aire acondicionado en sus locales a una temperatura de 27 grados centígrados. A su vez, proponía sistemas para mantener los locales cerrados y que no generar despilfarro de recursos.
Esto también se puede lograr en invierno a nivel doméstico, pero en lugar de mantener la temperatura del sistema de climatización a 27 grados, lograr que las estancias alcancen los 21-22 grados centígrados en horarios diurnos y los 18 durante la noche. Solo un grado más puede suponer un 7% más de gasto en la calefacción.
Esta temperatura es suficiente para disfrutar de un buen confort térmico. Solo tendrás que instalar unos termostatos de calefacción programables para comprobar cuál es el estado de la vivienda.

Haz un uso inteligente de la calefacción

Como apunte añadido al consejo anterior está el de hacer un uso eficiente de la calefacción. ¿Qué necesidad hay de que la vivienda esté cálida cuando no hay nadie en casa? Los sistemas programables se pueden encender por control remoto, de manera telemática, de modo que tienes la opción de activar la calefacción poco tiempo antes de llegar a casa.
A su vez, si vives en un lugar muy frío, programa las horas de encendido y apagado. No consumas electricidad o gas de manera poco eficiente. No solo por el coste económico asociado, sino por una mera cuestión de sostenibilidad ambiental.

Revisa el estado de la caldera y purga los radiadores

El comienzo de la temporada de frío, para el que aún pueden quedar unas semanas, es el momento idóneo para poner a punto la caldera. Este aparato está sujeto a revisiones periódicas para comprobar su buen estado.
Sin embargo, si sumas alguna revisión que incluya limpieza estarás consiguiendo que su funcionamiento sea más eficiente. Esto se traduce en un menor gasto económico. Asimismo, debes hacer lo propio con los radiadores, aquí no hay que avisar a un técnico, sino que basta con girar el tornillo de estos aparatos para liberar el agua y que se purguen por completo.
Otro apunte relacionado con los radiadores, nunca los cubras con muebles o ropa húmeda. Es habitual acelerar el secado de algunas prendas que aún están húmedas con el calor que aporta el radiador, pero esto acaba siendo contraproducente para su buen uso.

¿Puedes cambiarte de compañía de distribución?

Al inicio de la temporada de invierno aparecen muchas ofertas para cambiar los contratos de electricidad y gas. En el mercado hay muchas distribuidoras que ofrecen propuestas muy interesantes para ahorrar en el gasto económico.
Aquí la clave es saber cuánto uso vas a hacer de estos aparatos, aunque sea una aproximación, e ir escuchando propuestas. Los tramites para ahorrar gas, en cuanto al cambio de contrato y las nuevas condiciones, suele ser gratuito en muchas compañías. En este sentido, la solución pasa por encontrar la distribuidora que más se ajuste a tus necesidades y posibilidades económicas.

Aislamiento y ventilación

Aunque suene extraño, ventilar la vivienda en casa es una buena fórmula para mantener el confort térmico sin necesidad de abusar de la calefacción. Eso sí, solo debes ventilar una vez al día. El objetivo es eliminar la presencia de humedad en la vivienda que puede acabar afectando a textiles, paredes y mobiliario. Hazlo siempre a primera hora de la mañana y solo durante unos minutos.
En cuanto al aislamiento, los cerramientos son continuas fugas de temperatura y entrada de aire frío desde el exterior. Instala puertas y ventanas bien selladas, haz uso de persianas y cortinas y saca partido de la iluminación solar, que también puede calentar la vivienda en las horas centrales. Y no olvides colocar alfombras, especialmente en suelos de cerámica. Si el pavimento es de madera, mucho mejor, pues este material ayuda a optimizar el aislamiento térmico.
Como ves, hay muchas alternativas para ahorrar en calefacción. La mayoría de propuestas hacen referencia a un uso racional de la energía y los suministros. Si hay que abrigarse más en casa para poner un poco más baja la calefacción, pues tocará echar mano de una rebeca. Para conocer más información sobre gas y luz, no dudes en visitar el portal TodoLuzyGas.