De verdad que hago un esfuerzo cada semana para tratar temas locales en mi columna de opinión. Creo que los lectores de este diario tienen bastantes fuentes opinativas a su alcance como para que venga un servidor a darles la brasa con asuntos lejanos a nuestra provincia. Pero también les confieso que los acuerdos a los que está intentando llegar el líder socialista, Pedro Sánchez, con los independentistas me tienen sumido en una espiral de estupefacción. Así que la única manera que se me ocurre de canalizar un tema tan peliagudo es ver qué opinan nuestros políticos locales.
No es fácil. Me encantaría que los representantes socialistas en el Congreso y en el Senado por Teruel fuesen transparentes y nos contasen qué opinión les merece la condonación del 20% de la deuda de Cataluña (algo que repercutirá negativamente en territorios más vulnerables como el nuestro); cómo explicarán -sin sonrojarse- a los responsables de la seguridad ciudadana turolense que nadie cometió delitos durante los gravísimos altercados de 2019 donde varios agentes acabaron heridos; de qué manera argumentan a sus votantes que todo lo que han estado defendiendo durante meses haya mutado en tan sólo cinco días.
Sin embargo, busco y rebusco pero no veo reacción o posicionamiento alguno por parte de ninguno de los dos. Les confesaré, en honor a la verdad, que nuestro diputado socialista por Teruel, Herminio Sancho-sí Sánchez-no, tuvo la deferencia de ponerse en contacto conmigo tras una columna en la que le reclamaba precisamente eso: que nos dijese qué futuro le espera a Teruel si la investidura con los independentistas salía adelante. Fue un gesto que le honra y que se saldó con emplazarnos para tomar un café en cuanto podamos coincidir en espacio y tiempo. Ahora bien, no es conmigo sino con los votantes con los que tiene que tener esa deferencia para dar explicaciones.
Por un lado, Herminio lleva sin publicar absolutamente nada en Twitter desde hace ahora casi un año (el Facebook lo lleva más actualizado, todo hay que decirlo). Le animo a que desempolve sus redes sociales y le cuente -no sólo a mí, también al resto de los turolenses- qué piensa sobre unos pactos de tanto calado, tanto a nivel legal como económico y de convivencia. Sé que el diputado socialista, del que mucha gente me habla muy bien en lo personal, no tardará en hacer con sus votantes lo mismo que pretende hacer conmigo: contarme qué piensa él, Herminio, de todo lo que está pasando y cómo puede afectar a nuestra provincia.
El caso de la senadora socialista por Teruel, María José Villalba, es otro cantar. Es una política muy activa en redes sociales. Eso sí, poco de cosecha propia y mucho de replicar absolutamente todas las consignas de su partido. He hecho una búsqueda en su timeline de Twitter con la palabra “Teruel” y me han salido sólo 20 publicaciones en los últimos cuatro años. Para ser nuestra senadora poco habla de su provincia en sus perfiles, la verdad. Su posición respecto a todos estos pactos con los independentistas hay que deducirla en base a los retuits y “me gusta” que comparte incansablemente. Y no deja lugar a dudas.
Villalba no dudaba ayer mismo en repostear con cierto frenesí lo bueno que es para España que los militantes socialistas den su apoyo a Sánchez en la consulta interna. Tampoco se cansa de compartir absolutamente todo lo que hace y dice su lideresa en el Senado, la catalana Eva Granados; así como cada mensaje de la todavía ministra de Educación, la aragonesa Pilar Alegría; o cualquier declaración de la portavoz del PSOE en Aragón, Mayte Pérez. Algún malpensado creerá que María José es una pelota de manual. Yo creo que no, que simplemente usa sus redes como una herramienta propagandística sin más.
Pero claro, que nuestra senadora por Teruel publique en su Facebook la foto de Santos Cerdán en Bruselas junto a Puigdemont dice mucho de lo que piensa sobre estos pactos. O quizás todo lo contrario: que ni siquiera tiene un criterio propio sobre el asunto y se limita a retuitear compulsivamente.
A la vista está que poco interesa al ciudadano turolense lo que Villalba publica en sus redes, ya que la interacción con sus seguidores es casi nula. Y no me extraña. ¿Para qué preguntarle nada a alguien que sólo copia y pega consignas de partido? Es una pena que nuestros representantes no utilicen una herramienta tan cercana al ciudadano para contarnos qué piensan ellos, no sus partidos. Habrá que tomarse ese café con Herminio para trasladarles a ustedes su postura personal. Y que se sume Villalba si le apetece.
También les digo una cosa. Este comportamiento de los representantes del PSOE en el Congreso y en el Senado es extensible a los diputados y senadores provinciales del PP, salvo alguna excepción. Ya les digo yo que al final tendremos que reservar mesa para ocho.