El Palacio de la Aljafería es uno de los monumentos más emblemáticos de Aragón. En 2001 fue declarado Patrimonio Mundial por la UNESCO y también destaca como escenario clave en la historia y vida política de Aragón.
Tuve la suerte de acudir casi a diario durante unos cuantos años, para cubrir la información parlamentaria en Radio Zaragoza. Comisiones, ruedas de prensa, plenos… me encantaba asistir y trasladar a la sociedad a través de mis crónicas radiofónicas lo que allí ocurría porque los parlamentarios que hemos decidido nos representen en las Cortes, tienen mucha responsabilidad, tienen la potestad legislativa, aprueban presupuestos, impulsan y controlan la acción del Gobierno de Aragón y ejercen otras competencias. O sea, es una institución importantísima, muy top.
Ya lo fue en el siglo XI para los monarcas de la Taifa zaragozana, para Alfonso I en 1118, los Reyes Católicos levantaron aquí su palacio, eso sí, ellos, destruyendo parte del palacio medieval y cubriendo de la mezquita, que para eso eran católicos muy católicos. Tras algunas reformas más a lo largo de los años en 1983 se decidió que fuera la sede de las Cortes de Aragón, y el 20 de mayo de 1987 se inauguró el nuevo hemiciclo parlamentario, volviendo a retomar la importancia política de antaño.
Desde el viernes 23 de junio, Marta Fernández de VOX es presidenta de las Cortes de Aragón gracias al acuerdo con el PP. Es la segunda mujer que ostenta este cargo en el Parlamento aragonés y en su primer discurso se refirió a sí misma como presidente. PresidentE, sí. El detalle no es menor. En este lugar emblemático que representa tantas cosas para nuestra historia y donde ella misma la va a hacer, lo primero que hizo cuando supo que iba a ser presidentA de las Cortes de Aragón fue borrar sus redes sociales (el diario de sesiones siendo ella de diputada no lo puede borrar). Me dan ganas de llorar. Tantas mujeres que nos han precedido luchando por la igualdad que tenemos que seguir conquistando cada día… miedo me da lo que veremos en esta XI legislatura.