Y el voleibol volvió a Los Planos. El Club Voleibol Teruel hizo ayer una demostración de su potencial y exhibió una seriedad que todavía no se le había visto esta temporada. Los turolenses se impusieron a la Textil Santanderina de Jose Ignacio Marcos por un contundente 3-0 rompiendo una racha de tres derrotas consecutivas inédita en los últimos años de la historia del equipo.
Al CV Teruel le hacía falta ganar, y hacerlo así. Los hombres de Miguel Rivera comenzaron el encuentro serios, concentrados. Pero según avanzaba el partido fueron recuperando las sensaciones y los rictus mutaron en sonrisas al tiempo que Los Planos, que no mostraba su mejor entrada, se entregaba animando a los suyos.
El partido empezó con los turolenses tensos. Casi agarrotados, mientras que los centrales de la Textil se esforzaban bloqueando a sus atacantes, impidiendo que el balón traspasase su línea. Pero Folguera destapó el tarro de las esencias y desplegó un repertorio de jugadas que los cántabros no supieron contener. Después de ir todo el set a remolque de la Textil, los turolenses lograban igualar el marcador en 22-22 con saque de Sergi Reñé a la banda derecha. El pabellón se estremecía. Con el 24-23 parecía que la manga estaba decantada, pero los cántabros se revolvieron empatando. Vuelta a empezar. Una y otra vez en un final de set de infarto que se prolongó hasta el 31-29 con el que se lo anotaron los turolenses. Toda una demostración de concentración y seriedad en un set que fue la clave del partido y que el CV Teruel se apuntó por méritos propios, a pesar de la severa oposición, sobre todo en recepción, que hicieron del otro lado de la pista.
La segunda manga comenzó con dos puntos de ventaja para los locales, pero en seguida los de Marcos recuperaron la iniciativa en el marcador. Al menos en los primeros compases, hasta que un saque de Frank botó fuera y volvió a igualar las fuerzas en la segunda manga. 15-15, y los de Rivera parecían no incombustibles. Folguera repartía juego por ambos lados y por el centro descolorando al bloqueo. Radunovic, omnipresente, se reivindicó como el máximo anotador de los suyos, alternándose con Carlos Jiménez en las posiciones de punta, mientras que Lech, desde el opuesto, castigaba con dureza a la recepción rival. Y por el centro, Víctor Rodríguez y Marc Altayó se desdoblaban en labores defensivas corriendo de un lado a otro de la red al tiempo que se ofrecían con generosidad en los ataques. Así llegaron igualados al 17-17, pero el CV Teruel imprimió una marcha más y terminó llevándose también el segundo set. 2-0, y los gestos del banquillo naranja ya eran más tranquilizadores.
El tercero fue harina de otro costal. Los de Rivera estaban enchufados, exultantes, y supieron terminar de anular a sus rivales, que a penas lograron anotar 16 puntos, para terminar de suturar la herida naranja.
El Club Voleibol Teruel recuperó el juego y, lo que es más importante, las sensaciones y la confianza en su juego. Sobre todo de cara al partido del miércoles, en el que se disputará el primer título de la temporada, la Supercopa, ante el Unicaja Almería.
Autor: J.L.R. Teruel