Una estación de autocaravanas se suma a los servicios turísticos que ofrece Ejulve

Los más de 55.000 autocaravanistas de España y las decenas de miles de extranjeros que se dejan caer por el país en estos vehículos a lo largo del año disponen de una nueva estación de servicio en Ejulve. En su apuesta por acometer “pequeñas actuaciones” para abrirse al turismo, el Ayuntamiento ha invertido 11.000 euros subvencionados por la Diputación de Teruel en el acondicionamiento de una explanada con capacidad para recibir hasta 200 autocaravanas si fuera necesario, un volumen que podría alcanzarse en la fiesta de inauguración que, como es costumbre, realizará la Plataforma Autocaravanas Autónoma (PACA). Para acceder a este espacio, ubicado en la parte baja del pueblo a pocos metros del río Guadalopillo, se ha habilitado una vía de acceso. En la explanada se ha instalado monolito con desagüe para verter aguas grises y negras, así como una fuente para rellenar agua y una pila para lavar ropa y utensilios de cocina. También hay una manguera para limpiar los vehículos. Próximamente se instalarán contenedores y habrá wifi abierto. La intención del Ayuntamiento es redactar una ordenanza que regule el servicio. Podrían cobrarse 5 euros por estancia, aunque “todavía está por aprobar”, explicó el alcalde, Ovidio Ortín. En las entradas al pueblo desde Villarluengo, Aliaga y la Venta de la Pintada se instalarán señales orientativas. Consumen donde paran El objetivo del Consistorio es captar un nuevo nicho de turistas, cada vez más numeroso, que suele pasar al menos un día en los lugares donde existe un área de servicio. El delegado de la PACA en Aragón, Ricardo Martínez, celebró la iniciativa, que se suma a la de otras localidades como Valderrobres, Calaceite, Andorra, Albalate del Arzobispo, Cantavieja, Pancrudo o Monteagudo. “Viajamos durante todo el año. Los cámpines abren en verano y cierran en invierno, por lo que si sabemos de un área de servicio, allá que vamos. Normalmente consumimos 150 litros por cada tres días y tenemos que ir recargando”, explicó Martínez. Contrariamente a lo que se pueda pensar, este perfil de turistas realiza un consumo importante en los sitios por donde pasa. No siempre comen en la autocaravana y, cuando lo hacen, necesitan comprar constantemente allá por donde pasan. Precisamente por ello, “están haciendo estacones de servicio privadas porque ven que es una fuente de ingresos”, explicó el delegado. La PACA calcula que en Aragón hay más de mil autocaravanistas, si bien no todos están asociados. En España la cifra crece hasta los 55.000 y es constante el tráfico que llega al país procedente de Europa. La estación para autocaravanas se suma a las últimas inversiones en materia de turismo que ha realizado el Ayuntamiento de Ejulve, entre las que destacan los accesos a la Cueva del Recuenco para la práctica de espeleología. En dos meses han pasado 200 personas por allí, aunque el objetivo es que pernocten y consuman en el pueblo. Para ello, el Ayuntamiento impulsará la creación de paquetes turísticos. Ortín: “Las parcelas para urbanizar no se han tocado” Los terrenos sobre los que se ha habilitado el aparcamiento para autocaravanas pertenecen a la zona verde de la urbanización realizada hace dos años por el Ayuntamiento para proveer de parcelas económicas a quienes quisieran construir allí sus casas. “El terreno de la estación de autocaravanas aprovecha la parte baja de esta urbanización, que era inútil” porque “ahí no se puede construir” por ser zona inundable, aseguró Ortín. “Las parcelas para urbanizar no se han tocado”, recalcó el alcalde. La urbanización y la compra de terrenos costaron 120.000 euros y dos años después todavía no se ha iniciado ninguna construcción, aunque en otros puntos del pueblo sí se están levantando viviendas, la mayoría encaminadas a segunda residencia. La explicación, según el regidor, es que “el plan de urbanismo todavía no está terminado” y aún no se pueden levantar edificios allí. Una red Wifi con 5 puntos dará servicio al municipio El Ayuntamiento de Ejulve ultima la instalación de una red Wifi pública con cinco puntos repartidos por todo el pueblo, ubicados en la estación de autocaravanas, la báscula, las escuelas, el centro de interpretación y la biblioteca. Los lugares elegidos se corresponden con puntos de luz que el Consistorio tiene repartidos por el casco urbano. “Mucha gente, sobretodo veraneantes, no tiene Internet en sus casas y de esta forma tendrán una red Wifi operativa”, puso en valor el alcalde de la localidad. Para habilitarla, el Ayuntamiento ha invertido 7.000 euros procedentes de subvenciones que el Gobierno de Aragón, a través de fondos europeos, destina a entidades locales que tienen parte de su territorio en Espacios Naturales Protegidos. El Consistorio pagará unos 400 euros anuales por el servicio. En un principio, el Ayuntamiento ofrecerá 25 gigavatios al mes, por lo que se pide hacer un uso responsable con pequeños tráficos de datos. Se estudiará incrementar la capacidad, aunque en ese caso el precio también es previsible que aumente.