Panel con tratamiento digital en el Corral de las Gascas
Desde que el notario de Valdealgorfa Carlos Estevan descubriera en 1913 las pinturas de arte rupestre levantino de Val del Charco del agua amarga de Alcañiz nadie más, hasta ahora, se había topado con ningún otro vestigio prehistórico pintado en la roca en Alcañiz. Han tenido que pasar 103 años desde que Estevan se topara con esos frisos con más de 150 figuras pintadas hace más de 7.000 años, para que otro hombre curioso, Jesús Carlos Villanueva, descubriera tres abrigos de pinturas rupestres en este término municipal, dos de ellos de arte levantino y uno de arte esquemático. Los paneles esquemáticos son, además, toda una novedad para la investigación prehistórica bajoaragonesa, pues se trata del primer hallazgo de este tipo de pintura (más tardía en el tiempo) en el Bajo Aragón.