El grupo parlamentario de Podemos en las Cortes de Aragón aseguró ayer que si en 2017 no se ejecutan los 11 millones de euros previstos en el programa plurianual para la construcción del nuevo hospital de Alcañiz no será por un problema de plazos administrativos, sino por “falta de voluntad política” del consejero de Sanidad, Sebastián Celaya.
La diputada Marta Prades salió ayer al paso de las palabras del consejero, que el pasado viernes en el pleno de las Cortes se escudaban, según ella, en los plazos administrativos “para justificar el incumplimiento” en la ejecución de esta infraestructura sanitaria, denunció Podemos.
Prades señaló, a través de una nota de prensa, que “los continuos incumplimientos y retrasos de los plazos que hemos ido viendo a lo largo de esta legislatura han sido la tónica general del consejero de Sanidad, que probablemente esté más preocupado de reducir el gasto ante Gimeno (consejero de Hacienda) y Montoro (ministro de Hacienda) que de cumplir sus compromisos con los bajoaragoneses”.
Celaya dijo el viernes que la tramitación administrativa del nuevo hospital, actualmente paralizada en el paso previo a la adjudicación de las obras mientras no se aprueben los presupuestos de Aragón de 2017, impedirá que este año se puedan ejecutar en su totalidad los 11 millones de euros.
Celaya se comprometió a “poner el máximo interés porque las obras comiencen cuando la legalidad y los plazos administrativos lo permitan”, aunque evitó dar nuevas fechas ante los constantes incumplimientos que acumula el hospital.
El PSOE, antes de llegar al Gobierno de Aragón, anunció en campaña electoral que el centro sanitario estaría en marcha en 2019. Se canceló el modelo de construcción público-privado, se modificó el proyecto, se dejó de ejecutar una partida de 3 millones de euros para el inicio de las obras en 2016 y este 2017 ya se asume que tampoco se cumplirá con los presupuestado.
“Si hubieran tenido la voluntad política de construir esta infraestructura habrían ejecutado los 3 millones presupuestados en 2016. Lamentablemente, el señor Gimeno estaba más interesado en cumplir el objetivo de déficit que en cumplir con los aragoneses”, insistió Prades.
Asimismo, Podemos advirtió de que la UTE OHL-Dragados, la mejor valorada en el proceso de licitación, presentó una oferta “que roza la baja temeraria”.
Además, “según las últimas informaciones”, OHL “aparece presuntamente relacionada con la trama de financiación irregular del PP”, advirtió Prades en referencia a la "Operación Lezo", en la que se investiga al dueño de OHL, Juan Miguel Villar Mir.
“Es la segunda vez que el Gobierno de Aragón selecciona la oferta económica de OHL para el hospital de Alcañiz”, recuerda Podemos. La primera fue hace dos años, con el anterior Ejecutivo PP-PAR en el Gobierno que se quedó a las puertas de la adjudicación del contrato mediante la fórmula público-privada.
