Miles de personas secundaron ayer el Desfile por el Día del Orgullo Gay que tuvo lugar en Teruel. Convocada por la asociación turolense Lavanda de apoyo al colectivo LGTBI (lesbianas, gays, transexuales, bisexuales y otras sexualidades no heternonormativas) anticipó el ambiente festivo que se barrunta en los días previos a la Vaquilla con música, baile y numeroso público.
Las más de doscientas personas que formaban el Desfile pertenecían a Lavanda y a otras agrupaciones como Visión Trans de Zaragoza, la asociación de peluquerías de Teruel, el Club Rugby Teruel, la asociación de Dominicanos, Cepaim, la Protectora de Animales Amigo Mío o Liberanimo, la Asociación de Esperantistas turolenses que unieron su bandera verdiblanca al arco iris que dominó durante la tarde de ayer. Así en la tierra como en el cielo, pues el sol que salió poco después de que la tarde amenazara tormenta regaló un espectacular arco iris sobre los Viaductos.
Miembros de Lavanda abrían la comitiva con una pancarta que rezaba:?“Teruel, capital del amor diverso”, tras los que marchaban cuatro carrozas y varios grupos de personas con pancartas. Dos batukadas les acompañaban para animar todavía más el ambiente;?Burumbaia que marchaba detrás de la cabecera del desfile y la Batukada de Ojos Negros, que lo cerraba.
Éxito de convocatoria
Entre el numerosísimo público que se concentró en diferentes puntos del recorrido, especialmente en la Ronda, la Glorieta o el Óvalo, había personas de todas las edades y condiciones. Y entre ellos había un comentario recurrente. “Aquí hay muchísima más gente de lo que yo pensaba... para ser Teruel”. Habría quien se referiría a la escasa población de la capital y quien se referiría a otras consideraciones, pero el hecho es que la propia organización se sorprendió por el éxito de la convocatoria. “Creo que ha sido un gran éxito. No imaginábamos que iba a venir tanta gente con nosotros”, comentó Juancho Alpuente, presidente de Lavanda.
El gran poder de convocatoria tiene todavía más mérito dado que era la primera vez que se convocaba un desfile por el Día del Orgullo Gay en Teruel. En años anteriores se habían convocado concentraciones, con una asistencia de público más bien exigua.
La cabalgata, que comenzó con media hora larga de retraso desde Los Arcos, subió por la Ronda hasta la Glorieta. A un ritmo quizá excesivamente lento, para dar tiempo a los espectadores a disfrutar de las batukadas, la comitiva bajó hasta el Óvalo y de ahí subió por la calle Nueva hasta la plaza de San Juan, donde la organización tenía previsto leer un manifiesto.
Allí Juancho Alpuente exortó a los turolenses a no ocultarse ni tener miedo por causa de su orientación sexual “o por querer a quien uno quiere”. Expresó su deseo de que las cosas cambien a ese respecto, y aseguró que “nos hemos esforzado mucho por no ofender a nadie. Somos conscientes de la realidad que se vive en Teruel, que no es lo mismo que en Madrid”.