Los rayos están detrás de casi la mitad de los incendios forestales de la provincia de Teruel
El principal enemigo de los bosques de Teruel son los rayos que están detrás del 44 por ciento de los incendios forestales, un fenómeno que se escapa al control del hombre y contra el que solo se puede luchar concentrando equipos humanos que aumenten la capacidad de respuesta. La cifra se desprende de las estadísticas de los últimos quince años y contrasta con los datos de Aragón y de España, ya que en el conjunto de la Comunidad Autónoma los incendios por rayos suponen el 23 por ciento y en toda España solo el 4 por ciento.
Los datos sirven para configurar un operativo con un elevado número de medios aéreos, un mayor número de cuadrillas en zonas boscosas y una extensa red de torres de vigilancia, ochenta en Aragón y casi la mitad de ellas en Teruel
El estudio estadístico de los fuegos que se producen en nuestros bosques es uno de los trabajos fundamentales que tienen que desarrollar los responsables de la dirección y extinción de incendios forestales del Gobierno de Aragón, porque es lo que les sirve para mejorar el operativo con el que enfrentarse a estas emergencias
Por ello, la Dirección General de Gestión Forestal ha financiado en los últimos años estos estudios, con la colaboración de la Agencia Estatal de Meteorología, para desgranar los cuántos, cuándo, dónde y cómo de los incendios forestales de Aragón.
De ese estudio pormenorizado salen cifras tan llamativas como que en los últimos quince años, desde 2001 hasta 2015, el 23 por ciento de los incendios forestales de Aragón estaban causados por rayos, un total de 1.444, con una media de 96 al año, según explica el jefe de servicio de Gestión y Extinción de Incendios Forestales del Gobierno de Aragón, Carlos Cacho
Si ponemos el foco específicamente en la provincia de Teruel, esa misma serie de datos refleja que hubo 815 incendios por rayo, es decir, que más de la mitad del número de ese periodo de Aragón corresponde a la provincia de Teruel, una media de 54 incendios anuales
Y en cuanto a dimensiones de los fuegos, los datos también indican que el 70 por ciento de los grandes incendios forestales -de más de 500 hectáreas de superficie forestal quemada-, de causa conocida, están provocados por rayos en la provincia de Teruel. Un ejemplo claro es el incendio de Aliaga y Ejulve del año 2009 que arrasó más de 7.000 hectáreas y que comenzó con multitud de focos por rayos tras el paso de una tormenta eléctrica
Afinando un poco más y mirando solo los meses estivales de junio a septiembre, cuando están prohibidas las quemas agrícolas que se autorizan en febrero y marzo y en mayo, el porcentaje de incendios con origen en rayo en Teruel se dispara hasta superar el 80 o el 85 por ciento, añade el responsable del Ejecutivo aragonés
"Rayos durmientes"
Las tormentas con abundante aparato eléctrico, que nos sorprenden en esta provincia prácticamente todos los veranos, son el preludio de jornadas de intenso trabajo para los efectivos del Gobierno de Aragón que luchan contra el fuego. Y no solo la jornada de la tormenta. Aunque el 67 por ciento de los incendios forestales por rayo se originan el mismo día, el otro 33 por ciento -uno de cada tres- prende en los días siguientes, con límite el tercer día, rara vez más allá del cuarto o quinto, pero también ocurre. Son lo que se denominan popularmente como "rayos durmientes" recuerda Cacho, porque "el rayo no genera el incendio en la parte que vemos sino por debajo del suelo". Y es que la descarga eléctrica empieza a quemar materia orgánica, a veces debajo del suelo, en las raíces, y a los días, con el calor del ambiente o si levanta el aire, la combustión cobra fuerza
¿Por qué en Teruel?
Las zonas de Aragón en las que se producen más incendios por rayo están asociadas a los principales sistemas montañosos, donde las tormentas (secas o húmedas) son más habituales, explica Cacho. Según un articulo publicado por Cristina Lafragüeta, realizado sobre los datos de la Dirección General de Gestión Forestal, el Sistema Ibérico oriental es el territorio más afectado por este fenómeno en términos de extensión y densidad, seguido del Prepirineo y la parte alta de las cuencas del Jalón y del Jiloca. Gúdar, Maestrazgo, Matarraña y la zona del prepirineo zaragozano y oscense (Altas Cinco illas, Sierra Caballera y Guarguera) son las de mayor ocurrencia en rayos
Pero Cacho llama la atención sobre el hecho de que la mayor frecuencia de descargas eléctricas "no siempre lleva asociada una mayor ocurrencia de incendios por rayo, como sucede, entre otros lugares, en la parte alta de las cuencas del Jalón y del Jiloca". Por ejemplo, en la provincia de Teruel caen más rayos en el Matarraña que en otras zonas como la Sierra de Gúdar, donde se producen más incendios por rayo. Así, "un rayo aislado tiene más probabilidad de causar un incendio en las sierras de Gúdar y Albarracín que en el Matarraña", apunta el experto
Esto tiene que ver con factores como la combinación de la vegetación o la continuidad del combustible
Y también si se dan circunstancias que favorecen que se originen fuegos y se propaguen, como las tormentas secas con viento del suroeste, que es más seco y tiene más influencia en Teruel. O las denominadas oclusiones, que son lo que se conoce como la gota fría, y son peligrosas en Aragón cuando hay una borrasca que pasa por el sur de España y se queda en el Mediterráneo, por lo que acaba afectando a las comarcas turolenses más cercanas a la Comunidad Valenciana
Los datos extraídos del estudio de las estadísticas en lo que va de siglo son llamativos pero sobre todo útiles para conformar un operativo que tiene que adaptarse a las circunstancias del terreno. Por ejemplo, obliga a concentrar más cuadrillas en zonas como la Sierra de Gúdar o la Sierra de Albarracín porque hay mucha masa forestal y un alto riesgo, explica Cacho. "Hay una necesidad de acudir más rápido, porque además se da la circunstancia de que hay muchas veces varios incendios simultáneos tras el paso de una tormenta eléctrica"
También la mayor prevalencia de rayos entre las causas hace que el operativo en Aragón cuente con un importante número de helicópteros de extinción, ocho, mas un noveno para coordinación. "Es un número elevado para una superficie como la de Aragón pero hay que asegurar un tiempo de llegada muy rápido", recalca este experto, y de este modo conseguir que buena parte de los fuegos que se originan terminen siendo conatos. Y ese es el mayor triunfo ante el fuego
Índices de alerta
Desde el año 2011, el Gobierno de Aragón avisa de manera diaria del nivel de riesgo de incendios forestales que sufre cada zona de Aragón. Lo hace en cumplimiento del Decreto 118/2011, de 31 de mayo, del Gobierno de Aragón, por el que se aprueba el Plan Especial de Protección Civil de Emergencias por Incendios Forestales (PROCINFO)
Estas alertas se establecen analizando el estado de la vegetación, la situación meteorológica, así como las posibles incidencias que pueden haberse producido durante los días previos. Una vez estudiados estos factores se obtiene el nivel de prealerta de incendios para cada una de las zonas forestales de Aragón
En total hay veinticinco y se explican en un mapa con la división comarcal de Aragón. Las prealertas pueden variar entre cuatro valores distintos, dependiendo del riesgo previsto: amarilla, naranja, roja y roja plus, de menor a mayor respectivamente
El Ejecutivo informa diariamente de estos niveles de alerta, para que toda la población conozca la situación en la que se encuentran nuestros bosques, ya que las autoridades insisten en que esas situaciones deben condicionar también nuestra actuación en la naturaleza. Instituciones y particulares pueden suscribirse de manera gratuita a los boletines electrónicos diarios, dándose de alta en el sistema a través de la página web del Gobierno de Aragón
Autor:Elisa Alegre Teruel Elisa Alegre / Teruel