Las vías turolenses se cobran catorce vidas en 2015, seis de ellas de motoristas
Las carreteras de la provincia de Teruel se han cobrado a lo largo de 2015 catorce vidas, una más que en 2014, aunque lo que más llama la atención es que han muerto un total de seis motoristas, según el informe facilitado por al Jefatura Provincial de Tráfico de Teruel. La cifra de siniestralidad, aunque es ligeramente superior, se mantiene con respecto a la registrada en años anteriores, salvo en 2013, cuando perdieron la vida cuatro personas.
Entre los accidentes más graves que se registraron a lo largo del pasado año está el que ocurrió en agosto en la N-232 a la altura de Híjar entre un coche y un camión, en el que perdieron la vida dos ancianos, y el que tuvo lugar en diciembre en la A-23 en Sarrión, una colisión múltiple entre tres camiones que se saldó con dos víctimas mortales.
Sin embargo, la cifra más llamativa de todas las que arroja el año que concluyó hace unos días es el elevado número de motoristas muertos, seis, lo que supone un 43% del total de víctimas. Entre esos siniestros mortales destaca el que tuvo lugar en la N-234 a su paso por la localidad de Luco del Jiloca en el que el accidente se produjo tras el atropello de un jabalí que irrumpió en la calzada.
El jefe provincial de Tráfico, Federico García Buj comentó que este elevado número de motoristas muertos es "atípico" en Teruel. Recordó que dos de los accidentes mortales, uno de ellos en Torre de Arcas y otro en Cretas, están vinculados al campeonato de MotoGP en Motorland que se celebraba esos días en Alcañiz.
Otro de los colectivos más vulnerables, según los datos que se desprenden del informe de Tráfico, son los mayores de 65 años. En este sentido, cuatro de las 14 vícitmas mortales eran jubilados.
Menos siniestros
Por otro lado, García Buj recordó que en 2014 hubo un 25% más de accidentes que en 2015, aunque el pasado año se produjo uno más de carácter mortal y también se incrementó sensiblemente el número de muertos de 13 a 14- Así, en 2014 tuvieron lugar un total de 195 accidentes accidentes de los que once fueron mortales y se saldaron con 13 fallecidos.
El pasado año 2015 hubo 148 siniestros, doce de ellos mortales y 14 fallecidos. En 2015 el número de heridos hospitalizados fue de 47 frente a los 54 de 2014 mientras que los heridos de carácter leve fueron 144 (229 en 2014).
Uno de los aspectos que llama la atención del informe facilitado por Tráfico en Teruel, como resaltó Federico García Buj, es el elevado número de atropellos a peatones -un total de 19– que arrojan un balance de dos fallecidos. El primero de los atropellos mortales tuvo lugar en la travesía de la N-211 a su paso por Alcorisa el día 1 de junio, mientras que el segundo ocurrió en Samper de Calanda el pasado día 6 de diciembre.
El máximo responsable de Tráfico en la provincia apuntó que este año tampoco ha habido tramos con acumulación de accidentes (puntos negros) y señaló que la distribución de los siniestros ha sido "diseminada por toda la provincia". No obstante, precisó que en la Nacional 232 sí han tenido lugar tres accidentes mortales que han arrojado un resultado de cuatro muertos uno de ellos ocurrió en Híjar, otro en Cretas y el tercero en Torre de Arcas-.
El 40% de los accidentes un total de 60 se han producido en carreteras de la red nacional y la mayor parte de ellos han tenido lugar en la A-23 (18) y en la N-232 (17 siniestros). En la red autonómica han tenido lugar 42 sucesos de tráfico y en la red provincial un total de siete, aunque no ha habido ninguna vícitma mortal en estos últimos.
Por meses, en los que más siniestralidad se ha registrado han sido sin duda noviembre y diciembre, en los que han fallecido siete personas, la mitad de todas las que perdieron la vida en el conjunto del año. "Los últimos meses de 2015 han sido especialmente graves, acumulan la mitad de los accidente mortales y la mitad de las víctimas", concretó García Buj.
Siete de los doce accidentes mortales tuvieron lugar por salida de la vía y se saldaron con dos vícitmas mortales. Uno de ellos -el ocurrido en la A-23 con tres camiones implicados fue por colisión múltiple y en él perdieron la vida dos personas. Otro fue por colisión frontal y otro por atropello de un animal. A ellos hay que sumar los ya mencionados atropellos de peatones en las travesías de Alcorisa y Samper de Calanda. En cuanto al tipo de vehículos implicados, seis eran motos, cinco camiones, tres turismos, dos furgonetas y uno maquinaria agrícola.
Autor:M. Cruz Aguilar Teruel