La Diputación de Teruel presentó ayer el Plan de Emergencias 2016, cuyo objetivo es financiar la reparación de las bombas de abastecimiento de agua y de los edificios municipales dañados por desastres naturales, como fenómenos meteorológicos adversos. La institución provincial cuenta para ello con una partida de 100.000 euros, que podrá ser ampliada en caso necesario.
El vicepresidente primero de la Diputación y responsable de Planes Provinciales, presentó ayer junto al diputado delegado del área de Desarrollo Territorial, Francisco Narro, el Plan de Emergencias 2016, que fue aprobado en el último pleno, y al que podrán recurrir todos los ayuntamientos. El objetivo del mismo, según Marquesán, "es resolver lo más rápidamente posible los problemas extraordinarios que tienen los pueblos por cuestiones meteorológicas y para los que necesitan el apoyo de otras instituciones porque no tienen capacidad económica para poder afrontar su reparación en solitario".
Marquesán añadió que "la Diputación de Teruel es la institución que más rápido llega a atender las emergencias de los pequeños municipios", argumento que consideró "irrefutable" para asegurar que "la desaparición de estas administraciones sería un golpe muy duro para las localidades de menor tamaño, que se quedarían sin el apoyo directo que actualmente les prestamos".
El plan de 2016 mantiene la misma dotación presupuestaria del año pasado, 100.000 euros, que podría ser ampliada si se produjeran un gran número de afecciones por cuestiones meteorológicas.
Esta partida tiene como objeto cofinanciar actuaciones de reparación o sustitución de infraestructuras municipales dañadas directamente por desastres naturales, imprevisibles e inevitables.
En lo que concierne a los daños eléctricos en los sistemas de bombeo –la novedad de esta convocatoria–, se deberá acreditar que cumple el reglamento de instalaciones de baja tensión mediante un certificado emitido por un organismo de control. Mientras, en los desperfectos en los edificios, se deberá atestiguar la titularidad municipal y su uso para la prestación de servicios públicos.
Las solicitudes deberán ser presentadas por vía telemática en el plazo máximo de un mes desde que se produce la situación de emergencia, a excepción de las ocurridas desde el 1 de enero hasta la publicación de las bases en el Boletín Oficial de la Provincia. La fecha límite para formalizarlas será el 2 de noviembre, por lo que las incidencias ocurridas con posterioridad irán a cargo del Plan de 2017
Para la concesión de las ayudas, se tendrán en cuenta criterios como el orden de presentación de las solicitudes, que se trate de una infraestructura básica o de servicio municipal obligatorio, que no se destine a uso privado, que se ubique en el casco urbano y que el daño sea sobrevenido y no como consecuencia del paso del tiempo. Además, en el caso de daños por viento, este deberá ser superior a 90 kilómetros por hora.
Una comisión de valoración con representación de todos los grupos será la encargada de valorar las solicitudes de acuerdo a los informes del gabinete geológico de la propia Diputación. Posteriormente, serán aprobadas por la junta de Gobierno, y el plazo para su resolución será de tres meses.
Las subvenciones serán compatibles con la financiación procedente de otros planes o de otras administraciones o entidades, pero en ningún caso el importe total abonado podrá superar el coste de la actuación.
Actuaciones en 2015
La Diputación de Teruel recibió el año pasado 52 solicitudes de ayuda con cargo al Plan de Emergencias, de las que fueron aceptadas 26, que conllevaron un gasto final de 212.000 euros. Torre del Compte fue la localidad que más dinero recibió, más de 40.000 euros, para hacer frente a los daños ocasionados por la tormenta de granizo ocurrida el 30 de agosto.
El elevado número de inclemencias meteorológicas que sufrió la provincia en 2015 hizo que la Diputación tuviera que suplementar los 100.000 euros del Plan de Emergencias hasta los 212.374,34 euros, además de invertir los 500.000 del plan de reparación de caminos rurales, según el vicepresidente segundo, Luis Carlos Marquesán.
La institución provincial admitió 26 solicitudes, de las que 15 correspondieron a reparación de muros, 6 a redes de munistro de agua, 4 a edificios municipales y una a cementerios.
La localidad que recibió la mayor partida fue Torre del Compte, con 40.882 euros, seguida de La Fresneda, con 8.000. Ambas sufrieron cuantiosos daños por la granizada ocurrida el 30 de agosto.
Autor:Alicia Royo / Teruel