La DGA niega que el retraso en la activación de la planta de purines de Peñarroya sea por su culpa
El Ayuntamiento de Peñarroya de Tastavins envió en diciembre del año pasado la solicitud de licencia de actividad para la planta de tratamiento de purín cuya gestión adjudicó en mayo a la empresa Saionaimer Tastavins S.L. El Gobierno de Aragón rechazó ayer cualquier responsabilidad en el retraso que acumula la puesta en marcha de la planta de cogeneración, al tiempo que negó que éste obedezca a los tiempos que tarda el Instituto Aragonés de Gestión Ambiental (Inaga) en realizar la tramitación.
El delegado territorial del Gobierno de Aragón en Teruel, Antonio Arrufat, defendió la gestión del Ejecutivo e informó de que hace sólo mes y medio que llegó la documentación para actualizar los permisos de la planta de cogeneración de estiércoles, que había tenido licencia de actividad hasta el año 2008.
El Ayuntamiento envió un documento el 19 de diciembre pasado dirigido al servicio provincial de Agricultura, Ganadería y Medio Ambiente en el que solicitaba información sobre el estado de las licencias de actividad concedidas en los años 2007-2008 para la planta de tratamiento de purines y en 2009 y 2010 para la planta de biogestión (de la que es propietaria el Instituto Aragonés del Agua). Adjunto a la solicitud, incorporó la memoria técnica presentada por la empresa concesionaria para reactivar la planta de cogeneración con el objetivo de transformar el purín en fertilizante orgánico y ecológico. Según el delegado del Gobierno de Aragón en Teruel, el Ayuntamiento tardó meses en enviar la documentación, por lo que “no es achacable al Inaga el retraso en la puesta en marcha de la planta”, declaró.
Según Arrufat, en una visita el uno de septiembre del consejero de Desarrollo Rural y Sostenibilidad, Joaquín Olona, a la Comarca del Matarraña para conocer el proyecto de tratamiento de purín que pretendía poner en marcha el Ayuntamiento ya se comunicó al Ayuntamiento que necesitarían una licencia de actividad nueva. Fue el uno de septiembre cuando “se acordó con el Ayuntamiento que presentaría la solicitud de una licencia nueva, pero ésta no llegó hasta el mes de diciembre”.?En ese sentido, puntualizó que “hace sólo mes y medio que la documentación entró en el Inaga, no más”. Es por ello que defendió la gestión realizada por el Ejecutivo aragonés. “Si la planta no se ha puesto en marcha hasta la fecha no es como consecuencia de la lentitud en la tramitación en el Inaga, porque, además, estamos encima de ese asunto, porque tenemos interés en que se ponga en marcha el proyecto, pero el Inaga tiene sus plazos”, precisó.
Por otro lado, recordó que en las últimas semanas ha mantenido reuniones “con el ayuntamiento y con los empresarios que están detrás del proyecto”, una iniciativa que Arrufat calificó de “fundamental para el territorio” pues “por un lado creará puestos de trabajo en la zona y por otro supone una buena alternativa para acabar con uno de los problemas más graves que tenemos desde el punto de vista ambiental” (la contaminación por purín). A todo ésto añadió que “esperamos tener pronto noticias sobre las licencias y que de la misma manera se le de el visto bueno definitivo”.