La banda de inicio, a su salida de la iglesia
La banda de tambores de inicio reactiva la cabecera de la procesión del Nazareno de Alcañiz
Alrededor de 1.200 personas desfilaron este miércoles por la parte baja de Alcañiz en la procesión del Nazareno, que este año incorporó a una banda de tambores de inicio para que la parte delantera no perdiera el paso.
“De unos años a esta parte hemos experimentado que la procesión se hacía tan larga que los extremos -la cola y la cabeza- quedaban sin el sonido del toque de los tambores, por lo que hemos incorporado a nueve personas a la banda de inicio”, explicó el presidente de la hermandad, Antonio Navarro.
Estos tamborileros no se ganaron en detrimento de la banda clásica, sino que “decidimos abrir la lista que teníamos y tiramos de ella, sacando a nueve personas que voluntariamente aceptaron ir de avanzadilla”, añadió el responsable de una de las procesiones más vistosas de la Semana Santa de la Ruta del Tambor y Bombo. La hermandad cuenta desde ayer con 49 tambores, por lo que los ensayos han sido multitudinarios. Este año se han celebrado en el aparcamiento del Simply, ya que el Ayuntamiento no permitió seguir ensayando en el campo de fútbol porque la nueva pista de atletismo homologada lo desaconsejaba-
La banda de inicio se situó entre los faroles y la Cruz Morada. Para el Nazareno, que los timbales acompañaran a la cabecera de la procesión era una necesidad que se ha convertido en un reto. Si funciona, la medida podría extenderse a la cola de la procesión, que este año presenta otra novedad en forma de nuevas capas, más engalanadas, para la junta y los hermanos mayores.
Alta participación
La noche, primaveral, acompañó y el desfile se celebró con éxito de participación. Las calles de la parte baja se tiñeron de azul, blanco y rojo para celebrar un Miércoles Santo más el desfile del Nazareno, que llama la atención por los centenares de hermanos que se sitúan en los extremos portando velas. Por el interior circulan unas 300 personas entre pasos, banda, romanos, personal de la junta, faroles o estandartes.
El sentido del desfile era representar la Pasión de Cristo. Salieron la Cruz Guión, la Cruz Morada, Jesús Atado a la Columna, el Nazareno y la Verónica. Recorrieron las calles Mayor, Salinas, Teniente Moore, Las Monjas, Muro de Santa María, de nuevo Mayor, Alejandre, Mendizábal, Blasco y Subida del Teatro.
Tras completar el recorrido, la banda se situó en la plaza de España formando escuadra bajo la casa parroquial (tambores) y sobre las escaleras de la casa consistorial (cornetas) para esperar al Nazareno y verlo entrar en la iglesia. Es el cuarto año que se realiza así por motivos de organización, aunque dada la belleza de la puesta en escena va camino de consolidarse.
Miguel Perdiguer, hermano mayor de Honor
La procesión comenzó a las 22:30 horas, después del juramento de los nuevos cofrades que en este caso eran 52. La hermandad ha incorporado a 191 integrantes en los últimos cinco años, por lo que el relevo generacional está asegurado.
Los nuevos hermanos se comprometieron a participar en el desfile procesional al que, según las normas de la cofradía, tienen el derecho y la obligación de concurrir haciendo gala de su dignidad y recogimiento y guardando orden y silencio.
Acto seguido el hermano mayor de honor, Miguel Perdiguer Aguilar, hizo su ofrenda. Sobran las presentaciones para este médico retirado que apunta a cumplir cien años de vida en 2018. El hermano mayor de turno es este año Luis Ballester Saura, que fue teniente de alcalde en el Ayuntamiento de Alcañiz y diputado por Teruel en las Cortes de Aragón.
A ambos pasó la junta a recoger por sus casas minutos antes de que comenzara una procesión que metió de lleno a la ciudad en su Semana Santa y que ayer ya empezó a recibir la primera oleada de turistas.