Imagen de unidad ante el Gobierno y la UE para encontrar financiación para las balsas del Matarraña
La reunión celebrada el martes en la sede del Sindicato Central de la cuenca del Matarraña, en Maella, entre el consejero de Presidencia de Aragón Vicente Guillén y los representantes de la organización de regantes sirvió para sopesar la opinión de éstos y comprobar su disposición a respaldar la propuesta del Ejecutivo con respecto a la regulación de la cuenca. Ese mensaje de unidad y de “acuerdo sustancial” se lo “transmitiremos al Gobierno en la reunión de la Comisión Bilateral” indicó el consejero de Presidencia, Vicente Guillén, al término del encuentro.
Esa imagen de consenso también servirá para cuando los proyectos de regulación de la cuenca se presenten en las instituciones europeas, de donde se intentará obtener la financiación necesaria, según dejó entrever el número dos del Gobierno.
El primer paso para evidenciar que la “unidad de cuenca” se mantiene desde 1999 (Acuerdos de Fabara) y sobre todo desde 2005 (fecha de la firma del Dictamen sobre el Matarraña) ha partido del propio Sindicato Central de Regantes, que ha enviado una invitación a la Comisión de Agricultura del Congreso de los Diputados para que conozca las cuencas del Matarraña, Tastavins y Algars y los proyectos de regulación previstos en el Dictamen del año 2005.
“Esta semana les habrá llegado la invitación”, explicó el presidente del Sindicato, José María Puyol, quien reconoció que esta propuesta de visitar el territorio pretende que “la imagen de unidad y sostenibilidad que verá la Comisión sea trasladado a la ministra de Agricultura” y que después España “presente una petición oficial a la Unión Europea para exponer este programa de actuaciones hídricas que afecta a 27 municipios de tres comunidades autónomas y que propugna el desarrollo sostenible de los tres ríos”, agregó Puyol.
Son tres autonomías porque están involucrados ayuntamientos de la provincia de Castellón, donde nacen las aguas del río Tastavins, mientras que las del Algars arrancan en tierras de Tarragona. Ambos afluentes desembocan en Aragón.
Financiación
En cuanto a la financiación, no es un asunto que preocupe a corto plazo, ya que los tiempos administrativos son largos. El consejero de Presidencia recordó, además, que las obras hidráulicas son “competencia del Gobierno central” y que precisamente la Comisión Bilateral tiene un componente de cooperación entre las dos administraciones: “Aragón colabora avanzando los estudios”, precisó a preguntas de los periodistas. En cualquier caso, para las obras de la cuenca del Matarraña “se puede conseguir financiación de la Unión Europea”, pero “debemos hacer muy bien las cosas para presentar los acuerdos de acuerdo con la política del agua de la Unión Europea, con hechos bien fundamentados y consolidados, demostrando que queremos un crecimiento de nuestro territorio a través del agua y que sea sostenible”, apostilló.- -