El juez de Instrucción número 3 de Teruel ha dictado auto de prisión provisional para tres de los siete detenidos que en la tarde del pasado jueves pasaron a disposición judicial por su presunta implicación en delitos de tráfico de cocaína y comercialización, venta y distribución no autorizada de substancia ilegales y prohibidas en España.
Los cuatro detenidos restantes quedaron en libertad pero a disposición del juzgado como investigados por su posible implicación en los mismos delitos que los tres hombres que ingresaron en prisión.
Este grupo, formado por los siete detenidos, actuaba en Teruel y Cella dedicándose, al parecer, al tráfico de cocaína y a la venta de anabolizantes, esteroides, hormonas de crecimiento y sustancias dopantes. Junto a estas substancias, en el registro realizado por la policía judicial en una nave, se encontraron también más de once mil euros.
El juez ha decretado el secreto de actuaciones y la instrucción del caso sigue abierta, ya que se ampliará en una segunda fase.
En el marco de la operación Venice, agentes de la Policía Nacional llevaron a cabo la desarticulación de este grupo dedicado a la distribución de cocaína y sustancias dopantes, entre deportistas de la capital en el marco de la operación Venice.
Los siete detenidos son de nacionalidad española, cinco varones y dos mujeres. Además, la policía se incautó de 30 gramos de cocaína, 11.315 euros en efectivo, 1.500 productos dopantes, hormonas de crecimiento, nandrolona, clembuterol, anabolizantes, esteroides, comprimidos y soluciones en polvo, así como todo tipo de jeringuillas y ampollas inyectables. También se incautaron de útiles para el tráfico de drogas, varios terminales telefónicos y un vehículo.
Las pesquisas se iniciaron a principios del pasado mes de septiembre, cuando funcionarios adscritos a esta Comisaría Provincial tuvieron conocimiento de que un grupo organizado se estaría dedicando al tráfico de drogas, al menudeo en la ciudad de Teruel, y sobre todo a la venta ilícita de sustancias dopantes y medicamentos prohibidos. Estos eran distribuidos a personas dedicadas, sobre todo, a la especialidad del culturismo, a las cuales captaban en varios gimnasios de la capital turolense, y les suministraban los medicamentos prohibidos reseñados.
La finalidad de estas sustancias suele ser el aumento del rendimiento deportivo, masa muscular y otro tipo de mejoras físicas para optimizar el entrenamiento habitual, así como destacar en las competiciones en las que participaban. Los detenidos adquirían estas sustancias en Rusia, China, Italia y Portugal y las comercializaban ilícitamente en Teruel.
Este tipo de productos causan un grave daño a la salud, por lo que también se acusa a los detenidos como presuntos autores de un delito contra la salud pública, con el agravante de proporcionarlos a personas que podían participar en competiciones deportivas de cualquier nivel, además de un presunto delito de tráfico de drogas y pertenencia a grupo criminal.
Autor: Redacción Teruel