José Luis Caballero se ha dedicado durante más de 30 años al periodismo, a pesar de haber pasado por gran cantidad de revistas, diarios o radios su verdadera pasión es escribir. El ahora escritor vivió parte de su infancia en Teruel , provincia y tiempo que recuerda con mucho cariño, por eso hoy y mañana presentará una de sus novelas de espionaje, Nzere Congo, en Valderrobres
- ¿De qué trata su última novela?
- Mi última novela se llama Nzere Congo, es una palabra en idioma lingala, que es el idioma que se habla en el Congo, y quiere decir el río que se come a los demás ríos. Se trata de una novela de espionaje en la que he querido desarrollar una teoría sobre cómo apareció una enfermedad como el Sida en el Congo de los años 30 o 40
- Ha decidido presentar su última novela en Valderrobres, ¿ por qué decide presentarla en esta localidad?
- Desde hace algunos años he estado andando por aquí, he ido a la librería de Serret, para mi más que un librero es un amigo. Serret es el librero perfecto y además es una gran persona y me comentó que podría presentar aquí la novela, en el V festival de Matarranya negra de Valderrobres. Yo me dedico a escribir novelas de espionaje y suelo acudir a estos eventos de novela negra, un poco como artista invitado porque tampoco soy exactamente el modelo de escritor de novela negra, pero es algo que me gusta. Me gusta el pueblo, me gusta Serret, me gusta la librería y sobre todo la gente que acude cada año al acontecimiento. Yo viví parte de mi infancia en Teruel, es una ciudad a la que le tengo mucho cariño, tengo muchos recuerdos, a veces buenos y otras veces duros. Recuerdo mucho Teruel, es una ciudad a la que siempre he tenido mucho cariño
- Ha estado trabajando muchos años como periodista en distintas revistas, radios y diarios, ¿ cómo decide escribir novelas?
- Se dice que todos los periodistas tenemos una novela a medio escribir en el cajón. Desde hace muchos años yo me he dedicado a contar historias, empecé escribiendo cuentos cortos y luego continué con las novelas. Escribir es mi vida, me pongo delante del ordenador y cuento historias. Dejé el periodismo activo en 2008, la última revista en la que estuve trabajando fue la revista Lecturas. Y una vez lo dejé, empecé a escribir novelas, soy muy rápido escribiendo, tengo muchas cosas que contar. Desde 2008 llevo unos 12 o 14 libros publicados. Tenía muchas cosas escritas antes pero no las había editado, soy malo haciendo negocios así que las tenía en el cajón
- A la hora de escoger la temática de una novela, ¿ en qué se inspira?
- Siempre he creído que el mundo del espionaje es lo mejor que hay, es lo más interesante. La verdad siempre está en los subterráneos del poder, no es lo que dicen los periódicos o las televisiones. Me gusta mucho meter las narices por ahí, conozco a muchas personas que trabajan en esto y me apasionan este tipo de historias. Yo creo que una de las primeras novelas que leí fue El espía que surgió del frío de John Le Carré y desde entonces me he dedicado a eso. Casi siempre me muevo en el mundo del espionaje
-¿Por qué decide escribir sobre el Congo?
- Fue una casualidad, conocí a un hombre, al personaje central de la novela, un médico español que estaba trabajando en los años 60 en el antiguo Congo Belga. Lo conocí personalmente, murió hace ya un tiempo, era un hombre muy mayor cuando yo lo conocí. Este señor me pasó mucha información sobre el Congo, cómo funcionaba en aquella época, me explicó muchas cosas de su vida, me contó historias y con todo esto decidí utilizarlo como personaje central del libro. La historia que cuenta la novela no es su vida, pero gran parte de la información que esta contiene me la facilitó él. Me pareció fascinante, un hombre que se había pasado la mayor parte de su vida trabajando en el Congo merecía una novela
- ¿Qué le llevó a escribir Periodistas y Lacayos, ese ensayo donde ajusta cuentas con la profesión?
- Cuando dejé de trabajar en periodismo consideré que tenía que contar algunas cosas que tenía en mente. Me he considerado un periodista de raza, pero no puede uno pensar que es un ser perfecto, se hacen muchas barbaridades, hay que ir con cuidado
- Pasó parte de su infancia en Teruel, ¿ ha pensado alguna vez escribir sobre esta tierra que a veces parece estar un tanto olvidada?
- Si, lo he pensado muchas veces, de hecho en una de mis novelas que todavía no está publicada aparece Teruel, un poco de refilón, pero aparece
Autor:Sara Martínez Valero / Teruel