En el Cd Teruel, “La diferencia fue que el domingo las que tuvimos las metimos”

No se escucha otra cosa en el entorno del CD Teruel: “Ya tocaba”. El equipo se reencontró con la victoria y lo hizo a lo grande, endosándole una "manita" al Tamarite en casa, para el disfrute de los aficionados, que tantas ganas tenían de vivir una tarde como la del domingo. El técnico rojizo, Moisés Gutiérrez, superó la reválida de los dos partidos consecutivos en Pinilla con un empate y una paliza, y parece que las aguas vuelven a su cauce. Sobre si éste iba a ser el equipo que se va a poder ver a partir de ahora respondía con un prudente “eso intentamos”, pero lo cierto es que si se cumplen las previsiones de trabajo del míster, que ha apostado todo para llegar a este punto de la competición en el equipo en las mejores condiciones posibles, podríamos llegar a acostumbrarnos al nivel demostrado el domingo. “El equipo gustó mucho por el control del partido y las sensaciones que dio”, respondía orgulloso el entrenador, “más que del resultado”. En el balance en frío del equipo, Moisés insistió en el poderío físico demostrado por los suyos, “más que el del Tamarite”, en referencia velada a su calendario de carga de trabajo. “Para el final de temporada hay que tener chispa, tener descaro”, añadió. La victoria del pasado fin de semana le ha valido al Teruel para escalar un puesto y ponerse de nuevo a las puertas de la zona de honor de la tabla. Ha recortado posiciones y ahora se encuentra a tan solo dos puntos del subcampeonato, “que ahora mismo es nuestro objetivo”, reconocía Gutiérrez, quien recordaba que restan todavía ocho jornadas de liga (cuatro en casa y cuatro fuera) con enfrentamientos directos, por lo que concluía que “dependemos de nosotros mismos”. La principal diferencia del juego del Teruel de este domingo en referencia a la pasada jornada ha sido, a los ojos de su entrenador, que “las que hemos tenido las hemos metido y la semana pasada no las metimos”. Una diferencia que, aunque no es baladí, “no ha habido más”, explicaba el míster.  No obstante, Teruel sí fue un poco más agresivo el domingo, sobre todo en la presión arriba. Se reconcilia con la grada Moisés Gutiérrez no oculta la importancia que le da a la relación del equipo con la afición. “Ese es un tema muy importante para mí”, insistía ayer mientras volvía a recordar que la exigencia de la grada de Pinilla fue uno de los motivos que le animaron a dirigir al CD Teruel. “Yo se que el público de Pinilla es muy exigente y si yo he venido aquí es porque a mi me motiva muchísimo eso”, insistía, para añadir que “es un publico frío y exigente, pero es un público inteligente a que sabe que en estos ocho partidos nos lo jugamos todo, porque hemos hecho una temporada mejor o peor, pero que nos permite en estos últimos ocho partidos pelear por todo” y aprovechaba para reclamar el apoyo del público. “Hay que estay, gel público va a estar”, vaticinó. “Ahora es el momento en el que hay que estar, y es el momento en el que nosotros vamos a estar bien y en el que nos jugamos las cosas de verdad y si queremos dar un paso adelante y llegar lejos, tenemos que ir de la mano. Si no es muy complicado”, resumió. Mientras, la enfermería rojiza no termina de desatascarse. Con José Durán participando en los entrenamientos y ultimando su vuelta al trabajo, el delantero Diego Gómez sigue pendiente del alta.