El incendio que esta semana ha quemado alrededor de 60 hectáreas de superficie - entre pinar, campos de cereal y monte bajo- en el término municipal de Samper de Calanda, en la comarca del Bajo Martín, ha quedado ya controlado, según informó ayer el Gobierno de Aragón.
La lluvia que comenzó a caer a última hora de la tarde del martes ayudó a controlar el fuego a los medios terrestres y aéreos que trabajaban en la extinción del incendio, que se desató el lunes por la noche como consecuencia del paso de una tormenta seca que llevaba un gran aparato eléctrico. Ese mismo fenómeno fue el que desató cuatro focos de fuego en el Bajo Aragón, dos de ellos en Samper de Calanda, uno en Valdealgorfa y otro en la localidad zaragozana de Maella.
Todos los incendios fueron controlados y extinguidos en pocas horas (por la mañana del martes), salvo uno de los focos de Samper de Calanda, cuya extinción se complicó debido a varios factores: lo escarpado del terreno y las dificultades que tenían los medios terrestres para encontrar una pista para llegar hasta donde se encontraba el fuego, la caída de la noche (las llamas empezaron en torno a las nueve de la noche) y los cambios de dirección del viento.