El punta almeriense Ferrera remata contra el bloqueo turolense en el partido de Supercopa disputado el pasado mes de diciembre. Archivo - I.R.
A cinco días de que termine la fase regular de la máxima competición nacional de voleibol, el CV Teruel se prepara para recibir en su cancha al líder, el Unicaja Almería, sólidamente afianzado en su posición de hegemonía.
El partido promete ser un duelo a la altura de los contendientes, a pesar de que todos, jugadores, técnicos y aficionados, ya tengan la mirada puesta en el inicio de las semifinales del playoff por el título. Mientras que los andaluces ya tienen asegurada la primera posición, lo que les garantiza el factor campo, los turolenses deberán sumar al menos un punto para defender la tercera posición que ocupan actualmente.
La rivalidad entre las dos escuadras es máxima, sobre todo después de que el CV Teruel sorprendiese a los de Piero Molducci y se hiciera con el primer título de la temporada, la Supercopa, sobreponiéndose a una mala racha de resultados en la que registró hasta tres derrotas consecutivas. Los almerienses no querrán dejar pasar la oportunidad de intentar someter a su archi enemigo en la cancha donde se produjo el agravio. Sin embargo, una eventual victoria de Unicaja este sábado podría provocar que el Teruel -el equipo que sorprendió a todos en la Copa del Rey- terminase siendo cuarto y que ambos se cruzasen una semana después de semifinales.
La plantilla naranja llega en buenas condiciones a este momento de la competición, después de que su técnico, Miguel Rivera, haya aprovechado estas últimas semanas para dar descanso a los jugadores más castigados y minutos a los que han jugado menos esta temporada.
Jugadores como Balsa Radunovic ha sido uno de los pocos que no han tenido descanso estas jornadas, y lo ha aprovechado para reivindicarse como argumento ofensivo de su equipo, y ayer, antes de comenzar la sesión vespertina de entrenamiento aseguraba que "estoy en una buena condición y tenemos un buen partido para terminar la liga en casa" y aseguraba que el equipo "va a darlo todo para ganarlo, como siempre".
Los jugadores confesaban ayer que el choque del sábado servirá como "una prueba para nosotros antes del playoff", aunque el técnico Rivera restaba importancia a este detalle porque, en su opinión, a estas alturas de competición ya apenas queda lugar a la sorpresa, y descartaba que ni él ni Molducci se guardasen nada el sábado.
El propio capital del equipo, el colocados Xavi Folguera, reconocía que aunque "hemos sido un poco irregulares estas últimas semanas, todos somos conscientes de lo que se nos viene encima" y coincidía con sus compañeros en la conveniencia de jugar el último partido antes de las finales contra un equipo de la entidad de los andaluces.
Teruel necesita sumar al menos un punto este sábado en los Planos para asegurarse la tercera posición y no depender de lo que ocurra en el encuentro Ushuaïa Ibiza - Textil Santanderina. El entrenador de los turolenses sabe de la dificultad de la empresa, y es que en toda la competición los almerienses solo han encajado dos sets en dos ocasiones: contra Teruel en el último partido de la primera vuelta y frente a Palma, con quien terminó perdiendo en su única derrota en liga de este año. "Sabemos que va a ser un partido complicado pero bonito. Uno de esos partidos a los que a todo el mundo le gusta preparar y jugar", afirmo Rivera ayer.