Ejulve busca hacerse un hueco en el mercado turístico al abrir la cueva del Recuenco
Después de realizar un par de pruebas piloto en los años 2015 y 2016 con varias visitas organizadas puntuales a la Cueva del Recuenco para comprobar si el espacio puede incorporarse a la oferta turística local, el Ayuntamiento de Ejulve ha dado el paso para la explotación turística de este esta gruta mediante la intermediación de una empresa de turismo activo con la que colabora en diversos proyectos.
Este sábado se realizó una visita a la cavidad, una de las mejor valoradas en la provincia por los espeleólogos. El lugar se ha convertido en accesible después del acondicionamiento de la entrada y del sendero que conduce hasta la obertura. La inversión ha sido de 80.000 euros financiados con cargo al Fondo de Inversiones de Teruel (FITE) de 2016.
El mismo sábado se presentó el proyecto de promoción turística desarrollado por el Ayuntamiento. La cavidad tiene casi 800 metros de longitud (sólo 83 practicables), un desnivel de 55 metros y alberga varias salas -una de ellas de mayores dimensiones- con multitud de bellas formaciones.
La puesta en valor de esta cavidad como complemento a la oferta turística de Ejulve viene acompañada de una propuesta de desarrollo turístico que se basa en ofrecer a los turistas “experiencias innovadoras”. Una manera de marcar la diferencia con respecto a la oferta de localidades cercanas.
En cualquier caso, el Ayuntamiento de Ejulve, según apuntó el concejal de Turismo, José Manuel Salvador, tiene muy claro que no quiere atraer un turismo masivo a la cueva del Recuenco, pues su principal objetivo es mantenerla protegida y darla a conocer entre quienes practican deportes de aventura. En este sentido, el consistorio ha decidido que regulará mediante una ordenanza el uso y paso de visitas para evitar, si llegara el caso, una masificación del entorno.
La cueva del Recuenco se sitúa en la ladera norte del monte Majalinos, a media ascensión desde Ejulve. Se trata de un sistema endokárstico muy valorado por los espeleólogos de toda España que lo visitan con frecuencia. Se trata de una cueva fósil que presenta un desnivel de 55 metros y que permite recorrer hasta 83 metros. En su interior alberga varias salas, destacando una de 31 x 16 metros y 9 de altura pero. No obstante, más que por sus dimensiones, la gruta resulta interesante por ser hábitat de varias especies de murciélagos: murciélago mediterráneo de herradura (Rhinolophus euryale), murciélago grande de herradura (Rhinolophus ferrum-equinum) y murciélago pequeño de herradura (Rhinolophus hipposideros).
La especial relevancia de este cavernoso enclave radica en la fauna de quirópteros, de ahí su declaración como Lugar de Interés Comunitario (LIC).
Según Salvador, el Ayuntamiento regulará mediante una nueva ordenanza “el número de personas que podrán entrar por grupo y el número de grupos que podrán acceden a la cueva al mes, porque queremos conservarla. Se trata de un LIC”, justificó. La ordenanza “garantizará que podamos seguir disfrutando de nuestro patrimonio natural”, dijo el concejal. Las visitas también serán gestionadas a través de la misma empresa de turismo activo.
El Ayuntamiento de Ejulve confía en el potencial de sus recursos naturales, de ahí este proyecto. “Tenemos valores relevantes aquí y en todo nuestro entorno: senderos , paisajes impresionantes… y la manera de llamar la atención del turismo es apostar por experiencias innovadoras y diferentes”.
El consejero de Vertebración del Territorio, José Luis Soro, el presidente de la Comarca de Andorra, Antonio Donoso, entre otros, asistieron el sábado a la presentación del proyecto de explotación turística. Los vecinos también acudieron a la puesta de largo para conocer de primera mano esta iniciativa que ha generado “mucha ilusión”. La gente, dijo el concejal, “está muy contenta de que podamos abrirnos paso en el campo del turismo, porque pueblos de alrededor ya tienen una marca muy bien definida y a nosotros nos faltaba encontrarla”.