No es extraño que muchas localidades de la provincia de Teruel cuadrupliquen su población durante las fechas estivales, pero no es tan habitual que, de las en torno a 500 personas que están celebrando estos días las Fiestas en Honor a San Roque en Formiche Alto, una docena de adultos estén tocados por la vena artística y veintisiete niños sean dibujantes y pintores en ciernes.
Buena parte de la culpa la tuvo Rafael Benedito, un gran aficionado a la pintura de la localidad que dio clases a medio pueblo y que proyectó en su día lo que ahora es la novena edición de la Exposición Anual de Arte de Formiche Alto, que organiza la Asociación Cultural Cabezo Alto
Esta exposición, que está comisariada por Emilio Carpio, Juan Alberto Sancha y Víctor Tomás, como presidente de la asociación, ha reunido obras de doce personas que viven o que están muy vinculadas con la localidad
Puede verse de todo y hay obras de gran calidad, como la escultura de bronce obra de Manuel Escriche que representa la puesta del pañuelico. Escriche es un escultor de Formiche autor, entre otras obras, del monumento al carbonero que hay en su pueblo, de la escultura dedicada a los Amantes de Teruel frente a su Mausoleo en la capital, de algunas de las estatuillas del retablo mayor de la catedral de Teruel que fueron destruidas, o la escultura en homenaje a los donantes de sangre que puede verse en el parque de la Solidaridad, en Zaragoza.
Una de las obras más sorprendentes de las expuestas pertenece a Carmen Dolz. Aunque a primera vista (y a segunda) parece la pintura impresionista de una charca en el que crecen unos juntos y refleja unos montes de tierra roja, en realidad es una fotografía realizada sobre la puerta de un Seat 600 oxidada con unos arbustos delante. Es para mirarla cien veces
Otro de los pintores que expone es Elías Tobarra, que además ha sido el inductor de que, junto a la IX edición de la exposición, haya tenido lugar la primera edición de un concurso infantil de dibujo, en el que participaron 27 chavales, siendo Guillermo Fuertes y Aitana Prats los ganadores.
Tobarra es uno de los zaumaus (así se conoce a los de Formiche por su pasado carbonero) a los que Rafael Benedito contagió su pasión. "Soy electricista y pasé cuatro meses en la cama por una caída. En ese tiempo Rafael me enseñó a pintar y me metió ese veneno por las venas", recuerda con una sonrisa.
Autor:Miguel Ángel Artigas Gracia Teruel