Los presidentes de las comunidades autónomas de Castilla-La Mancha y Aragón, Emiliano García-Page y Javier Lambán, respectivamente, acordaron ayer el impulso de un protocolo de colaboración en sanidad, educación, carreteras, despoblación y otros servicios públicos esenciales.
García-Page y Lambán llegaron a este acuerdo tras reunirse en Cuenca, ciudad que acogerá el próximo viernes, 28 de octubre, la celebración de una cumbre de representantes de diversas autonomías afectadas por el problema del despoblamiento, según anunció el presidente castellanomanchego.
"Espero que esta reunión sirva para que miles de ciudadanos con dificultades para acceder a ciertos servicios públicos puedan ver la luz", aseveró Emiliano García-Page.
Por su parte, el presidente de Aragón admitió que ambas comunidades forman "parte de una España sometida al retroceso demográfico y a las consecuencias de la crisis económica", lo que intentan "revertir con todos los medios posibles".
En este sentido, apostó por "hacer atractivo el medio rural para que la gente venga a repoblar estas zonas y encuentre oportunidades en ellas".
El presidente aragonés incidió en la necesidad de combatir el despoblamiento "no a través de programas específicos dirigidos a ese fin", sino con cada una de las políticas sectoriales que desarrollen las administraciones.
Así, señaló la importancia de las políticas relacionadas con la educación, el desarrollo rural, la recuperación del patrimonio o la preservación del medio ambiente, todo ello, con el objetivo de ofrecer "oportunidades de generación de riqueza y de creación de empleo" para hacer atractivo el retorno al medio rural.
"Por ejemplo, que la banda ancha llegue a todos y cada uno de los núcleos del medio rural, apostar por revivir los pueblos pequeños", apuntó Lambán, que estuvo acompañado por el consejero de Presidencia, el turolense Vicente Guillén. "Será el cúmulo de actuaciones inteligentemente coordinadas entre sí el que brindará los éxitos" para este problema, puntualizó.
El objetivo del acuerdo alcanzado ayer, explicaron ambos presidentes autonómicos, es desarrollar una estrategia conjunta para revertir la situación de despoblamiento que afecta a éstas y otras regiones.
Otro "gran acuerdo"
En este sentido, García-Page señaló que el 28 de octubre buscarán la firma de otro "gran acuerdo con gobiernos de distinto color político" para fijar un objetivo común en la estrategia de recuperación y de sostenibilidad económica y social del mundo rural.
"Tenemos una determinación absoluta de aprovechar hasta el último céntimo de euro que la Unión Europea está poniendo encima de la mesa para impulsar el asentamiento poblacional, el desarrollo y, en definitiva, la igualdad de oportunidades que afecta a los ciudadanos en función de la geografía", aseveró el presidente autonómico.
Con ello, insistió en la importancia del próximo protocolo de colaboración que rubricarán Aragón y Castilla-La Mancha y que plasmará la cooperación interterritorial "muy mencionada y poco practicada en España" entre ambos territorios, especialmente en materia sanitaria. Con este objetivo, ambos se reunieron hace unos meses en Zaragoza.
Aragón ya cuenta con un protocolo similar con La Rioja, que también quiere hacer extensivo a Navarra y Cataluña.
Con ello, el presidente de Castilla-La Mancha resaltó que tanto él como Lambán representan "gobiernos moderados", que se sustentan en el acuerdo y que lo hacen en base a dos ideales: "La igualdad de oportunidades entre todos los españoles, con el rechazo, por consiguiente, a quien quiere romper esa igualdad, y la defensa de la unidad del país".
Autor:Redacción / Teruel