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Sergio Iborra, ilustrador y creativo: “Dedico el 80% de mi trabajo a hacer carteles y suelo ganar  el 15% de lo que me presento” Sergio Iborra, ilustrador y creativo: “Dedico el 80% de mi trabajo a hacer carteles y suelo ganar  el 15% de lo que me presento”
Sergio Iborra muestra en su portátil el cartel anunciador de la Semana Santa de la Ruta del Tambor y Bombo 2024

Sergio Iborra, ilustrador y creativo: “Dedico el 80% de mi trabajo a hacer carteles y suelo ganar el 15% de lo que me presento”

El diseñador ejerce como freelance bajo la marca El Ogro Bobo, con la que hace decoración de gran formato
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La ilustración digital es el arma de Sergio Iborra Colomer para ganar el 15% de los concursos de carteles a los que se presenta por toda España, a los que dedica el 80% de su tiempo como diseñador. Su trabajo Miradas de Pasión acaba de ser elegido por la Ruta del Tambor y Bombo como anunciador de la Semana Santa 2024. Tras dirigir el departamento creativo de la agencia de publicidad Comuniqualis e impartir clases en la escuela ESIC Business Marketing School de Valencia, actualmente trabaja como freelance bajo su marca El Ogro Bobo, especializada en la creatividad y  decoraciones de gran formato.

-¿Se había presentado antes al concurso de la Ruta?

-Era la primera vez. Me motivó el nivel que hay. Estuve estudiando los carteles de otros años y comprobé que había gente muy buena haciendo trabajos muy buenos, y que tenía bastante repercusión.

-La Semana Santa del Bajo Aragón está declarada Patrimonio de la Humanidad y es de Interés Turístico Internacional. Tiene la difusión garantizada.

-El presidente de la Ruta, Fernando Galve, me lo comentó. Lo que hice antes de confeccionar el cartel fue entrar en Youtube y empaparme de lo que es el sentimiento tamborilero y sus elementos más representativos para tener la mayor información.

-En el cartel figura un hombre, una mujer, Jesucristo, tambores, bombos y los tres colores de las túnicas de los nueve pueblos. Parece sobrio.

-No me gusta recargar los carteles porque si metes muchas cosas no se ve nada. Me gusta trabajar fondos blancos y que las figuras y personajes destaquen, lo cual es un riesgo porque un cartel tiene que tener color para que llame la atención. Me gusta estilizado, sencillo y elegante.

-¿Qué técnica emplea?

-Trabajo la ilustración digital, siempre con Illustrator y Photoshop. Tengo dos o tres estilos en función de lo que quiero representar. Ahora estoy preparando los carteles de Carnaval y cambia totalmente. Prima más el color y son más divertidos e informales.
 
-¿Gana muchos premios?

-Estoy enfocado mucho en este tema. A lo largo de mi trayectoria profesional me he dedicado a la parte comercial y, cuando uno tiene una edad, se cansa de vender. De modo que me hice freelance, aposté por la cartelería y le estoy dedicando el 80% de mi tiempo de trabajo. Tengo calculado que suelo ganar el 15% de lo que me presento. Hay que ser constante. Hay competencia.

-¿Cuántos carteles hace?

-Cada mes puedo hacer unos 20 carteles, unos 200 al año.

-¿Cuál es el triunfo del que está más orgulloso?

-Todos en general, porque cada uno tiene un trocito de mí. No me dejo llevar por la parte monetaria sino por la satisfacción de hacer una cosa chula. Uno de los que más satisfecho estoy de haber ganado es este de Teruel, sin duda, porque sabía que tenía posibilidades y, para ser de temática religiosa es muy rompedor. Y otro el de las fiestas de Mérida. También las fiestas de San Xoán en Carballo (Galicia), Moros y Cristianos de Paterna...

-¿Se ha llevado disgustos?

-Hay concursos en los que has dedicado un buen tiempo e ilusión al diseño y ha acabado ganando otro que no lo merecía. Cuando veo que el ganador es mejor que el mío lo aplaudo, pero hay veces que se lo han dado al hijo de no sé quién. Pues para eso no hagas el concurso. Me ha pasado en varios y me ha dolido. En uno me dijeron que imprimiera el cartel, que había quedado entre los tres finalistas y votaba la población. Sinceramente, el que ganó era un churro, pero era del pueblo. No me molesta que haya jurado popular, respeto las bases, pero estas cosas no me gustan.

-¿Tiene un premio aceptable el certamen de la Ruta?

-La mayoría de los premios están en torno a los 500-600 euros de media y este ya da un pequeño salto (800). Es interesante.

-¿Cómo es la relación con otros artistas?

-Nos vemos siempre en los mismos concursos y ha llegado un punto que, cuando ves un cartel, sabes de quién es. Esto es un inconveniente. Si el año que viene me quisiera presentar de nuevo a la Ruta con el estilo de este año, se me descartaría inmediatamente porque sería muy parecido. Lo que me he dado cuenta a raíz de mi trayectoria es la cantidad inmensa de fiestas que tenemos en España, es increíble. Me gusta ir a la entrega de premios, pero esta me coincide con Fallas.

-¿A qué se dedica cuando no hace carteles?

-Estoy especializado en decoraciones de gran formato para escenarios gigantes, como festivales, y centros comerciales. En Zaragoza hemos hecho algo para Gran Casa. Y a nivel particular hago un libreto de la Falla Ferroviaria de Xátiva (Valencia). Soy de la junta y me ha caído.




 

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