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Pilar Gamir, participante en el estudio Dipcan: “Me siento privilegiada de poder entrar en un estudio como este. Es una situación a vida o muerte” Pilar Gamir, participante en el estudio Dipcan: “Me siento privilegiada de poder entrar en un estudio como este. Es una situación a vida o muerte”
Pilar Gamir en uno de sus paseos por Teruel

Pilar Gamir, participante en el estudio Dipcan: “Me siento privilegiada de poder entrar en un estudio como este. Es una situación a vida o muerte”

Después de más de un año sufriendo dolores y probando tratamientos, ha recuperado calidad de vida
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Pilar Gamir (Teruel) es una de las personas que están participando en el estudio Dipcan, que es para pacientes con cáncer. Su mejoría es evidente y se agarra con fuerza a la vida, tras un largo periodo de incertidumbre.

-¿Cómo se dio cuenta de su problema?

-Llevaba ya un año con muchísimo dolor de espalda. Fui varias veces al médico y bueno, pues pastillas o... como trabajaba de limpiadora en la estación de tren, pues todo se achacaba a dolor muscular. Pero un día estaba en casa y dije, ostras, me voy a urgencias porque, es que este dolor no remite y cada vez va más. Entonces fue cuando fui y me detectaron el cáncer. Un 6 de mayo me lo detectaron.

-¿Y después?

-Allí me derivaron a Zaragoza. Me operaron porque tenía cáncer de pulmón con metástasis en la cabeza y en la espalda. El tumor de la cabeza salió por completo, o sea, se pudo extirpar todo, quitando parte de hueso, y el de la espalda tuvieron que poner placas y clavos porque el hueso ya estaba muy deteriorado. Entonces empezamos con tratamientos de radioterapia, de quimioterapia, de inmunoterapia y así estuvimos un año, pero todos los tests que se hacían, todos salían mal. Siempre el cáncer iba creciendo un poquito más, los huesos mal, el pulmón mal.

-¿Por qué participó en el estudio Dipcan?

-Mi oncóloga me propuso entrar en el proyecto. Pues porque para mí era como la luz que se ve al final del túnel. Porque si los tratamientos más novedosos los estaban poniendo y no había manera de, por lo menos, frenarlo, pues bueno, es una vía de escape, es una solución a tu problema. Vamos, que tampoco me lo pensé, no me lo pensé. Cuando me dijeron, ¿quieres entrar? Le dije que sí. Es que te tienes que agarrar a un clavo ardiendo cuando tienes este problema y ves que no hay ningún tipo de solución. Entonces se envió toda la documentación y tuve la suerte de que me cogieron. Además, este estudio, estaba enfocado a 2.000 personas de cáncer con metastasis. Entonces yo cumplí esos requisitos y tuve la suerte de entrar.

-¿Cuánto tiempo lleva en este proyecto?

-Empecé en junio del 2023 a hacerme todas las pruebas, que eran una analítica, una resonancia magnética nuclear y luego se enviaba desde aquí las muestras que me habían hecho de la biopsia. A raíz de eso, con esas pruebas, gracias a la inteligencia artificial, pues hacen un estudio de lo que es el DNI de lo que son los genes de las personas. Y ahí vieron el tipo de mutación que yo tenía.

-¿Es muy complicada esa mutación?

-Pues sí, es complicada. Mi mutación es el gen Ret. Lo que pasa es que se da entre un 1 y un 2% de los cánceres de pulmón. Es rara, es que es muy difícil este tipo de mutación. Entonces, tuve la suerte de que había una medicación para ese tipo de mutación. En septiembre 2023 me la empezaron a dar y bueno, una maravilla, una maravilla.

-¿Se ve como una heroina?

-No, para nada, no, heroína no. Estoy encantada. Lo que me siento es privilegiada de haber podido entrar en un estudio como este. Heroína no, no, no porque cuantas veces me dicen... Es que eres muy valiente. No, valiente no soy. Es una situación de vida o muerte; porque es esto es vida o muerte, creo que cualquier persona se agarraría a lo que fuera, a cualquier innovación, a donde te manden.

-Estaba en el momento oportuno con el estudio Dipcan ¿No?

-Me dijeron: Hay este tipo de medicación o hay este ensayo clínico y que te deriva al tratamiento. Dipcan lo que hace es decirte lo que tú tienes. Es un estudio muy personificado. Va a dirigido a cada persona.

No sé si ha sido el momento oportuno, pero creo que sí. Primero, porque dentro de lo malo de la enfermedad, porque ya está muy avanzada, hay una solución. Y lo bueno también es que ese medicamento se aprobó aquí en España en junio del 2023. Con lo cual, si he tenido suerte.

-¿Cómo se encuentra en este momento?

-Ahora estoy bien. Por lo menos tengo calidad de vida. Puedo salir a la calle, puedo conducir, puedo hacer algunas cosas en casa que antes estaba muy limitada. Tengo vida. He mejorado mucho, mucho, mucho, un montón. En agosto del 2023 no podía respirar. Iba del sofá a la cama y de la cama al sofá. No tenía fuerza en las piernas, estaba agotada. Y a los 15 días de empezar a tomarme esta medicación, por haber entrado en este estudio, yo ya me noté mejoría. La oncóloga tampoco se lo creía. Te digo yo que sí, que uno se lo nota.
 

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