Olga María Ramos, cantante y compositora: "El cuplé es la banda sonora de la época modernista y una parte de la historia musical española"
La artista asegura que conserva "una voz sin arrugas" y siente que todavía le queda mucha carrera por delanteOlga María Ramos, hija de Olga Ramos, ofreció este sábado en el Teatro Marín el espectáculo El cuplé, rey de la música modernista incluido en la Semana Modernista de Teruel. La cantante y compositora madrileña lucha como la última cupletista por conservar este género musical. Y, aunque está a punto de cumplir 75 años, dice que conserva “una voz sin arrugas” y que todavía tiene una gran carrera por delante.
-Además de actuar en el Teatro Marín, este fin de semana participó en varios actos de la Semana Modernista de Teruel. ¿Cómo ha sido su experiencia?
-Estoy emocionada y encantada. Me dedico a un género musical que estaba de moda entonces, que fue la banda sonora de la época modernista, y verme rodeada de personas tan involucradas con la misma ha sido un regalo. Desde la ronda del viernes, estuve llorando de emoción porque estaba viviendo la época que más adoro. Además, la gente ha sido muy cariñosa y respetuosa; me han tratado muy bien.
-Precisamente el título de su actuación fue El cuplé, rey de la música modernista...
-Es un espectáculo muy variado porque también lo es el cuplé en todas sus vertientes (cómico, pícaro, frívolo y sentimental) y en todos sus ritmos (foxtrot, vals, pasodoble... Además de su importancia musical, es una crónica de una época porque a través de ellos podemos descubrir cómo se vivía en España a principios del siglo XX. El público se lo pasó muy bien y yo también. El cuplé es mi vida y lucho porque permanezca en la memoria musical de los españoles, también a través de la página www.olgamariaramos.es. Conservo una voz sin arrugas, lo que me permite hacer un género que me fascina.
-¿Qué situación atraviesa este género musical?
-Sinceramente, y no porque sea inmodesta o engreída, soy la única que mantengo viva esta música que me enseñó mi madre, Olga Ramos. Ella fue una gran intérprete, fue mi escuela y mi referente. También soy compositora, con lo que he tratado de adaptarlo a los tiempos modernos para que vuelva a renacer. Además, aunque se asocia a un tiempo pasado, lo cierto es que fascina a la gente joven. Cuando canto La pulga, El sátiro del ABC o El ojo del cristal a capella, la gente se parte de risa. Yo no me retiro y cada vez me encuentro mejor de voz. Aunque el 19 de diciembre cumpliré 75 años, siento que me queda mucha carrera por delante.
Cualidades necesarias
-¿Qué cualidades hacen falta para ser cupletista?
-Es necesario interpretarlo con autenticidad, no se puede hacer de cualquier manera. Mi nieta tiene 15 años, tiene sentido de la música y le gusta componer. ¡No canta reguetón! Pero me gustaría que aparecieran más voces, alguna chica que cantara bien para enseñarle, que tuviera una voz apropiada y dotes de actriz. Aunque sean canciones pícaras, hay que interpretarlas con finura. Hace falta mucha inteligencia para cantar con frivolidad y picardía y, poco a poco, llegar hasta el cuplé sentimental.
-¿Y qué voz debería tener?
-La zarzuela y la ópera son mi pasión, pero una cupletista no debe tener voz de soprano porque la tendría que recoger. Debe tener una voz delicada y tierna, como la que tenía mi madre. Pero también tenemos el caso de Sara Montiel, que alcanzó un éxito extraordinario sin tener voz de cupletista porque hipnotizaba a la cámara.
-Seguir los pasos de su madre es un orgullo, pero supongo que también una gran responsabilidad...
-Es una enorme responsabilidad. Le debo algo que no tiene precio, la escuela que supuso su local, Las noches del cuplé, ubicado en el número 51 de la calle de La Palma en Madrid. Esa escuela se la debo a mi madre, pero no así la promoción. A mí no me abrió el camino, sino al contrario. Fue más duro demostrar que estaba a la altura y que soy una digna heredera. Solo al final, muy al final, ella me dijo: “Si tú no lo haces, ¿quién lo va a hacer?”.
-¿Quedan sitios donde interpretarlo?
-En el momento en que me presento en cualquier teatro, generalmente se llena. Por eso, pido a las autoridades que lo tengan en cuenta y que fomenten el cuplé porque no se puede perder esa parte de la historia musical española. Por eso estoy agradecida al Ayuntamiento de Teruel, a la Fundación Bodas de Isabel y a mi amiga Mamen Casinos, que hicieran posible mi actuación en el Teatro Marín.
-Además, ha escrito dos libros sobre el género...
-Y preparo un tercero sobre las mujeres que se subieron al escenario en los primeros años del siglo XX, que rompieron moldes, que fueron unas empoderadas sin tener el poder. La mayoría tenían un origen humilde, pero llegaron a ser divas.