Marina Subirats, socióloga y experta en educación y perspectiva de género: "Los insultos a Irene Montero ponen de manifiesto lo que nos espera si Vox alcanza el poder"

Marina Subirats es socióloga y ha  sido directora del Instituto de la Mujer del Ministerio de Asuntos Sociales y concejala de Educación en Barcelona. Experta en educación y asuntos de género, ha participado en el Congreso del Bienestar (18 horas) para conversar sobre amor y dinero.

-En la independencia económica femenina hemos avanzado algo...
-Hemos dejado atrás la sociedad donde solo trabajaba el hombre y eso le autorizaba para administrar el dinero. Pero aún así subsisten modelos en el que muchos hombres siguen ganando más dinero y eso les sigue legitimando. En muchas parejas la mujer dispone del presupuesto pequeño, para la comida, los gastos del hogar o la ropa, y el hombre decide sobre los gastos grandes como comprar un coche o un electrodoméstico.

-Al margen de quien aporte los ingresos, mis padres salían adelante con un sueldo y en mi casa son necesarios dos. No sé qué hemos hecho mal...
-Yo siempre digo que quien más ha ganado con la incorporación de la mujer al mundo laboral son los bancos y los constructores. Desde que las mujeres hemos empezado a trabajar, con gran esfuerzo para compaginar vida familiar y profesional, una sola persona no puede pagarse una casa. El motivo es que los precios de la vivienda se dispararon de forma escandalosa. Hay numerosos estudios que dicen que hasta los 30 años casi nadie puede plantearse acceder a una vivienda si no cuenta con el sueldo de su pareja.

-¿La independencia económica está relacionada con el aumento de las separaciones?
-Y con el cambio de mentalidad. Antes se privilegiaba el compromiso y el deseo no contaba y se reprimía. Ahora es justo al revés, y la consecuencia es que la pareja actual es frágil.

-Pero el compromiso no afecta solo a la pareja...
-Debemos encontrar un equilibrio. Antes cuando el deseo amenazaba la pareja había que reprimirlo, en el caso de los hombres menos, pero debían darle rienda suelta más o menos a escondidas. Como ha sido siempre así, el cambio de mentalidad es como unos zapatos nuevos, y nos hemos lanzado a privilegiar el deseo por encima de cualquier otra cosa, quizá pasándonos de la raya. Porque efectivamente, una separación tiene consecuencias para los hijos y también para los miembros de la pareja.

Igualdad

-¿Hasta qué punto hemos avanzado en materia de igualdad en la educación?
-Desde que en los 70 se puso en marcha la escuela mixta la mujer ha dado un inmenso alto en la llegada a la universidad. Pero el sistema sigue siendo androcéntrico, creado por hombres en base a sus deseos y necesidades, por lo que las mujeres seguimos siendo un poco realquiladas, con el sentimiento de culpabilidad de ser el segundo sexo, como decía Simone de Beauvoir. Eso terminará tras un profundo cambio cultural que tenemos que inculcarles a los niños.

-¿Ellos siguen reproduciendo patrones de violencia machista?
-Tenemos un gravísimo problema de violencia, abusos y violaciones. Pero es que además los hombres olvidan que, en realidad, ellos son grandes víctimas del machismo.

-¿A qué se refiere?
-A los tres años empiezan a morir más hombres que mujeres, y a los 20 años mueren tres hombres por cada mujer. ¿Y de qué mueren los hombres jóvenes? De suicidios, de accidentes de tráfico, por las drogas, por homicidios -los hombres se matan más entre ellos de lo que matan a las mujeres incluso- y de deportes de riesgo. La esperanza de vida masculina es de media 5 años menos que la femenina, y esto es por el impacto de las muertes causadas por actitudes que históricamente se han relacionado con la masculinidad. Incluso muchas enfermedades han estado relacionadas con esto, como el alcoholismo.

-¿Cómo interpreta los insultos que Carla Toscano (Vox) profirió el jueves contra la ministra de Igualdad?
-Fue terrible. Pero tiene una ventaja, y es que es una demostración de lo que son estas personas, y de lo que nos espera si algún día Vox llega al poder. Yo nací con el Franquismo y sé lo que es vivir en una sociedad reprimida. Me duele que estas mujeres no se den cuenta de que sin el esfuerzo de las que hemos luchado y seguimos luchando, e Irene Montero es una de ellas, Carla Toscano no estaría ocupando un cargo. Mujeres que para ser buenas tienen que demostrar “hombría”, como ha dicho otro diputado de ese partido. Tengo la esperanza de que cuanto más se pone en evidencia lo que es Vox, más personas abren los ojos.

-¿Y cómo interpreta que, aunque ese no sea el objetivo, la Ley del ‘Solo sí es sí’ esté provocando reducciones en algunas penas?
-Creo que es un problema técnico de mala resolución por el redactado de Ley. Muchas asociaciones feministas advirtieron de que podría suceder, e Irene Montero debería haberlas escuchado, pero la intención evidente del ministerio es dar más seguridad a la mujer, y me parece absurdo aprovechar cualquier resquicio para montar un escandalazo. Habrá que escuchar a los jueces y resolver técnicamente lo que haya que resolver. Pero esto ha pasado con más leyes . Todo lo que se refiere a los derechos de las mujeres siempre acaba en escándalo.