Mairot, músico: “Hay que experimentar, no tiene sentido componer canciones que ya ha hecho alguien antes”

Mario Álvarez (Mairot) nació en Zaragoza pero su familia paterna es turolense y muy vinculada a Guadalaviar. Hace dos semanas fue segundo en el certamen PopyRock de Zaragoza, donde ganó el premio a Mejor Voz. Con 17 años mezcla rap, guitarra acústica y música electrónica; compone y autoproduce sus propios temas y en su perfil de Spotify tiene auténticas joyas, canciones en las que suceden cosas.

-Durante los dos últimos años ha sido uno de los grandes del PopyRock zaragozano...

-En 2021 gané la categoría especial Z16 para músicos de 16 años. Y en 2022 he ganado el segundo premio en la categoría general, en la que compiten músicos de entre 14 y 30 años, y además me dieron el Premio a la Mejor Voz.

-La competencia en ese concurso es enorme, tanto en calidad como en cantidad...

-Al PopyRock te presentas con una canción en MP3 ya producida, en mi caso Calpe, y de todos los participantes, que este año han sido cerca de cincuenta, el jurado escoge ocho semifinalistas. Entonces hicimos un concierto, en el que yo toqué seis temas míos y dos covers -versiones-, y tres de nosotros pasamos en la final. Y en el concierto final, donde yo pude tocar una canción más, fue donde quedé segundo, detrás de un grupo de metal -Perfect Blue-que es realmente bueno. Pero la experiencia fue genial, porque mi objetivo era llegar hasta esa final, donde ya obtienes cierto reconocimiento, te dan un premio de 1.500 euros y te garantizan al menos un concierto durante las próximas Fiestas del Pilar.

-Tiene un estilo difícilmente definible... vienes del rap y muchos de tus temas tienen su flow, pero también suenas a pop, electrónica, incluso tienes algún tema flamenco...

-El tema es que yo escucho muchísima música, estoy todo el tiempo escuchando música y de una gran variedad de estilos. Y que eso se nota a la hora de componer. Los temas que tengo de hace un par de años son más raperos, ahora estoy en plena metamorfosis hacia sonidos más melódicos, Dame de comer, que es más flamenca, fue pura experimentación... La verdad es  que tengo influencias muy variadas, no quiero definirme ni decantarme por un solo estilo, porque además tengo 17 años y creo que puedo permitirme el lujo de probar cosas distintas.

-¿Quieres dedicarte a la música profesionalmente?

-Estoy en 2º de Bachillerato y laboralmente voy a ir por otros derroteros. Pero tomo clases de guitarra y en casa tengo un miniestudio en el que me gusta producir, grabar mis cosas, probar sonidos y hacer canciones. La música para mí es una actividad de ocio, pero si lo que hago le va gustando a la gente, pues quizá vaya invirtiendo más horas en ella.

-¿Qué referencias musicales tiene?

-Últimamente escucho mucho C. Tangana, especialmente desde que sacó El Madrileño, pero también me gustan mucho el rapero zaragozano Sarif, a quien conocí en un concierto en Teruel, Michael Jackson o Jorge Drexler, por decirte algunos. Pero algo que tengo muy presente siempre a la hora de componer es que los temas tienen que tener algo especial, algo, algún detalle, porque no tiene sentido componer canciones que ya ha hecho alguien antes.

-¿Considera que un músico debe autoproducirse para ser un verdadero músico?

-Valoro mucho la producción, y me encanta, pero si un músico no tiene un buen directo, creo que significa que la producción es mentir un poco. Por ejemplo me encanta Billie Eilish, sobre todo por lo bien producidas que están sus canciones, pero si resulta que las produce su hermano, pues realmente el mérito es de Finneas. Yo respeto el trabajo de todo el mundo pero a mi me gusta producirme y mezclarme a mí... y si luego tienes la opción de que te produzca otra persona, cuanto más sepas de producción mejor vas a trabajar con él porque sabrás decirle exactamente lo que quieres. Un buen ejemplo de esto es El Madrileño de C. Tangana. El productor es Alizzz, pero se nota que C. Tangana sabe muchísimo de producción.

-¿Cómo compone las letras?

-Hay canciones como La historia de una lágrima que va por delante la historia que quieres contar, y le pones mucho cariño aunque luego la modificas lo que haga falta, porque al final tienes que meter el mensaje en tantas sílabas, ni más ni menos, y tienes que hacer una estructura de estrofas, estribillos y puentes para que el público no se pierda. Y otros temas como Calpe, o Vapor, lo que quieres es producir a saco, sacar buenos sonidos y una armonía atractiva y original. Y la letra va detrás, a veces casi para rellenar. Yo creo que eso lo hace todo el mundo, otra cosa es que luego te montes una película y quieras hacer creer que todas tus letras son superfilosóficas.

-¿Qué proyectos lleva entre manos?

-Pues después de cambiarme el nombre de Sifo, que tiene más que ver con una etapa en la que estaba más volcado con el rap, a Mairot, estoy poniéndome un poco las pilas con Spotify, Youtube y las redes sociales. Y a partir de ahí voy a ir sacando singles y probando cosas. Ahora estoy componiendo cosas con un estilo parecido a Cardellino, que mezcla rap con bossanova y sonidos brasileños... Y cuando tenga varias canciones con cierta coherencia quizá me anime a agruparlas en un EP.