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Lluís Rajadell, periodista y escritor turolense: “La helada de 1956 no arruinó una cosecha, 
sino que ‘quemó la fábrica’” Lluís Rajadell, periodista y escritor turolense: “La helada de 1956 no arruinó una cosecha, 
sino que ‘quemó la fábrica’”
Imagen del periodista turolense Lluís Rajadell. M. A.

Lluís Rajadell, periodista y escritor turolense: “La helada de 1956 no arruinó una cosecha, sino que ‘quemó la fábrica’”

Comuniter reedita el libro ‘1956, L’any de la Gelada’, que se presenta hoy (12.45 h.) en Valderrobres
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El escritor y periodista turolense Lluís Rajadell presentó en la Casa de Cultura de Valderrobres la reedición de 1956, Lany de la Gelada, libro publicado en 2007 por Repavalde y que ahora saca a la venta Comuniter, sobre la gran helada que en ese año destruyó el olivar en el Matarraña y provocó un dramático éxodo hacia Cataluña. Pueblos como Torre las Arcas perdieron un tercio de su población en la década siguiente.

- ¿No le sugirió Comuniter que tradujera el libro al castellano para publicar la segunda edición?

- No, al revés. Es la primera vez que Comuniter edita un libro en catalán, y yo diría que es el primero que edita en esa lengua una editorial comercial aragonesa, no una asociación o institución, aunque no puedo asegurarlo con total certeza. 

- ¿Y no se plantea traducirlo para llegar a un público más amplio?

- Quizá tuviera interés hacer un libro en castellano sobre la helada del olivar de 1956 de todo el Bajo Aragón. Ampliar la investigación a la repercusión de la helada a toda la zona olivarera y hacerla en castellano. Porque el enfoque que yo le doy al libro es muy local, con datos de producción, demográficos, fotos y testimonios siempre referidos al Matarraña, y no sé si tendría mucho sentido traducirla. 

- Porque el fenómeno de la helada del 56 trascendió al Matarraña...

- Claro. Afectó a todo el olivar de la provincia; el Bajo Aragón, Bajo Martín, Andorra... media provincia se vio muy afectada. Las personas mayores de por allí todavía cuentan muchas historias sobre esa helada. 

- ¿Ha añadido elementos nuevos a esta reedición de 1956. Lany de la gelada?

- He añadido algún reportaje o información que se publicó con motivo del 60 aniversario. Cito algún texto que ha publicado Vicente Aupí, y también un documento que me apareció después, que es un plan de mejora del olivar que aprobaron los sindicatos franquistas en 1956 que proponía medidas para salir de la crisis provocada por la helada, como cambiar la variedad del olivo, mejorar las podas... Ese plan formó parte a su vez de un plan más amplio que se hizo al año siguiente, y que se llamó Plan Teruel. Que yo sepa es el primer precedente de un plan para el desarrollo de la economía y la demografía de la provincia, al estilo del Plan Especial de Teruel o el actual FITE. 

- ¿Se llegó a aplicar?

- Ni siquiera la parte referida a la mejora del olivar, porque establecía cambiar la variedad del olivo empeltre por otro más resistente, entre otras cosas, que no se llegaron a hacer. 

- El libro no es un relato histórico al uso, tampoco es una novela... ¿cómo se estructuran sus contenidos?

- Lo planteé como un reportaje periodístico extenso. No creo que sea un libro de historia o científico. En una primera parte explico como era la economía antes de la helada, basada en el olivo que era el único cultivo que producía excedentes; una segunda parte explica la helada en sí, con fríos que llegaron a -17 grados, con días en los que la máximas fueron -5 grados; una tercera parte explica los efectos del frío en el olivar, que provoca básicamente que se muera porque a partir de -8 grados se hiela y se muere el árbol; y una cuarta parte sobre la emigración. Al perderse la principal y casi única fuente de ingresos de los pueblos las familias marcharon en masa, sobre todo a Barcelona, a la agricultura o la industria. La desbandada de la que hablaban muchas personas. 

- ¿Un solo año de heladas fue capaz de diezmar la población de la zona?

- Claro. Es que ese frío provoca la muerte del árbol. No es que pierdas una cosecha, es que se quema la fábrica. Hubo tres oleadas de frío siberiano con temperaturas muy inferiores a los 8 bajo cero que aguanta el olivo, casi continuas. Acabó con casi todos.

- ¿Sería diferente el Matarraña de hoy si la helada de 1956 no hubiera provocado esa ‘desbandada’?

- Creo que no. Cuando llegó el desarrollismo en España en los años 60, poco después, la gente se marchó también de los pueblos. No ya de las zonas olivareras sino de toda la España interior y rural. Quizá en el Matarraña y el Bajo Aragón se anticipó ese éxodo unos años por efecto de la helada, pero el resultado al final fue el mismo. Y no creo que, de no haberse producido la helada, la demografía actual de la zona, fuera muy diferente a la que es. Quizá lo único que podría ser distinto es el paisaje, porque seguiría habiendo muchos olivares plantados. 

- ¿En qué proyecto anda metido? ¿Alguna novedad para los próximos meses?

- Pues ya está mandado a imprenta un nuevo libro sobre la revolución anarquista de 1933 en el Bajo Aragón y el Matarraña. Los anarquistas de la CNT se sublevaron para implantar el nuevo orden de fraternidad y se apoderaron de Valderrobres, rodearon el cuartel de la Guardia Civil y lo asediaron durante dos días. Luego llegó el ejército del Gobierno y hubo una ola de represión, en un episodio bastante traumático. Encontré en el Archivo Histórico Provincial el sumario que abrieron a los revolucionarios de Beceite y Valderrobres, los pueblos más significados de ese estallido. Este libro está escrito junto a Fermín Escribano, que se ocupa del Bajo Aragón; Alcorisa, Calanda, Alcañiz o Mas de las Matas. Lo publicará Comuniter imagino que a lo largo de este año.